La fiebre de conquista arde! Enviados hacía la frontera sur de Brevoy con la nada envidiable tarea de domar y anexar las salvajes Tierras Robadas, nuestros héroes deberán enfrentarse a desesperados bandidos sedientos de sangre, mortales y peligrosos monstruos y a misteriosas amenazas de otras realidades para hacerse con el derecho de reclamar una nación propia.
Tiene la pintoresca e improvisada banda de aventureros lo que se necesita para fundar un prospero reino y defenderlo de los horrores de lo salvaje y lo desconocido? Gobernarán con justicia y misericordia, o se convertirán en los monstruos contra los que antes lucharon con tal de conservar su potestad sobre la nueva nación?
El destino de las Tierras Robadas están en sus manos!
Durante generaciones, las Tierras Robadas han abarcado las interminables tierras salvajes de la frontera sur de Brevoy. Muchas veces se ha intentado reclamarlas y habitarlas, pero hasta la fecha ninguna de estas expediciones ha sido exitosa: Estos casi 100 mil kms cuadrados son la franja de tierra sin reclamar mas grande de los Reinos Fluviales.
Al incrementar hasta puntos críticos la tensión en Brevoy, uno de los Señores de la Espada de Rostland espera cambiar este hecho, planeando apoyar y financiar una serie de expediciones para re-abrir viejas rutas de comercio y derrotar a los bandidos y monstruos que hicieron de estas tierras su coto de caza. Al enviar agentes libres y estos fundar sus propios estados al sur, el Señor de la Espada espera crear nuevas alianzas sin sacrificar su propia posición de poder en Brevoy y conservar, al menos en apariencia, la neutralidad.
Pero, como con todos los planes (en especial los mas brillantes), el diablo esta en los detalles: En el remoto caso que los aventureros logren derrotar al ejercito de bandidos y bestias macabras que acechan en las Tierras Robadas y las reclamen para si mismos, se conformaran con honrar nebulosas promesas y ser peones en un juego político que no les concierne, o se alzaran como verdaderos soberanos de su joven nación, y también de su propio destino?