Los nervios de Hans se fueron calmando, aquel extraño cuarteto le habían parecido muy extraños al salir de aquella manera del local pero bueno... Visto como había ido el día y que la reunión se había ido al garete se tomatría el día libre pensó, joder debían deberle como 300 años de vacaciones o algo así. Mientras deboraba una de aquellas amburguesas de goma decidió treminar de comoer quella cosa y darse un buen tute con el saco de boxeo, quizá luego incluso llamaría a Luna para tomar una copa... Quizá...
Creo que me sento mal la comida,pero no es nada.No te precupes que todo esta bien,vayamos a casa y luego te llevo al gimnasio.
Todo que le decia a Veronica mientras se dirigia al taxi sin mirar atrás,poniendolo en marcha y alejandose de alli.