Partida Rol por web

Mis misiles, como siempre, habían acertado al darle a su objetivo. Unas chispas parecían saltar del constructo cada vez con más frecuencia des del impacto de los misiles.

*!Chispas! bien, parece que esto le afecta, seguiré con los misiles mágicos hasta que no pueda más, con un poco de suerte caerá antes...*

Cuando veo caer a Nana, un fugaz recuerdo de Dina ensangrentada pasa por mi mente y casi revivo los momentos de dolor vividos hace ya unas semanas, pero aparto esos pensamientos de mi cabeza no es el momento. Además debo procurar no llamar la atención. Si una enana tan dura como Nana era vencida de un solo golpe... Quien sabe lo que me pasaría a mi si recibiese un puñetazo de esa bestia...

Me alejo un poco más de mi posición sin perder de vista a la máquina y le lanzo otro trio de misiles mágicos.

Súbitamente Larina recobró el sentido con una bocana  de aire y se puso en pie en un instante como si la oscuridad hubiera pasado en un abrir y cerrar de ojos. Aunque sentía una enorme presión en los oídos  su condición no parecía ser mala. No sabía cuanto había permanecido inconsciente pero estaba claro que la lucha se había recrudecido mientras tanto. Con horror vio como la bestia metálica derribaba a la luchadora de menor altura. Por su anchura de hombros y ausencia de barba debía ser una enana. Oh, por el Pergrino Pensó Larina La ha derribado de un sólo golpe, sin el mayor esfuerzo.

A juzgar por el hacha que yacía en el suelo junto a su dueña la enana no debía ser frágil precisamente. Por lo que de momento se precisaba ataque a distancia. Esta vez no puedo fallar. La arina volvió apuntar con su arco y disparó. Por desgracia  la flecha rebotó in daño contra el artefacto metálico.

¡Que piel tan dura! pensó Larina

Para evitar que la golpeara de nuevo la araina se alejó del constructo buscando un buen lugar desde donde seguir disparando.

Esta vez si le acertó.

Bien , empezaba a creer que no podría lastimarlo con el arco

Larina disparó dos flechas, la primera de ellas salió muy desviada, con la segunda se tomó un momento para apuntar mejor y dio en la dura piel del gorila mecánico, no pareció hacerle mucho daño, pero por lo menos en esta ocasión había conseguido herirle.

Con gran rapidez el clérigo restablece la vitalidad de Nana cerrando gran parte de sus heridas, aunque no todas, la enana se levanta viendo que el gorila sigue delante suya. Shäkaste intenta mermar las fuerzas del gorila con su ballesta, pero el virote sale demasiado desviado como para darle.

Wynonna golpeó con su espada al gorila, en un primer momento creyó que no le había hecho nada, pero vio como de aquel gorila mecánico comenzaron a salir chispas, si bien aún no estaba acabado, su vida cada vez era menor.

Evelynn volvió a usar sus misiles, puede ser que por sus recuerdos dolorosos que habían hecho que perdiese la concentración o por ver a Nana en aquel estado, sus misiles fueron con menos intensidad que la vez anterior, aunque igual de certeros

Larina vio que la segunda flecha parecía haber causado menos daño del que le pareció al principio sobretodo al ver que  uno de los integrantes del grupo le lanzaba a la enana lo   que a todas luces parecía ser un hechizo curativo. Larina no pudo evitar especular un poco mientras buscaba algún punto débil en el constructo: la voz parecía grave si bien la plegaria no había sido muy larga y cómo no era un elfo seguramente sería un humano varón dada su altura. La ausencia o no de vello facial no era indicativo en este caso. Por fin la arania pareció ver un área prometedora donde clavar una flecha.

¡Si! murmuro Larina.  Seguramente no le hacía mucho daño pero era mucho mejor que ver como aquel desastre arrasaba la ciudad y se llevaba a la gente por delante.

La enana siente un golpe enorme en el pecho y en ese momento una bocanada de aire entra de golpe en sus pulmones abriendo en ese mismo instante los ojos del susto. Se incorpora como puede y empieza a toser dolorida. Estaba tirada en el suelo, llena de arena y el cuerpo le dolía bastante, pero estaba viva.

-Esto parece imposible... - exclamaba mientras se agarraba la cabeza intentando recuperar la concentración.

El gorila seguía allí delante dando palos. No podía alejarse, ni acercarse más o la mataría, así que cogió una de sus jabalinas y se la lanzó contra él con todas sus fuerzas.

Nana lanza una jabalina que se queda clavada en la dura piel del gorila mecánico. El gorila se giró para enfrentarse a Wynonna, sus dos puños fueron directamente hacia la paladina, pero ésta alzó su escudo protegiendose de los golpes.

