Partida Rol por web

Shitëse respiro profundamente tratando de tranquilizarse.

Se rasco la barbilla pensativa mientras miraba a su alrededor y señalo los dibujos.

-En la otra prueba el mosaico fue la clave, quizás los dibujos sean la clave en esta, tal vez se puedan pulsar algunos, o algo así...

Comento mientras se acercaba a ellos para examinarlos y ver si tenían algún tipo de hendidura y que efectivamente, esos dibujos se pudieran pulsar, de algún modo, para salir de aquella habitación ciega.

Los ojos se acostumbran mas, y no sentis ni una sola brisa de aire en el cuarto, y al revisar los dibujos, son hermosos y de uan calidad increible, pero ninguno parece que tenga oculto un mecanismo o algo, aunque, su tacto es frio y calido al mismo tiempo, y al tocarlo dan como pequeños calambres al rozarlo.

Parece que es un cuarto cegado, aislado y sin salida ni entrada que podais localizar.

Ali humedeció un dedo y lo levantó por encima de su cabeza, un truco de su madre para detectar de donde venía el viento. Pero allí no había viento, ni una ténue brisa, normal si en verdad no tenía ni puertas ni ventanas, ni nada parecido.

Le alivió que la pequeña dragona se despertase por fin, estaba claro que para resolver aquello debían estar todos. Y una vez aliviada al ver que el equipo volvía a estar al completo, se dedicó a observar los dibujos. Seguramente la clave estaba en ellos, ¿serían formas geométricas como un puzle? ¿Escenas de homínidos? ¿Relacionados con la diosa?

Pero los ojos de Ali eran casi tan negros como su piel, y le costaba adaptarse a tan poca luz.

- ¿Reconocéis algo en los dibujos?

Vadha comenzó a sentirse hambriento. No había nutrientes cerca y sin luz solar tampoco podía alimentarse, pero trató de serenarse. Había absorbido suficiente en la habitación anterior, por lo que todavía podría aguantar un tiempo en la oscuridad.

—A mí los dibujos me recuerdan a soles y lunas, parecidos a los mosaicos. ¿Serán tal vez algún tipo de lenguaje?

El muchacho empezó a fijarse más en ellos, intentando averiguar si había algún patrón en ellos o si le recordaban a algo que hubiese visto anteriormente.

Shitëse se rasco la ponta de los cuernos de nuevo, intentando pensar.

-¿Lenguaje?¿Luz y Luna?¿Como calor y frio?¿Luz y oscuridad? Son cosas contrarias, o estan o no, igual, ¿es una legua que se basa en eso? ¿Si esta con sol, luz o calor, es una cosa y si es la luna, el frio, la oscuridad, otra?

La semidragona se estaba debanando los sesos para intentar resolver aquel acertijo, pero solo era una niña aquello parecia bastante complejo.

Vadha se giró de pronto. Las palabras de Shitëse acababan de darle una gran idea.

—¿Y si es una melodía? La luz son las notas, el sonido, y la oscuridad o el frío son los silencios. Tal vez es una partitura.

Shitese miro a Vadha.

-¿Una melodia? Ohhhh.... puede ser.... a mi me gusta mucho cantar, aunque no se como leer la musica...

Shitëse penso en una cancion para cantar y demostrar sus grandes dotes de canto, que, quizas para el resto, pues como que no eran tales, pero al menos la pequeña parecia pasarselo en grande cantando.

Me sentía mucho mas alegre al ver que todos estábamos juntos de nuevo, aunque esa alegría fue pasajera, me quede esperando que todos despertaran mientras miraba las paredes buscando la forma de salir de aquí -Si dices que son como el sol o la luna- Me quede pensando en eso, ese pensamiento se repetía en mi cabeza varias veces emocionado por la idea de cantar recordé algo importante -Los sueños, en mi sueño vi el sol también la luna, ¿Eso podría ser una pista?- Sonreí emocionado por sentir que estaba ayudando un poco.

