Partida Rol por web

- Amanece un nuevo dia en Holiday y encuentran muerto al hijo del lechero, que para sorpresa de todos resulto ser un hombre lobo. ¿Que sucedio anoche? ¿Las bestias se atacaron entre ellos? Resuena en la mente de la gente la leyenda del lobo blanco que depreda a los demas lobos, pero no parara hasta terminar con todos los aldeanos. -

En ese momento se escucha a alguien decir:

- Necesitamos un Alcalde elegido de entre algunos de los integrates del consejo para resolver esto y nos ayude a guiarnos. -

Asi empezaron las votaciones populares por un Alcalde y un nuevo culpable el dia de hoy.

El cuerpo de Timmi se encuentra cubierto por un abundante pelo animal, tiene colmillos y garras. Y en el lugar parece haber habido una pelea que Timmi no gano lleno de peli albino en las garras de Timmi, probablemente de su agresor.

La noche había sido un infierno, un infierno con todas las letras, simplemente apenas había logrado pegar ojo y al final las pesadillas me habían dejado con grandes temores, así que salir de mi casa había sido más bien la última opción, una que decía que aquella mañana no ocurriría nada malo, que lo de ayer había sido solo producto de la maldad del hombre yq ue las bestias no habían vuelto a atacar.

Al llegar al lugar donde se reunían todos busque con los ojos a Sarah, desesperada por hallar a alguién confiable en la marea ¿Quién podría imaginar que Timi podía ser un... uno de esos seres?... porque resulto ser que los lobos no habían atacado a ningún aldeano, se habían atacado entre si, decían que en las garras del hijo del lechero habían hallado pelo blanco, pelo del lobo blanco cuyo único fin es destruir todo lo que le rodeaba, mis ojos se llenaron de aún más pánico al oír de ese maligno ser.

-Esto no puede continuar -susurre, inquieta mirándolos a todos -¿cómo pueden esconderse esos seres entre nosotros? -pregunte, casi con histeria -¿Cómo vamos a hallarlos? -me pregunte y mirándo a quién propusiera que se llamara a la elección de un alcalde se me ocurrió que esta persona podía guiarnos mucho mejor, alguién confiable, mis ojos fueron rápidos sobre el padre forrester, siguiéndole luego Sarah, solo en ellos dos me atrevería a confiar, uno conocido por su virtud y alta moral, la otra una amiga confiable en aquel pueblo que repentinamente se hacía extraño a mis ojos.

-Yo también creo que debemos elegir un alcaide -susurre -alguien que sepamos confiable, que pueda ver más allá -susurre, cubriéndome los hombros con la chaqueta que había traído de mi casa, colocándola al ponermela, sobre el vestido negro que me había puesto al ver que la muerte comenzaba a cubrirnos. 

Ayer por la tarde me había vuelto a mi casa con un sabor agridulce en la boca, al final no habíamos conseguido hallar al culpable y me había ido convencidísima de que esta mañana la muerta sería una servidora. Incluso había soñado con ello. Martin Moore, convirtiéndose en una de esas bestias y devorándome entera, diciéndome “ Zorra, tú me acusaste y ahora vas a morir” me había levantado entre gritos y lágrimas rogándole a Martin por mi vida “por favor, Martin, perdóname la vida”

Apenas había dormido nada y el poco rato que había echado un sueño había sido para soñar con Martin Moore convertido en bestia y devorando mis entrañas. tenía unas ojeras que prácticamente me ocupaban toda la cara y mi aspecto tampoco acompañaba mucho, parecía que tenía 20 años más de los que en realidad tenía.

Tenía miedo por saber quién había sido el pobre inocente que se había topado con las garras de estas criaturas y rezaba porque no fuera nadie. Pero bien sabía por experiencia que no iba así la cosa, que todas las noches, hasta que diéramos con el culpable, habría un muerto.

Mi gran sorpresa fue que el caído esta vez había sido uno de ellos, traté de disimular mi felicidad, al menos parcial, ya que no había sido un inocente y había sido una de las bestias. Uno menos. No me sorprendió que Timmi fuera una bestia, ya había sospechado de él  la tarde anterior.

La buena noticia es que no ha muerto ningún inocente, la mala es que tenemos entre nosotros a una bestia capaz de matar incluso a los suyos.  

