Partida Rol por web

No le iba a dar tiempo hacer mucha cosa, pero lo único en lo que pensó fue en dejar caer la bolsa al suelo, y mientras ella saltaba hacia un lado intentando fintar haciendo creer que iba a salir corriendo por el otro, antes de caer al suelo ya se habría dedicado a empezar a tomar la ametralladora con sus manos.

Si le daba tiempo, también dispararía.

Joder con los putos chinos, por si no estaba bastante jodido va el cabrón y me mete otra cuchillada y me deja tirado en el suelo, bueno, de momento se ha largado y me ha dejado tranquilo, además, parece que con la poli vienen ambulancias, si juego bien mis cartas puede que me curen en una, ya pensare después como escaparme, de momento tenia que concentrarme en curarme

Mark miro a su compañero. Las cosas se les ponian feas y tenia que escoger si intentar largarse o ayudarlo.

Levanto las manos, el tiempo de un forcejeo podia ser vital para el chico. - Vale, uno a de saber cuando rendirse.- dijo con un gruñido.- Cooperare pero traigan ayuda medica para este pedazo de memo.

Riéndome al ver al policía tirado en el suelo tras la patada, sigo mi camino montado en la moto. Con todo esto, había perdido a Brooklyn y con ella la bolsa de dinero que tanto nos había costado conseguir, aunque conseguirla había sido fácil, lo difícil estaba siendo llevárnosla.

Sigo con la moto y me decanto por dar toda la vuelta a la manzana, por si viera aparecer a la mujer. Lo último que quería era recibir un balazo de un madero enfadado. Ya tendría tiempo de apañármelas para sacar de la cárcel a los otros tres que se habían quedado en la tienda.

Sin esperar demasiado, decidió guiarse por la opción en el momento más directa y sabia, así que disparó al policía que le cortaba el paso, a la desesperada.

No podía ser muy sabia en una situación tan complicada y que representaba tanta presión para ella. ¡Si la cagaba, qué sería de su reputación!

Los de su grupo no solían ser muy compasivos.

¡Bang!

Dean intenta curarse un poco más pero no tiene fuerza suficiente para hacerlo. Estaba muy débil y solo podía mantenerse en el suelo o gatear. El policía cuando dio la vuelta y se encontró con el ninja con quemaduras severas y el otro ninja con el cuchillo ensangrentado en mano apuntó a Mark y a Dean. Estaba claro que los chinos eran de los buenos. El del cuchillo lo tiró al suelo y el policía dijo en voz alta a Mark y a Boom Boom.- ¡Contra la pared! ¡Vamos!.- Dijo mientras comunicaba por la radio.- Tenemos dos heridos graves, llamen a la ambulancia, cambio.- Un ruido seco y una vocecilla confirmó que la ambulancia iba de camino. El chino hizo también lo mismo, a pesar de que era de los buenos había que seguir el protocolo policial.- No se muevan.- Dijo con tono amenazante el policía y con cierto miedo a la vez. Si querían podían hacer alguna otra acción, aunque no aseguraría que no acabaran como un colador. La ambulancia estaba al llegar.

La distracción del policía fue respondida con una bala del rifle de Brooklyn, que impactó en el pecho del oficial. Éste cayó malherido al suelo. Su compañero habría oído seguramente el disparo y seguramente pidiera refuerzos. Para Brooklyn era el momento de huir. Esta vez saltó correctamente la valla y se encontró en un callejón con algún contenedor. Al final del callejón habían dos calles, una que iba a la derecha, otra que iba a la izquierda, en dirección a la avenida de antes. Los tejados de las casas eran bajos, aunque no lo suficientemente bajos como para subir a ellos de un salto.

Cyphra dio vueltas alrededor sin pasar por delante del coche de policía a la espera de que Brooklyn estuviera visible para recogerla. En la calle el poco trafico que había estaba paralizado por el incidente. Pronto vendrían más policías y regularían el tránsito de vehículos, así que quizás si aguantaba mucho tiempo tendría que quitarse a algún coche de policía de encima.

Suspiró de alivio al ver que finalmente tenía paso libre ante la huida. Aunque algo le decía que no iba a resultarle tan fácil como salir corriendo por el camino de la derecha.

Pero antes de hacerlo respiró hondo. No podía arriesgarse a que al otro lado hubieran policías, seguramente en mayor número que ella. Y acababa de matar a un oficial. Si la pillaban podía pasarle cualquier cosa.

¡Maldita sea!, no le gustaba matar policías. No tenía nada en su contra (excepto lo obvio, pero a sabiendas de que es su trabajo no tiene nada en contra).

También era su trabajo robar. No pasaba nada.

Respiró hondo de nuevo, sabiendo que lo que tendría que aguantar a continuación lo recordaría toda la vida como el escenario más asqueroso vivido hasta el momento.

Se metió dentro del contenedor junto con la bolsa de dinero.

Sus compañeros le debían una bien gorda.

Un nuevo disparo y ya me temía lo peor. Lo último que supe de Brooklyn, y de la bolsa de pasta, era que se había metido por algún lado, entre las calles, es lo que pude deducir por el segundo coche parado, que estaba lejos de la tienda. Ahora, más que nunca, tenía que poner empeño en encontrarla, o lo que quedara de ella si ese disparo había sido del madero.