Shitëse Gurës, en tu interior sabes que esa canción le ha gustado a la diosa, de alguna manera sientes que hay algo que te ayudara en el futuro cuando haga falta y cuando las cosas sean mas dificiles o necesites que algo sea mas favorable podras conseguir

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Shitëse parecía bastante contenta mientras repasaba los dibujos de las paredes, se sentía mas tranquila después de haber cantado aquello. Y aunque pareciese una tontería había perdido el miedo en aquel momento.

Miro a Irezumi...

-¿Quizas... es por que la diosa vigilaba nuestro sueño?... ¿o tal vez lo creo ella? por eso los soles y lunas....

La semidragon volvio a la idea de la melodia, era la que mas le cuadraba, por desgracia, no era buena leyendo musica...

-Cuando pusimos los mosaicos ¿no sono una melodia?... o igual solo la imagine... mmmm... no se... no la recuerdo muy bien... ¿alguno recuerda si esto fue asi?

Ali no sabía nada de música, absolutamente nada. Lo suyo era golpear el metal. Aún así forzó la vista tratando de entender algo, si es que lo había, en su cabeza sonaba su madre martilleando el metal caliente... quizás si sincronizaba los golpes del martillo con lo que estaba viendo, si eso era un golpe y eso otro un silencio...

Vuestras ojos se acostumbran a la vision nocturna, y la musica de la pequeña Shitesey el traqueteo de Ali comienza a resonar de forma armonica de forma adorable y familiar, y en vuestras mentes comienza a sonar un sonido, sabeis que no es fuera, sino directo a vuestra mente.

Saludos pequeños ... quienes sois ... quienes molesta a la diosa .... hablar ahora o sino os perdereis en el Sirbus ... la nada donde el forastero se encargara de vuestras tristes existencias ... -

La voz es suave y amigable, aunque se ve claro que sus palabras no son triviales o sin fuerza ... teneis toda claridad que la voz que escuchais debe ser de la ciosa, ya que a pesar de todo, os llega el corazon de alegria y luz, incluso Vagha, sientes que si la escucharas mas no tendiras que volver a comer en toda tu vida

-Mi nombre es Azlik'sha pero me llaman Ali. No sabemos muy bien por qué o cómo hemos llegado aquí...

No sabía qué más decir, después de todo seguro que la diosa tenía, en realidad, más información que ellos. Al fin y al cabo habían sido encerrados sin más para que se las apañaran, como para que ahora encima los amenazasen.

La pequeña Kobold se asusto al escuchar aquella voz en su cabeza, especialmente cuando le dijeron que si no hablaban se perderían, no entendía muy bien donde se perderían, pero solo el hecho de perderse, ya le daba miedo.

-Nnnnooooooo.... no quiero perderme... menos en sitios que no conozco... ni que se encargue un forastero de mi... ssss...sssoy Shitëse sssssseeeñora. sssooolo una humilde hija de mercaderes... cccocccomo dice... Ali... no sabemos qqqqq...que hacemos aqui... solo estabamos jugando a las aventuras... y completar un puzle... y de repente pufff... salio un portal... en el que nos metimos... y llegamos aqui... solo... solo quiero volver con papa y mama...

Dijo entre lagrimas de miedo.

Vadha se encontraba entre dos tierras. Por un lado se sentía aterrado por la amenaza velada de la entidad que acababa de hablarles, pero su sola presencia le tranquilizaba y alimentaba.

—S-somos niños y niñas de Rudarthur. Estábamos en el templo de la Diosa y acabamos aquí, creemos que es una prueba. N-no queremos hacer nada malo, lo juro.

Escuchais un sonido musical, algo armonioso y agradable y tras eso una voz mas armoniosa y cálida.

- Si ... lo sabia pero deseaba escichar vuestra respuesta ... no mis pequeñis, sois mucho mas ... pero el tiempo es quien lo dira, sereis grandes heroes y grandes tiranos ... ni yo lo se ... aunque creo que ayudareis a este mundo en los tiempos oscuros que vendran en el futuro ... -

Tras esto sentis un certo mareo, el cuarto se curva y se desdobla. ( Habeis visto doctor estraño, pues cuando esta dentro del mundo espejo). La realidad se curva de maneras imposibles e increibles, pasando de un cuarto minusculo a un cuarto gargantuesco y despues a un cuarto diminuto que amenas cabe , al final veis en el medio una luz, una luz intensa y divina y la realidad comienza a montarse en tonro a ella de manera increible y finita.