Tenéis razón, tenemos que votar a un alcalde y tengo al candidato perfecto y una buena razón para creer en él. Aclaré mi garganta, para mí sólo había una persona que había demostrado con creces que era inocente. El padre Forrester, y no es sólo porque sea un hombre de Dios, ayer el padre mencionó que sospechaba de Timmi y hoy se ha descubierto que Timmi era una de esas bestias. Si el padre fuera uno de esos seres, creo que se hubiera limitado a votar por alguno de los que tenía el foco de atención o simplemente hacerse el tonto, no hubiera levantado la liebre contra uno de los suyos que a priori, pasaba desapercibido. Creo que el padre es una persona muy inteligente y que Dios le guía.

Con el clima de sospecha y paranoia reinante en el pueblo, me fue imposible trasladar el cadáver de John a mi consulta para seguir analizándolo con tranquilidad. Así que no me quedó más remedio que pasar la noche en el ayuntamiento, hasta que, vencida por el agotamiento, me dormí apoyada en una de las mesas.

Al despertarme, arreglé como pude mi pelo y mi ropa, mientras fuí a por un café. Realmente esto cada vez vuelve a parecerse más y más a mi tiempo en la universidad. Sólo que, esta vez, los cadáveres estudiados son recientes y señal de que asesinos andan entre nosotros.

Apenas he regresado con una humeante taza de café, me encuentro con otro cadáver y la gente congregada.

- ¿Han... han vuelto a matar? - pregunto, una parte de mís deseando no oír la inevitable respuesta.

Me hago paso entre la gente para encontrar delante de mí el cadáver de Timmi. Pero la presencia de esas matas de pelo, colmillos, garras... Sin darme cuenta, suelto la taza y esta cae al suelo hecha añicos.

- Ostia puta. Al final es verdad, joder. - digo sin darme cuenta de que hablo en voz alta.

Tomo aire y, recuperada mi profesionalidad, me acerco hacia el cadáver, no sin una pizca de curiosidad científica. ¿Cuántas veces alguien tiene la oportunidad de examinar el cadáver de un hombre lobo? Esta vez, el análisis es más sencillo que con John, como si el descubrir su naturaleza de licántropo le hubiera quitado su humanidad.

Comparo las garras y colmillos y confirmo que Timmi fue uno de los asaltantantes que mató a John, otra razón para reforzar mi frialdad al estudiar el cadáver. Lo interesante es que uno de los otros hombre lobo fue quién lo mató. Y hay una serie de pelos blancos bajo sus garras.

Pero Belle y Sarah empiezan a hablar sacando de mi tren de pensamiento por el momento.

- ¿Un alcalde? Sí, supongo que tiene sentido elegir a alguien para ayudar a resolver estas cuestiones. - y cuando Sarah propone al padre Forrester, asiento con la cabeza, frunciendo el ceño con lo de que Dios le guía - Apoyo tu idea. Yo voto también por el párroco. ¿Qué opina, padre? - digo mirando al implicado.

Pero no hay que olvidar la cuestión más importante, hay un asesino suelto, como mínimo. Quizás haya más de uno. Vuelvo a girarme hacia el cuerpo de Timmi, estudiando sus garras cuando algo se me ocurre.

- ¿Alguien sabe si esas bestias son capaces de regenerar sus heridas? - pregunto en general sin levantar la mirada de la extraña criatura - Timmi atacó a su agresor, con lo que quien quiera que fuese, debería tener heridas en su cuerpo. - levanto la cabeza, ahora sí, y miro al grupo, esperando que la gente muestre posibles heridas y explique como se las hizo.

Las noticias volaban como pan caliente. Timmy era una de esas bestias, así que todas las leyendas del pueblo eran de verdad y todos, TODOS, estaban en grave peligro. Al menos entre los lobos también debían de tener diferencias, porque Eddy no entendía como había muerto uno de los suyos en la noche.

-¿Y no sera que hay alguien mas que esta cazando a los malos? -Miro un segundo a su oveja y solo continuo hablando cuando esta asintio. - Un cazador por ejemplo... no se. - Comento tímidamente el hombre mientras buscaba en su bolsillo un inhalador.

