Tamara se levanta de la mesa y, tratando de que sus tacones de aguja no se enganchen con ninguna grieta del suelo, se acerca hacia el pozo y trata de asomarse.
Así que esto es Bajomontaña, ¿no? Pues creo que tampoco hay para tanto...
Tras echar un vistazo, se vuelve hacia el gran público de la taberna.
A ver, ¿Cón quién tengo que hablar para que yo y mi grupo podamos meternos ahí abajo?
Enarcando una de sus cejas con asombro, Gunnar observa la plataforma anclada al dintel del techo sin tenerlas todas consigo.
-Me esperaba algo más... más... no sé, algo más.
-Esto... antes de bajar a enfrentarnos con lo desconocido, creo que deberíamos brindar una última vez al menos--propone el enano de la cadena armada a sus infatigables compañeros con la intención de ganar tiempo mientras analiza mentalmente la supuesta fiabilidad de la estructura.
Es el propio Durnan el que sale de la barra para llevaros las bebidas.
Bien caballeros, señorita.- dice saludaando con la cabeza. Según parece teneis intención de bajar a Bajomontaña. Soy Durnan y es conmigo con el que teneis que hablar sobre ello. Que os bajemos os costará una moneda de oro cada uno, y con respecto a lo que haya abajo lo único que os diré es que si os rendís pronto y quereis volver, os costará otra moneda.
¿Alguna pregunta?
Sí, solamente una, ¿cuándo podemos empezar? dijo Pandarg poniendo cinco monedas de oro sobre la mesa y ventilándose de un trago su cerveza.
Durnan sonrió, puede que de recordar viejos momentos, antiguas aventuras......pues cuando me pagueis las bebidas
Pandarg vació lo que le quedaba de la bolsa mientras decía a sus compañeros Ya lo repondremos con el primer tesoro que saqueemos.
Tras lo cual, miró a Durnan y dijo Que vayan activando la maquinaria, que bajamos a Bajomontaña.
Durnan cojió las monedas y se giró hacia la clientela.....tenemos nuevos aspirantes a aventureros, preparadlo para el descenso.
La gente en la posada empezó a vitorear y vociferar, golpeando las mesas con las palma de las manos y con algún que otro escudo.
Uno de ellos sacó una pizarra y con una tiza iban aceptando apuestas sobre vosotors.....quien sería el primero en salir y cuanto tiempo permaneceríais abajo.
Las camareras comenzaron a apartar las antorchas de uno de los lados del Pozo, colocando un par de escalones para facilitaros el acceso a la boca del agujero.
Después se apartan para que entre gritos de ánimo podais acceder al Pozo Seco
Quizás eran estos los aventureros que pudieran solucionar los grandes problemas que acaecían sobre la ciudad
Pandarg bórrate la pasta.... te quedan 3 de plata XD
El elfo había permanecido distante, callado y atento a sus alrededores, con la capucha puesta sobre su rostro; este era un lugar donde agentes del ojo estarían observando atentos a cualquier rumor o noticia de bajomontaña, él solo esperaba que nadie lo reconociera, serían capaces de enviar agentes a puerto calavera a advertir a Xanathar de su "exiliado" agente....
Alza su copa, en silencio, y bajo su capucha sin que nadie pudiera percibirlo hace una reverencia a los que ahora eran sus hermanos y hermana, sentía alivio de bajar a ese famoso lugar cuanto antes.
Al fin- dice Tordek tras beber de un trago su cerveza y limpiarse los restos con la mano- después de beber viene bien algo de acción.
Su vista se dirige a Pandarg, que es el que ha pagado la entrada- el elfo aqui presente debe recibir las primeras cinco monedas que se consigan allí abajo.
Con los ojos vidriosos por la emoción, Gunnar eleva la espumosa jarra para proponer un último brindis:
-¡Por Los chicos de Tamara!
Luego el enano escudo saca varias monedas de la bolsita que porta al cinto y se las entrega al posadero:
-Pagaremos la vuelta por adelantado.
-No vaya a ser que alguno vuelva con una mano delante y otra detrás--se guarda de comentar en voz alta.
Me quito 5po, máster.
No, normas de la casa, no aceptamos dinero por adelantado. Si cuando volvais coincide que yo no estoy aquí y no pagais, volveis abajo, sin el elevador. Así que guarda esas monedas para vuelta y suerte ahí abajo
vuelve a ponértelas XD
Murmurando algo entre dientes, Gunnar guarda el oro y luego se dirige a la plataforma mientras prepara su mortífera arma.
Ok.
Voy con la cadena armada lista para entrar en combate.
Pandarg se levantó y tomó su arco en su mano, avanzando detrás de Gunnar. No se sabía por qué, pero Los Chicos de Tamara habían hecho un arte del hecho de avanzar en grupo aunque no tuvieran la más mínima idea de hacia donde se dirigían...
¡Venga, compis! ha llegado el momento de enseñar a esta ciudad de humanos cómo se resuelven estas cosas. Hagámoslo rápido, y hagámoslo limpio... si puede ser. Y si no, pues que sea sucio.
Con firme decisión, Tamara se acerca al pozo seco, dispuesta a encontrarse allí abajo con el mago humano que le había estado provocando aquellas terribles migrañas, y enseñarle lo que es un buen dolor de cabeza, Tamara Ritz-Style.
Prefiero del modo sucio dice finalmente el elfo, avanzando con cierto aire de superioridad, detrás de Tordek y hombro a hombro con Pandarg, empezaba a olvidarse poco a poco de sus problemas en la ciudad y empezaba a preocuparse cada vez mas con lo que estuviera acechando bajo sus pies, esperándolos para devorarlos.
Hoy no saben de nosotros, mañana no dejarán de hablar de nosotros le dice a su compañero de al lado Riéndose bajo su capucha