Pensando mas en Avinia que en los problemas del enano, asiento ante las preguntas que hace la chica mientras observo el mapa con detenimiento.
Los bosques siempre son lugares peligrosos, tengan o no tengan trasgos. Unos enanos han desaparecido en una misión pacífica.
Espero a ver si contesta el enano, y acto seguido digo:
-Para mi, la forma mas fácil para investigar esto, sería realizar el mismo itinerario que los enanos, eso si, siempre con le consentimiento del rey Enano.
Después de un rato callada, observando, hablo.
- Yo opino lo mismo. Lo mejor es hacer la misma ruta e intentar encontrar alguna prueba de si hubo lucha en algún punto o si nos lleva hacia algún lugar concreto alguna pista en el camino. No se nos debe escapar nada.
Miro a mis nuevos compañeros para ver lo que opinana. Está claro que nos esperan días difíciles.
Muy orgulloso Dain guardó silencio mientras observaba el mapa junto a los otros asistentes. Esperaba una mejor respuesta del señor enano, quizá una respuesta más afectuosa... Se sentía solo de hace un tiempo, sin poder pisar su hogar ni conocer otro enano, o quizás alguna enana.
Cuando escuchó que la ruta de viaje cruzaba el bosque de los elfos, entró en desconfianza inmediatamente. Se juraba en su mente que eran los elfos quienes habían atacado a Balin. Casi como un hecho. Escuchó a los otros hablar sobre el plan (seguí desconfiando de tomar la misma ruta cruzando el bosque), y miró a la elfa que permanecía callada, "Seguro que sabe algo, no me atrae para nada esta compañera, ¿y si me tienden una emboscada los elfos?".
Irritado por la espera, Dain se adelanta y alza la voz.
"Y bien, ¿tomaremos alguna decisión en este momento? ¿Qué es lo que nos propones gran señor?"
Luego pensó que quizá había sido demasiado brusco, por una parte buscaba también ganarse el respeto del señor enano.
La joven le pregunta directamente acerca de Balin, se mesa un poco la barba antes de darle la contestación que precisa.
- Las últimas noticias fueron su partida y eso hace más de una semana ya. A la segunda pregunta; no, no tenía que dar parte a nadie para que nos hiciera llegar noticias, simplemente volvería una vez acabado su cometido.
El enano permanece callado mientras los aventureros discuten el plan a seguir, parece que bastante afines los unos con los otros, eso le gusta.
Por otro lado el silencio de otros le irrita, le molesta en demasía. No obstante hace de tripas corazón para permanecer callado.
Cuando Adalardos le pregunta por la ruta se limita a contestar.
- La ruta que decidais me parecerá bien, siempre y cuando llegueis a vuestro cometido. Los caminos no están vetados en esta misión, tampoco los rios o incluso el cielo si dispusierais de algún tipo de habilidad que os permitiera volar.
Después vuelve a permanecer callado unos instantes hasta que todos han acabado de hablar.
- Si no requerís nada más, por mi parte está todo dicho.
Hago otra reverencia al enano, y le digo:
-Señores, la misión está servida. Preparémonos para partir de inmediato.- Me giro por última vez hacia el enano, y le pregunto:- Gran señor, supongo que ya nos tendrá preparado todo lo necesario para el viaje, y que podamos partir de inmediato, ¿verdad?, no queremos perder mas tiempo aquí, tenemos que encontrar a sus compañeros. -hago otra reverencia- muchas gracias por darnos esta oportunidad de poder apretar los lazos entre nuestros pueblos, espero no decepcionarle.
En cuanto nos da la contestación, le digo a todos:
-Pongámonos en camino, ya haremos noche en algún claro.
Siempre puedo encontrar a la chica que busco por el camino.
- Pongamonos en camino pues.
Me giro para mirar como Rock se empieza a impacientar en la puerta. Miro de nuevo a mis compñaeros de vaje. Somos dispares y habrá que ponerse de acuerdo en muchas cosas.
- Preparemos todo lo que necesitemos para el camino. No debemos demorar más esto.