Cuando ya volveis a daros cuenta de que habeis vuelto a algo que vuestra mente pudiera analizar como realidad estais en una enorme sala, con una especie de pequeño sol en el centro, el cual pasa de dolor dorado a color plateado con mareas y ondulaciones, con haces de luz dorada calidad y intensas y rayos plateados frios y suaves.

Este pequeño sol esta como en una especie de altar rodeado por cuarto esferas decoraticas situados en la zona inferior, al adceso de cualqueira de metales diferentes, uno de madera, otro de vidrio, otra de metal pulido y el ultimo de ceramica , muy ricamente decorado. Junto a ellas, y rodeando el altar numerosas ofrendes, piezas de metales preciosos, herramientas, huesos de animales, etc. Eso si, todo esta lleno de polvo, no sabeis que sera pero parece que hace tiempo que nadie ha estado alli.

Jamas habiais visto esta sala y al igual que antes las paredes estan decoradas de dibujos y de nuevo no hay salidas claras , ninguna que podais identificar con claridad.

Todo esta en calma, sentis aun la diosa a vueltro alrededor, pero parece que os deja un instante para que os recupereis a vuestra nueva localizacion y situacion ...

La pequeña Shitëse miro alrededor de la nueva estancia mientras trataba de recuperarse de aquel extraño viaje, se sentia mareada, como si todo dentro de su estomago, en especial aquellos panecillos que se zampo, diera vueltas, aunque por suerte, no llego a arrojarlos fuera de su cuerpo.

Cuando recupero un poco la compostura se acerco a las ofrenda.

-SIIII MIRAD, HEMOS ENCONTRADO EL TESORO, BIEEEN

Dijo animada al ver aquellas cosas, para alguien como ella, hasta los huesos podían ser un tesoro.

-Aunque esta todo bastante sucio, papa y mama se enfadarían mucho si viesen este sitio, dicen que el estado de una habitación es como el reflejo de su alma, por eso me hacen tenerla siempre ordenada, aunque es un rollo...

Comento mientras quitaba una capa de polvo con el dedo, para después sacudirla.

-Mmmmm, parece que seguimos encerrados ¿Tendremos que limpiar la habitacion? Es un poco rollo, esta prueba no me gusta

—Mmm, no creo que sea buena idea. Mi papá siempre dice que para limpiar el polvo es mejor tener una ventana abierta, y aquí no hay ninguna. Como levantemos una polvareda va a ser peor.

Vadha inspeccionó con cautela la habitación. Sentir la presencia de la Diosa era algo indescriptible, que jamás había vivido en su propia vida y le llenaba de determinación.

—Las esferas se corresponden con los materiales del mosaico, ¿verdad? Tal vez también tengan que ver con nosotros?

Henchido de valor por la sobrenatural luz que bañaba la habitación, el joven se aproximó hasta la esfera de madera. Aún no estaba del todo convencido, pero tenía la impresión de que era la opción correcta dentro de la extraña lógica de aquella aventura.

- Supongo... que cada altar somos uno de nosotros, y entre todo lo que hay debemos elegir una ofrenda. Me recuerda a un cuento que me contó mi padre una vez, de un aborigen de nosedonde, indiano lo llamaba él, llamado Yons, que tuvo que elegir una copa como ofrenda y si elegía la equivocada se moría nosequién. La cosa es que había un montón de copas con metales preciosos y joyas, pero él tenía que elegir una de madera. No entendí muy bien por qué...

Y la pequeña se dirigió a donde estaba el altar de metal, y sin tocar nada, se puso a mirar atentamente todas las opciones que podía elegir. La respuesta obvia sería algo de oro, pues era la diosa del sol, o algo de plata pues también lo era de la luna, o algo que contuviese los dos metales. Pero al igual que en aquel viejo cuento de su padrastro, la respuesta podía no ser la más obvia.