-Es-estoy de acuerdo con eso del alcalde, ¿Pero tal vez debamos priorizar el encontrar a los malos antes? Quiero decir, saber que Timmy era uno de ellos es bueno, podemos mirar el acta de ayer y saber a quien apollaba, a quien atacaba o que teoría desechaba, así puede que estemos mas cerca de encontrarlos. -Beeeeeeee... -Sí, ya voy. No cre... creemos que hubiera estado jugando al despiste tan pronto, no creo que se esperara morir esta noche así que podríamos empezar por hay ¿No? -La oveja se pego a el, para que acariciara su cabeza y rascara sus orejas, era una forma de pago, ¿Pero para cual de los dos?

A diferencia de la noche anterior, saber de la muerte de Timmy no parecía afectarle, seguramente porque era culpable y por que era uno de los que se metían con su él.

Eddy saco una libreta y ojeo las reglas de la reunión así como se paso el tiempo repasando el acta, en busca de un posible secuaz de Timmy.

-Beeeeee... -Shhh.... Toy ocupao.

Aliviada por ver a Sarah, me acerque a su lado, completamente de acuerdo por lo que esta dijo.

-Yo también votare por usted, padre Forrester, para alcalde, es necesario tener un guía y solo usted... -dije en tono suave, mirando al sacerdote, una cosa era cierta, él había sido capaz de ver a través de Timi y adivinar su verdadera naturaleza, pero también debíamos buscar al mounstruo que había quedado, o a los mounstros... - debemos pensar también en los posibles culpables -me trabe, y tomé aire de nuevo - antes de que vuelvan a atacar - concluí. 

Miré a Olivia cuando esta dijo de las marcas de heridas de aquellos seres y pensativa mire a los otros.

-Yo no sé si ellos se recuperan o no ¿Alguien lo sabe? -pregunte - porque sería un muy buen modo de encontrarlos -al menos había una luz de esperanza. 

Aquella noche Pruslas no pudo dormir.

La muerte de John y el que en su propio pueblo hubiese gente que pretendiese traer de vuelta la aberrante forma de justicia colectiva que antaño se empleaba le quitaron todo sueño que pudiese tener.

Todavía recordaba los eventos de hace una década. Muchos inocentes murieron linchados por aquel entonces para cazar a un par de hombres lobo que empezaron a actuar. La cantidad de gente asesinada por los lobos y por el resto del pueblo terminó siendo la misma, y en el proceso perdió a amigos y familiares por unos y por otros.

En mitad de la noche pudo oír unos aullidos y rugidos. Se tapó por encima de la cabeza, se hizo una bola en la cama y rezó por que aquella noche no fuese su turno hasta el amanecer.

Cuando los rayos de sol finalmente empezaron a filtrarse por su ventana, se destapó lentamente y miró a su alrededor. No había nadie, y él seguía con vida.

Se levantó de la cama tratando de no hacer ruido y exploró su casa en busca de señales de que hubiesen tratado de entrar, y no las encontró. Un poco más tranquilo, abrió el frigorífico para coger un botellín de cerveza.

Lo cogió, lo miró por un momento y, en vez de abrirlo, lo devolvió a su sitio.

No más bebida por ahora, no hasta que todo se resuelva - pensó.

Se vistió y calzó, salió a la calle y fue en busca de los demás miembros del consejo sólo para enterarse de la noticia de la muerte de Timmi y su verdadera identidad.

Se frotó la cara con las dos manos y se le enrojecieron los ojos.

Pero... ¿Cómo? Conozco a su padre desde hace años. Llevan viviendo aquí desde siempre. ¿En qué momento pudo haberse convertido en una de esas cosas...?

Se sienta en un bordillo y mantiene la mirada baja.

Luego, dirigiéndose a Forrester, dice: Padre... ¿Qué debemos hacer? Todavía debe recordar cómo terminaron las cosas hace diez años. No podemos dejar que mueran tantos inocentes como la última vez, asesinados sin pruebas ni juicio y linchados por sus propios vecinos.

Definitivamente, cuando no tiene tanto alcohol en sangre es mucho más sencillo entender a Pruslas.

Tras el debate del día anterior y pasar la noche casi sin poder dormir, pensando por qué poco no había salido elegido culpable de la muerte de John y hubiera muerto delante de todos sus vecinos, había pensado en irse de ese puñetero pueblo y no volver, tras varias horas Martin Moore se depertó por culpa de varios gritos en las calles.

- Ahora que empezaba a coger el sueño...- maldijo el leñador.

