Nataliya estiró la mano, sin poder disimular la avidez de su gesto.
-Sí, sí, esa agua estar bien.
Prácticamente le arrebató el vaso de las manos a Linda y lo bebió a grandes tragos, con la cabeza echada hacia atrás. Después le devolvió el vaso a la cocinera, mientras suspiraba para recuperar el aliento.
-Gracias -le dijo y se sentó en una silla cercana.
- Toma un poco más despacio que te vas a atragantar... más despacio niña. Linda se acerca a Nataliya para comprobar que todo esté bien.
Mira al cocinero para buscar una aprobación de su parte y para estar segura de que no era la única que notaba la desesperación de Nataliya por el agua.
Respondo sin mucho contenido porque sigo de vacaciones y vine tan sólo por unos segundos... :P
si quieres puedes esperar a que vuelva... o sino sigue describiendo los sentimientos de siempre sobre el agua:
excitación
casi adicción
fuerza
felicidad
alegría
Nataliya se sentó, pero una incontrolable oleada de energía invadió su cuerpo, obligándola a ponerse de pie, como impulsada por un resorte. La ya familiar sensación de euforia y omnipotencia volvía a apoderarse de ella. Sacudió las piernas, necesitaba moverse. Las miradas extrañadas de los cocineros no le pasaron desapercibidas, pero no les dio importancia. Lo que no entendía era como era posible que cualquier tipo de agua le causase esa sensación. Le habían dado agua corriente del grifo. Era demasiado pensar que pudiesen haberla adulterado de alguna manera. ¿Es que cualquier agua le causaba esa sensación?
-¿Poder pedirles un favor? -les dijo a lo cocineros, mientras daba saltitos en el lugar, para liberar energía-. ¿No tener agua envasada?
¿Qué haces respondiendo turnos? Anda a esquiar!!! XDDDDDDDD
- Claro que tenemos agua envasada... Responde el cocinero manteniendo las miradas con la ayudante de cocina.
- Puedo darte de las botellas individuales que repartimos junto con los almuerzos, pero... siempre que quieras puedes venir a pedir a la cocina o utilizar tu intercomunicador desde tu habitación.
El mismo cocinero se acercó hasta la heladera y tomó un agua de 600ml para dárselo directamente a Nataliya.
- Aquí tienes.
Ya he vuelto de esquiar... por las noches no hay mucho para hacer por aquí :P
-Gracias -le dijo Nataliya al cocinero, quitándole la botella de las manos, con más brusquedad de la que pretendía-. Es que el agua del grifo tener mucho cloro. No hacer bien. -se apresuró a aclarar, tras notar la mirada atónita de los cocineros.
Abrió la botella, con dedos torpes por el apuro y bebió. Esta vez tratando de disimular un poco su desesperación.
¿Es agua de marca? ¿Siente lo mismo que con el agua del grfo?
Cita:
Pobrecito. Vos ahí aburriéndote en Bariloche y yo acá, trabajando alegremente. XDDDD.
- Veo que tenías más sed de la que esperaba... Puedes llevarte más si así lo prefieres. Pero te recomiendo que llames por el interno a la cocina para que te acerquemos más así está bien fresca como la de la heladera.
El agua produce el mismo efecto, aunque de a poco Nataliya siente que está bebiendo demasiada agua para su gusto y una sensación de ahogo invade su estómago y garganta. Quizá había sido demasiada agua para tan poco tiempo. Ahora sentía un frio bastante controlable, pero los "chuchos" eran evidentes.
PD: estoy en Ushuaia no en Bariloche :PPPPPP
-Ya no querer más, gracias -respondió Nataliya al ofrecimiento del cocinero. Tuvo que haces un gran esfuerzo para obligarse a tomar asiento y a estarse quieta. Chuchos de frío recorrieron su cuerpo, ocasionándole ligeros espasmos. Había comprobado que cualquier agua, sin importar su origen le causaba esos efectos. ¿Cómo era posible? Eso nunca le había pasado hasta que bebió de la botella de aquel sujeto repugnante, en las calles de Marbella. Experimentar esas maravillosas sensaciones cada vez que bebiera agua no era una perspectiva desagradable, pero no dejaba de intrigarla.
