Partida Rol por web

Tocas lentamente una de las grietas de color del edificio, justo cuando haces contacto ella sientes una sensación extraña, como si algo te atravesase y fluyese a traves de tu cuerpo y observas como un ligero resplandor sale de tu cuerpo en direccion hacia el techo de la caverna, en cuestión de segundos un gran cumulo de nubes se encuentra sobra la zona central de la ciudad...

Noté como un cosquilleo por la parte baja de la tripa, fue raro, de pronto el cosquilleo desapareció y se convirtió en una sensación que recorrió mi cuerpo hasta salir y luego se formaron esas nubes, fue algo muy raro, pero me quedó claro que no debía de volver a tocar.

"Mierda, tengo que alejarme de este lugar, esto podría ser malo si alguien ha visto el punto de origen". Me dirigí otra vez a la verja para saltarla y dirigirme hacia el norte, hacia un monumento que sobresalía por encima de los edificios (6). 

"Debería de ir oculta y atenta por si se acerca alguien."

Trepas la verja y comienzas a dirigirte al norte creyendo estar oculta, tus pisadas son tan ligeras e insonoras como siempre para tu percepción, el silencio de las deserticas calles se une con las sombras del lugar formando un ambiente que en otro caso te pareceria normal, dadas tus experiencias. No obstante esta vez tienes un mal presentimiento, como si algo malo estuviera a punto de pasarte...

Tus temores se confirman cuando miras hacia atrás, al final del callejón que da a otra calle principal, por la que acabas de pasar, descubres que alguien...ALGO te mira con sus colmillos negros goteando sangre fresca de su ultima victima, en los ojos de la bestia se refleja lo que ahora sera su nueva presa....

"Esto debe de ser lo que acabó con aquel grito escalofriante que escuché antes, no esperaba algo así..." Ante mi se ergía una gran bestia negra con pocas intenciones de dialogar.

Sin pensármelo mucho, saco el arco rápidamente y cargo una de las flechas envenenadas. Con toda mi capacidad para concentrarme en un instante, disparo al cuerpo de la bestia una vez. Tras el disparo, avanzo todo lo que pueda en dirección contraria, moviéndome por lugares estrechos.

Sorprendida observas como la bestia lanza una dentellada entre los edificios, incapaz de pasar entre ellos. Las paredes se agitan y agrietan cuando los hombros de la bestia chocan contra ellos. Inmediatamente lanzas tu primer disparo contra la criatura que con un rapido movimiento la destroza con sus fauces.

Tras ver como tu flecha es destrozada con facilidad el miedo se apodera de ti...

"No... Espera... esto no puede estar pasando..." Pum-pum, el corazón me palpitaba muy fuerte y muy rápido, pum-pum. "Yo he... fallado? Esto no es posible" Pum-pum, un escalofrío recorríó mi cuerpo, desde la cadera hasta la nuca, era miedo, había fallado, no era capaz de si quiera imaginarlo y el sentimiento de miedo invadió por completo.

No sabía qué hacer, debía pensar rápido "Corre, huye, escóndete". Miré a mi alrededor sin perder de vista a la criatura, estaba intentado entrar por el estrecho callejón. Buscaba un sitio por donde meterme y escapar, donde poder esconderme y tranquilizarme. Veo de reojo un pequeño callejón, un poco más pequeño que en el que estoy, pero por el que entro sin problemas. Es oscuro y tuerce perpendicularmente.

Decido guardar mi arco y echar a correr hacia el callejón con la esperanza de poder esconderme en algún lugar más resguardado.

Al ver que Shinoya comienza a huir entre las callejuelas la bestia deja de embestir contra los edificios, da un salto sobre ellos y empieza a perseguirla des las alturas.

La aterrorizada Shinoya, demasiado atenta en escapar no pone cuidado en su dirección, solamente corre en busca de un refugio que su vista no llega a alcanzar, tal vez cegada por el miedo.

La persecución se alarga unos minutos hasta que la bestia, cansada del juego lanza un aullido ensordecedor, haciendo que el mundo a tu alrdedor tiemble. Las sombras empiezan a solidificarse a tu alrdedor, introduciendose en las grietas de suelos y paredes, destrozando todo a tu alrededor, en cuestión de segundos te encuentras cayendo junto con una gran cantidad de escombros en un agujero que se ha abierto a tus pies.

Tu impacto contra el subsuelo duro y la imagen de varias partes de edificio cayendo sobre ti es lo ultimo que recuerdas antes de perder el conocimiento...