Desde la distancia Larina disparó una flecha con su arco dando al gorila que cada vez echaba más chispas, con suerte no tardarían en acabar con él antes de que se llevara a algunos de ellos con él

Winnie sintió cómo el impacto de los puños del gorila la hundía en el suelo a través del escudo. La paladín respondió con una estocada rápida y bien dirigida a los huecos de su armadura. El filo, sin embargo, no se hundió todo lo que a la semielfa le hubiera gustado, así que se apresuró a preparar de nuevo el escudo para el siguiente puñetazo.

-Vamos, monito! Mi abuela pegaba más fuerte que tú! 

Nana se levantó y nuevamente pudo respirar, lo que le devolvió el alma al cuerpo al clérigo.

Esta es mi oportunidad,  debemos lastimar a ese animal metálico. 

Se concentró y las palabras brotaron  de su boca,  mientras apuntaba al lomo del gigante. 

Un rayo salió de su mano con inusitada fuerza,  lo que causó que Shaq perdiera un poco la estabilidad,  causando que el rayo impactará unos escombros de casa un poco más lejos de donde estaba el gigante, fallando por completo. 

diantres - musito el clérigo en voz baja. 

Wynonna no dejaba de insultar al gorila intentando llamar su atención y así ser su único objetivo, golpeó al gorila con su espada notando como el gorila cada vez estaba más ralentizado, no tardarían mucho en acabar con su mecanismo. Shäkaste intentaba concentrarse en lanzar un hechizo, uno de gran potencia salió, tanta que desestabilizó al clérigo y desvió su ataque haciendo un gran boquete en una de las casas cercanas.

Evelynn con su ballesta en mano disparó un virote que se clavó en el gorila, no era tan efectivo como los proyectiles mágicos, pero si seguía usandolo perdería todo su poder en este enemigo. 

El gorila volvió a usar sus puños, uno de ellos golpeó el escudo de Wynonna con tanta fuerza que impulsó a un lateral a la joven dejando su flanco al descubierto, momento que aprovechó el gorila para volver a golpearla y de un potente golpe dejarla inconsciente.

Nana se queda congelada al ver caer a Wynonna, el miedo termina paralizandola

¡No! Larina horrorizada ve caer a otro de los aventureros. Pero que terrible fuerza. Piensa la araina estremecida y asombrada nuevamente: le basta un golpe para acabar con un oponente, incluso si lleva armadura y escudo.

Si perder un momento Larina dispara con su arco tratando de llamar la atención de constructo y alejarlo de la persona caída.

El clérigo nuevamente vio como la paladín caía...

El mundo se vino a negro nuevamente y la paladín no se levantó más.

Su mente estaba colapsada aunque una luz brilló tenue en su voluntad. 

Haciendo de tripas corazón, cargó la Ballesta nuevamente y disparó furioso contra el gorila metálico. 

No se detuvo a ver si el virote había impactado,  su mente evocó la luz de su dios,  y mirando a la paladín musito:

Vitas mortis carihooooo...

Un resplandor más débil rodeó a la paladín,  mientras la vida se aferraba a su cuerpo....

sólo espero que no caiga ninguno más,  quedé demasiado cansado mentalmente. 

Larina disparó nuevamente una flecha impactando en el gorila, mientras veía como Shäkaste curaba a Wynonna que volvía a recuperar la consciencia; el clérigo disparó su ballesta haciendo que el gorila se tambalease, estaba a punto de caer, se le notaba, todo su cuerpo echaba chispas

Winnie sintió el poder divino fluyendo en su interior y alzándola de aquella espesa negrura. Cuando abrió los ojos, sin embargo, sintió los daños internos restantes y dudó si curarse a sí misma o tratar de acabar con aquella maldita máquina. La paladín optó por la última opción.

-Gracias, Shakäste... ahora si que me ha cabreado...

Dejó caer el escudo, agarró la espada con ambas manos y descargó un golpe con todas las fuerzas que le quedaban. Los músculos de Wynonna se tensaron hasta casi explotar cuando levantaron su espada, clavándola justo debajo del cráneo del enorme gorila. La puta de su espada sobresalió por arriba y supo que aquel había sido el último segundo del combate.

