Finalmente, el alcalde Dooby, un niño pequeño que heredó la alcaldía tras la muerte del alcalde electro que resultó ser hombre lobo, señaló a Eveltino como candidato a la horca.
Debido al valor doble de sus votos y al apoyo de la ciudadanía, Eveltino es subido a la horca. Todos cruzan sus dedos porque saben que si resulta ser el hombre lobo la pesadilla habrá acabado. En caso contrario, debido a las muertes que se han producido y a que muchos vecinos temen pronunciarse por miedo a represalias, esta noche puede ser un punto de inflexión y el pueblo puede quedar condenado.
Así que con sumo cuidado, Eveltino es subido a un taburete sucio y desgastado mientras le colocan la soga alrededor del cuello. En ese momento el alcalde Dooby da la señal y el taburete es pateado... Eveltino muere entre agonía y dolor porque la soga no acaba de tensarse... comienza a escupir pelos y restos de personas...
¡¡Eveltino era un hombre lobo!!
¡¡Enhorabuena al pueblo!! ¡¡Habéis ganado!!