Al salir de casa y descubrir que Timmi había muerto, bueno...Timmi o la cosa que fuera él, porque era un hombre lobo y había sido muerto por otro hombre lobo, o eso parecía.

Martin llegó al consejo y vió la cara de miedo de todos sus vecinos, cualquiera de los allí presentes podría ser el siguiente, todos estaban votando al alcalde y nadie al asesino.

- Padre, yo también le elijo como alcalde. Aunque no sea un devoto cristiano, creo que usted es el único que puede dar sensatez y consuelo en esta situación crítica que vivimos.

Y en lo que respecta a la muerte de Timmi, tras mucho pensar no voy a votar a nadie como culpable, puesto que el que haya sido nos ha hecho un favor matando a un hombre lobo. Aunque aún hayan más entre nosotros, almenos sabemos que uno ya no está con ellos- sentenció el leñador.

Tras decir aquello, Martin cruzó los brazos y escuchó las palabras del resto de gente.

Había dejado el ayuntamiento tan pronto como terminó la sección del día anterior. Llevaba un mal sabor en la boca y no podía dejar de temblar, pero intentando tranquilizarme, puse rumbo a mi casa. Allí me encerré en la biblioteca de mi padre, buscando toda la información que teníamos sobre los hombres lobo. Si había algo que pudiera ayudarnos, tal vez estuviera entre las experiencias anteriores de nuestro pueblo.

No recuerdo en que momento me quedé dormida, pero despierto con la luz del sol pegándome en la cara. Estoy tumbada sobre unos de los tomos más viejos. ¡Oh no! Lo he babeado todo... Lo secaré con la manga. Si es la mejor opción. Bueno no queda tan mal. En fin. debo volver al ayuntamiento y mencionarles al resto todo lo que he averiguado.

Mientras recorro las calles escucho rumores, la gente vuelve a estar alterada, pero no igual que lo estaba ayer. Al llegar al edificio me entero de todo. ¡Un hombre lobo muerto! No puedo creerlo lo que decía en el libro era cierto. El lobo blanco no era solo una leyenda. El enemigo de mi enemigo es mi amigo pero, en este caso, no estamos seguros de sus garras.

Un alcalde, el padre Forrester, mientras estoy sumida en mis cavilaciones aquella discusión me llega desde lejos. Sería una buena opción, pero... ¿Y si resulta ser un lobo? ¿Como nos salvaríamos después de haberle dado ese poder?
todos parecían estar de acuerdo, por lo que será mejor no votar a nadie. Pero no puedo sacar de mi mente que fue Timmi quien equilibró la balanza, salvando a Martin. aun así, Timmi simplemente podía haber estado tratando de quedar bien para evitar que lo tengamos como blanco en futuras votaciones. Solo que no creyó que el lobo blanco lo mataría. Suspiro, pero por el momento me quedo al margen del grupo.

El padre Forrester había llegado al lugar al poco tiempo y se había mantenido en silencio desde que la reunión había empezado, el enemigo había vuelto a atacar, pero por lo menos esa noche el muerto... había sido uno de ellos y aunque no sentía placer si que sentía alivio, aquella noche ningún inocente había muerto.

Las palabras de todos fueron a buscar a un alcalde, alguien en quién confiar y aunque Forrester no se sentía tan digno, comprendió que ellos hablaban así porque le conocían y confiaban en él.

-Señores si es su deseo, tomare el puesto de alcalde -contesto, tranquilo, tenía la mirada pesarosa y fijaba los ojos sobre el cuerpo destrozado de Timi -pero tal y como ya hemos dicho, no es tiempo para sentir debilidad -los miró -debemos hallar a los mounstros que han asesinado aquí, porque de un modo u otro se nos ha revelado que hay seres peores entre nosotros y no tenemos más opción que... buscarlos y deternerlos antes de que ellos acaben con nosotros... El señor sabe cuanto habría querido que esto no volviera a pasar jamás -suspiro -hace diez años sufrimos lo indecible para hallar a estos mounstros, desearía poder evitar ese dolor - volvió a mirarlos a todos

-debemos pensar en hallar al o los culpables, piensen, ayer dude de Timi, hoy os miro y veo su estupefacción y su miedo, pero no podemos retroceder, debemos hallarlos porque otros como él han caído bajo el influjo de la naturaleza bestial de esos seres y seguiran matando, todos lo sabemos -termino de dar un apoyo a los aldeanos, esperando de corazón que los hallarán, fijó entonces sus ojos en la joven doctora y pensativo contesto.