/*Tiempo más tarde*/

En la más completa oscuridad sientes como la cara y la espalda te arden, comienzas a abrir los ojos poco a poco... Te encuentras en un pequeña "cueva· formada por las ruinas de los edificios caidos, tu frente herida deja correr la sangre sobre el resto de tu cara. La herida de tu espalda, debida seguramente a la caida, duele bastante pero no es nada que no puedas soportar. 

Mientras te semi-incorporas en la pequeña cavidad descubres tu arco aplastado por las rocas cerca de ti, completamente destrozado. Por un segundo te viene a lamente que esa podrias haber sido tu...

Sales con cuidado de entre los escombros, no sabes cuando tiempo ha pasado desde que caiste inconsciente pero esa bestia aun podria estar cerca. Al salir ves como un crater de unos 15m de radio lleno de ruinas se ha formado al romperse el suelo. Divisas un tunel que va bajo tierra, hacia el sur. Mirando hacia fuera del crater, tendrias que trepar unos 5m para volver al nivel de la ciudad, cosa que te ves capaz de hacer.

Además de ello no parece haber rastro de la bestia pero lo que más te llama la atención es que el gran pilar que ascendia en el norte, y era visible desde casi cualquier punto de la ciudad ya no esta....

Al abrir los ojos veo todo medio borroso. "¿Qué ha pasado?" Miro a mi alrededor y poco a poco empiezo a ver nítido. Aaaagh. "Duele, me duele todo, ¿Por qué?" Un instante después recuerdo la silueta de la bestia, miro a mi alrededor agitada buscándola mientras un escalofrío me recorre la espalda. No la veo, la bestia no está...

Permanezco un par de minutos tirada en el suelo, tratando de sacar fuerzas para levantarme y seguir. Lo primero que veo al levantarme es mi arco, roto y se me pasa por la cabeza algo horrible que por suerte no ha pasado "Esa podría ser yo..."

El suelo a mi alrededor había desaparecido, los edificios, todo se habían convertido en ruinas dentro de un cráter. El agujero del cráter dejó a la vista un túnel dirección sur. Echando un vistazo arriba otra cosa había desaparecido... El monumento que había al norte había desaparecido.
"No me extrañaría que la bestia hubiera hecho eso también." Echo un último vistazo al desastre antes de seguir "Podría ir por el túnel, hacia el sur, quizás pegue con aquel edificio que brillaba, otra opción es ir al norte... aunque no puedo saber con certeza si la criatura está o no allí, no se cuanto tiempo ha pasado."

Sin pensarlo mucho, decido ir al sur por el túnel. Echo un primer vistazo antes de entrar al túnel, busco cualquier indicio de garras o huellas por algún lado, algo que me indique si la bestia ha pasado por ahí o no.

Caminas por la oscura cueva deseando no encontrarte de nuevo con aquel monstruo que facilmente podria hacerte pedazos.La cuevase divide en otras tantas formando lo que parece un intrincado subterraneo." Un laberinto subterraneo, bajo una ciudad subterranea...", piensas en lo rebuscado de la idea mientras eliges tu camino.

Tras el paso del tiempo  sin saber si has elegido bien los giros en el intrincado de cuevas encuentras unas escaleras y decides ascender para abrir lo que parece una trampilla. Una vez arriba descubres que estas en una polvorienta casa de dos pisos, sin contar el subsuelo.

Asomadote a la ventana de la casa sin atreverte a salir observas un enorme caserón de aspecto tétrico. Tras él pareces divisar una torre conocida, aquella a la que a tu legada subiste para tener una vista más clara del lugar.

*Además de eso observas como en las calles cercanas al caserón una especie de humo verde sale de algunas grietas provenientes del suelo, son tan pocas que podrían pasar completamente desapercibidas.

avanzo hasta la casa tétrica, noto que mis pasos hacen más ruido de lo normal, veo que dentro de la casa también hay un humo verde. Decido buscar la procedencia del humo, y encuentro unas escaleras que llevan a un lugar oscuro, tan oscuro que ni mis ojos acostumbrados a la oscuridad me permiten verlo todo. Decido ir con una flecha con veneno por delante mientras que con otra mano sigo la pared hasta llegar a un portón del que procede luz verde. Al mirar por la puerta con cuidado, se ven varios altares con objetos encima y al fondo una figura escalofriante, inmóvil, viva. Me coloqué frente al portón. ¿Eres tú aquel al que llaman el alquimista? Acto seguido sin previo aviso, quien parecía el alquimista lanzó una bola oscura directa a golpearme, pero logré esquivarla. Tras un rápido vistazo observé una esfera que colgaba de su bastón, y salí corriendo hacia él a tocarla recordando las palabras que una vez resonaron en la caverna. "La esfera contará como robada si se hace contacto físico con ella."