-Al final no me haber dicho cuanta gente vivir aquí -le recordó al cocinero, tratando de sacarse el tema del agua de la cabeza, por el momento. Debía concentrarse en la manera de salir de allí.
Cita:
Ahora entiendo. Si estuvieras en Bariloche sí tendrías cosas que hacer a la noche. XDDDD
--------------- El viaje hacia Bobe --------------------
Los días transcurrieron en la mansión del Dr. Haffling sin que las mujeres pudieran hacer nada para darse a la fuga o gozar de la libertad que tanto anhelaban desde el momento en que una y cada una de ellas había sido raptada de sus vidas cotidianas.
Aquella tarde era cuando las tres, vestidas con trajes negros muy flexibles, bajaban las escalerillas de ese jet privado y pisaban suelo Argentino.
Diez horas de vuelo les habían mantenido aisladas nuevamente, ahora sabían que el próximo paso era esperar una veintena más en una Cross Fox atravesando las rutas Argentinas para llegar a destino: La Pampa.
El diálogo lo tenían bien aprendido... parecía que lo habían repasado miles de veces.
Cuando llegaran a la mansión de Bobe, se encontrarían con una empresa sin fines de lucro. Un lugar donde se acogía a las personas con los "estúpidos poderes paranormales" como solían llamarlos entre algunas de las personas que se habían encontrado.
Deberían infiltrarse haciéndose pasar por interesadas en el plan de ingreso.
Una vez llegaron las tres a destino, pasaron su primera noche en un hotel.
No había momento en que no estuvieran vigiladas. Cuatro guardias se apostaban frente a la entrada del hotel en un carro negro esperando que amaneciera para continuar el viaje, o lo que restaba de él... unos cuantos minutos hasta el gran destino.
El edificio era inmenso y a comparación de las pocas fotos que habían visto en la carpeta que cada una tenía, estaba mucho más aislado del mundo de lo que parecía, lo cual no era buena señal, no por lo menos para el escape.
Las tres damas, entran al edificio al unísono dirigiéndose a la recepción, donde una mujer y un hombre esperaban derás de sus computadores.
Nataliya acabaría con todo este asunto de una buena vez. Ya estaba harta de todos estos viajes y manipulaciones. ¿Dónde demonios las había traído ahora? No pensaba quedarse allí, ni el tiempo suficiente para averiguarlo. Se adelantó a Loreley y Lyanna, acercándose al escritorio de la recepción.
-Buenos días. Nosotras necesitar hablar con Señora Bobe, por favor -le solicitó a los recepcionistas-. Ser muy importante asunto.
Estos no será otros Superrecepcionistas, ¿no? XD
Por las dudas,
recuerden que aceptaron la misión de ir a matar a bobe con la esperanza d epoder escapar.
ahora mismo estan en la mansion de bobe. No seria muy inteligente no seguir con el plan dado que fuera las espera la "gente" del dr. haffling
y dentro muchos guardias y gente desconfiada que confía en que son fenómenos que quieren aprender sobre sus poderes.
- Muy buenos días y bienvenidos a la residencia. ¿Vienen todos ustedes juntos?
La recepcionista se acerca a su ordenador para anotar los datos de los ingresantes.
Mientras tanto, un muchacho detrás de ella toma el teléfono y llama a alguien
- ¿Señora Bobe?. Parece que tenemos nuevos aplicantes.
Cita:
Bueno, Nataliya no es la persona más brillante del mundo XD. Evidentemente planea confesarle todo a Bobe y mostrarle las carpetas que les dieron. Si alguien quiere detenerla, puede hacerlo.
Hies bonito... ¿Te acuerdas de mí?... Estoy de vuelta. Y sí, venimos todas juntas. Me acerco al mostrador mientras miro a la segunda mujer detrás del ordenador. No estaba allí la última vez que estuve en la mansión.
Discúlpame que te asuste así... pero es urgente.
Me aliso el pelo con los dedos mientras pesañeo con sensualidad.
- Bobe está en camino. Por favor esperen por el Hall de entrada.
comienzan a escribir en el capítulo:
2.4 -
Una mujer anciana y tres personas más aparecen por las escaleras.
Una de ellas morocha de tez blanca, otra rubia y un muchacho de unos veinte años.
La anciana caminaba lentamente hacia la recepción cuando pregunta por las nuevas invitadas.