-Señorita McGregor -nombro -la razón de que no podamos hallar a esas bestias es precisamente esa... es difícil saber si son capaces de mantener las heridas en esa forma -se lamento, porque si fuese así, sería más sencillo.

El padre miraba a todos buscando saber quién podía ser el culpable, el día anterior había dudado del joven terrateniente, de Victor, de Timi -el que esperaba al menos hubiese sentido algo de arrepentimiento por lo cometido- y Martin Moore y aquella mañana, no sabía de quién dudar.

Eddy saco un rotulador de punta gorda y subrayaba sin miedo a las represalias del alcalde encima del libro de actas.

-Bue... Según esto... Timmi, confiaba en Sarah, pero luego la voto para que Martin y Sarah estuvieran empates en la votación de linchamiento. -Alzo la mirada y busco a su oveja. -¿Se dice así, linchamiento? -La oveja no dijo nada pero pareció comprendedla con solo mirarla. -Antes decía que estuvo toda el día hablando con Olivia y que defendió a Martin diciendo que sus palabras fueron en legitima defensa. Y ya. -Cerro el libro, enfundo el capuchón en el rotru y lo guardo en su bolsillo. -En definitiva, fue bastante correcto y parecía no querer condenar a ninguno de los dos. -Hizo un gesto con la boca un tanto molesto. -Beeeeee... -Le replico su mascota y prosiguió hablando.q -Se rasco la nuca. -Y no quiero ser yo quien lo diga, pero esto se esta acabando y debemos apurar, yo empezaría a votar por alguien... -No quiso decir mucho mas, así que simplemente escribió un nombre en un papel y lo dejo en la urna de votación*

Me alegró saber que el padre salía como alcalde, me tranquilizaba ya que estaba convencida de que era inocente y, además de eso, perspicaz y necesitábamos a alguien así.

Pero las votaciones como alcalde ya habían acabado, y ahora tocaba algo mucho más importante y mucho más duro, hallar al culpable.

Eddy tiene razón, ayer timmi votó por mí, aún a pesar de que pensaba que era inocente, y todo fue para salvar a Martín; y hoy se descubre que era un lobo. Hueles a lobo, leñador.

Víctor apareció bastante tarde en la plaza del pueblo totalmente sudado. 

Joder joder joder - dijo - Ya podéis perdonar pero estoy preparando la carrera de las fiestas de vendimia del pueblo de al lado y llevo corriendo todo el día. 

Observó el cuerpo de Timmy desmembrado.

¿Có...cocococo como? ¿Era un lobo? ¡Pero si no tenía ni un pelo en el cuerpo! ¡Que le he visto en pelotas en el río! - Victor intentó hacer memoria de los movimientos de timmy el día anterior pero vio que se echaba la noche encima y tenía que tomar una decisión rápida. 

¿Así que elegimos alcalde y linchamos?. Pues a mi el Padre Forrester siempre me ha resultado un modelo de persona así que me parece un candidato perfecto. Y mantedría mi voto de ayer, pero veo que Timmy votó contra Sarah así que no repetiré. 

- Como era de esperarse, el leñador intento escapar... Pero un hombre con una fuerza incomparable lo detuvo, ¿Que otro que el verdugo oficial de Holiday? Aquel fuerte y misterioso enmascarado que lleba la dura tarea de darle el ultimo adios a los condenados. El verdugo lo entrego al juez y el juez al carcelero. Y en la carcel fue visitado por el anciano padre parroco para sus ultimas palabras. -

[b] - Al atardecer se llevo a cabo la ejecucion y mientras expiraba, su cuerpo se cubria de pelo, garras y colmillos develando su verdadera identidad, pero de una manera mas mosntruosa que lo visto en Timmi, este lobo era mas fuerte, mas grande, era el Padre de los Lobos! QEPD-

- Anochece en Holiday con un gran alivio, ya habia dos lobos menos, el paladar de los aldeanos saboreaban la victoria y un descanso mas que merecido. -

- Mientras que el anciano parroco dijo citando a Freud para finalizar: -

- Y el confiable Padre Forrester, es ahora tambien, el buen Alcalde de Holiday, ¿Como usara sus poderes? Por que dicen que el poder corrompe... -