Wynonna bastante cabreada salta con su arma en mano clavándosela con gran fuerza al gorila mecánico, haciendo que la cabeza se descolgase del cuerpo, todos debéis dar un salto atrás pues al caer el pesado cuerpo crea una onda que levanta bastante tierra a su alrededor. Una vez el autómata está en el suelo, podéis ver unos extraños grabados en el interior de varias piezas

Escucháis vítores, los aldeanos salen de sus escondites para felicitaros por vuestras hazañas. La guardia de la ciudad no tarda en aparecer

-Muchas gracias por vuestra ayuda, soy la jefa de la guardia, Bethari Drakpa a vuestros servicios. No contamos con muchos guardias en la ciudad, comenzaremos a buscar heridos y personas atrapadas en las casas, nuestra prioridad es salvar vidas, así que os pido un favor, investigad que ha sucedido para poder evitar nuevos ataques. Claramente queda descontado que vuestro trabajo será remunerado. Tomad estás monedas como compensación por haber acabado con el autómata -la jefa de la guardia os da un saquito con 50 monedas de oro

Observas detenidamente al autómata, parece que su fuente de energía parece ser un extraño cristal de color oscuro, similar al xion, pero con un inusual brillo azulado

Winnie, por supuesto, intentó rechazar el pago. Era su deber ayudar a quien estuviera en apuros. Mientras escuchaba al guardia se fijó, sin embargo, en lo que parecía la fuente de energía del gorila, una extraña piedra de brillo azulado. Wynonna la cogió en la mano y se la llevó a Evelynn.

-Mira Eve... diría que es lo que hacía funcionar al constructo.

Observas detenidamente al autómata, parece que su fuente de energía parece ser un extraño cristal de color oscuro, similar al xion, pero con un inusual brillo azulado, tal y como comenta Wynonna. Pero tus conocimientos llegan más lejos, el extraño grabado parece ser una firma arcada de la Cofradía de Erekar que indica que el autómata es de su propiedad

Me cubro la cara y la cabeza con los brazos cuando el autómata cae provocando una gran oleada de tierra y polvo. Estoy casi al limite de mis fuerzas, ésta maldita bestia nos las ha hecho pasar canutas... pero por suerte seguimos en pie... de momento.  

Cuando espero que algo más grave pase, escucho vítores y ovaciones a nuestro alrededor. Desconcertada veo que varias decenas de aldeanos nos estan alabando por nuestra batalla cuando aparece la guardia y nos da la enhorabuena. Eso me tranquiliza mucho, y más tras el último incidente que tuvimos con la guardia de Nakuro... La capitana de la guardia nos ofrece unas cuantas monedas como recompensa que acepto gustosamente por supuesto, una no vive del aire!

- No ha sido nada Maese Bethari, lo hubiera hecho cualquiera... - Digo con falsa modestia - Sois muy amable con vuestras palabras y tenéis mi palabra que haremos todo lo posible por descubrir la razón de tal incidente, desde luego no es normal que un autómata actue así... al menos por su cuenta claro... Dicho esto me guardo mi parte de las monedas. - Discúlpeme capitana... creo que hay algo que debo examinar... no dude en contactar con nosotros si necesita nuestra ayuda. *Y le sobran otras cuantas monedas....* pienso de fondo...

Mientras hablamos veo que la paladín le llama la atención algo que hay en el autómata, que todavía no he tenido tiempo de examinar asi que aprovecho y me acerco a Wynonna que está junto al cuerpo del autómata sosteniendo un cristal de un extraño y oscuro azul. Miro al cristal y después a la paladín, que me lo cede para que lo examine.

 - Esto es... ¿un cristal de Xion?¿porqué es tan oscuro? Debería ser de un color más claro... que extraño...- Mientas estos pensamientos me cruzan la mente veo una de las piezas junto a mis pies, debe haber saltado con el golpe de la caída y veo un símbolo que me llama poderosamente la atención... ¿Éste autómata pertenece a la Cofradía de Erekar? Aquí hay algo que se nos escapa...

- Chicos... me temo que tenemos que hacer una visita a la Cofradía de Erekar... Después de haber descansado digo con la pieza en mi mano enseñando el símbolo cuando veo al Araina que nos ha ayudado a derrotar a la máquina junto a la guardia y me acerco a él... o élla... núnca se me ha dado bien tratar con los Araina pero supongo que no muerden... aunque dan un poco de replús intento contener mi fobia a las arañas para parecer amable...

- Muchas gracias por ayudar a tumbar al constructo... Soy Evelynn por cierto - Digo sin tenderle la mano pero haciendo una ligera reveréncia... *Podría sernos útil como testimonio ante la cofradía... puede que no admitan la autoría del autómata...* - Perdona si soy un poco brusca pero... ¿nos acompañarías a dar testimonio ante la Cofradía del ataque de SU autómata? Creo que nos vendría bien todos los puntos de vista posibles para la investigación... *Aunque ello suponga menos monedas por cabeza... pero si hay otros constructos locos... nosotros solos no nos bastamos*

- Y ahora por qué no vamos a celebrar nuestra victoria con unas cervezas en la taberna? ¿Supongo que al menos tu te apuntarás ¿no, Nana?  Digo cómo si no hubiera pasado nada con una sonrisa.