Me voy parando en cada callejuela que veo mientras estoy dando la vuelta, y echo una ojeada al interior, esperando encontrarla. No es que yo fuera el príncipe azul que venía a lomos de un caballo blanco, pero la pasta era la pasta y ella se había largado con ella. Incluso, si estaba totalmente convencido de que no había ningún policía cerca, me tomaba la molestia de llamarla, por si recibía alguna respuesta, aunque fuera del callejón de al lado.

La ambulancia llegó corriendo y atendió a los presentes. Mark que parecía intacto fue detenido y metido en el coche policial con destino a la comisaría, junto con Boom Boom. Dean y el chino fueron llevados a urgencias, debido a las quemadura de tercer grado que presentaba el ninja y las contusiones de Dean. El otro chino prestó declaración a la policía de lo que había pasado, así como el tendero y algún testigo. Identificaron a más personas, pero estas habían escapado ya del lugar. Ya sería poco probable que encontraran a los demás. El tendero indicó que le habían robado la moto y dijo su matrícula. El agente transmitió el dato por la radio.- Atención, se busca esta matrícula, si alguno la ve hay orden de arrestarlo por robo.- También indicó que había una chica que le había robado el dinero, la cual había salido corriendo, aunque ya debería estar bien escondida.

Brooklyn se había escondido en el contenedor más cercano. Escuchó a un policía acercarse, para luego, con cautela alejarse y llamar a una ambulancia. Se llevó a su compañero dentro del restaurante para atenderlo mejor. Pronto llegó la ambulancia y los ruidos cesaron, parecía que después de una media hora allí ya se había calmado el revuelo.

Cyphra entra a lomos de su moto en el callejón donde aproximadamente había intuido que Brooklyn podía estar. Miró alrededor a ver si podía ver a Brooklyn por algún lado. A simple vista no pareció ver nada. Una callejuela sucia, nada más. ¿Dónde se había metido Brooklyn? quizás se hubiera equivocado de callejuela. Sonidos de sirenas se escucharon por el perímetro. En la callejuela parecía estar seguro, no estaba a la vista de ningún policía. Los ruidos de sirenas cesaron.

Cuando desperté me encontre en una sala de urgencias, mi única compañia era el bip bip de la maquinita que me decía que podía seguir luchando un día más, observe la habitación, buscando todo aquello que pudiese ser de utilidad para escaparme de ese sitio lo antes posible y reunirme con los demás en la base

Al ver cómo los sonidos y el alboroto al fin cesaban, la joven abrió bruscamente la portilla del contenedor e inundó el ambiente con numerosos tosidos casi desesperados. Había aguantado la respiración todo lo que había podido, pero el putrefacto aroma del lugar había podido con ella.

Suspiró de alivio al ver a Cyphra, y tambaleó la bolsa con el dinero ante sus ojos, con una sonrisa triunfante.

-Siento haberme largado tan de repente, ¡pero ya sabes lo nerviosa que me pongo cuando se trata de pasta!
¿Qué tal todos?

Estaba a punto de largarme de allí, antes de que me acorralaran y tuviera que declarar delante de los policías. Pero en ese momento se abrió la tapa de un contenedor y Brooklyn salía de él entre toses. No creía que dios existiera, pero si había algo ahí fuera, quería que nos encontráramos.

Sonreí un momento al verla, amplié la sonrisa cuando vi la bolsa con la pasta, le hice un gesto con la cabeza para que subiera a la moto, pero apenas se iba acercando ya me estaba arrepintiendo.

-Más vales que te duches o atraerás a todos los maderos con tremendo pestazo... -agito una mano delante de mi cara-. Sube, el resto no ha tenido tanta suerte. Dean recibió una puñalada y poco después de que salieras llegó un coche patrulla. Si no han sido rápidos, y les esperé por si salían, lo más probable es que ahora estén rumbo a la trena. Volvamos a casa, allí se me ocurrirá algo.

Estaba claro que "casa" era una forma de llamar a la base cutre que teníamos, pero todo era temporal, así lo creía. Poner el dinero a buen recaudo y pensar en cómo sacar a esos 3.

En cuanto Brooklyn se pone cómoda, le meto caña a la moto y abandonamos el callejón para poner la mayor distancia posible entre los policías y nosotros. Evitando, a poder ser, las principales arterias de la ciudad, donde los policías podrían encontrarnos con mayor facilidad.

Mark "fue bueno" y se dejo detener, solo para que Dean pudiera ser atendido. Se sintio gilipollas, no le debia nada y seguramente en caso contrario no podria esperar algo ni remotamente parecido por su parte.

Resoplo dentro del coche, si queria escapar no tendria muchas oportunidades entre agentes armados. Solo le quedaba inventarse una historia y esperar que el juez se la tragara pero todo dependia de si las camaras habian funcionado o no. Otra opcion era "pactar" con el juez, una gran idea que podia usar para poner a lo policia en contra de sus enemigos.