- Me parece bien. Ivellios contamos con tu guía, pero ¿será mejor que descansemos antes? Mi fuerza mágica está un poco débil, si nos encontráramos con algún enemigo duro no sé si podré estar a vuestro nivel. dijo contenta. - Y tu pequeñín, si quieres estar con Goblins como tú te podemos indicar el sitio donde te acogerán. Sólo tienes que venir con nosotros y te indicaremos el camino a seguir. ¿Te parece? se dirigió con cariño al goblin esclavo.
El destino de Iarno Albrek no era de mi incumbencia, había obrado mal como muchos en estas tierras, así que omití comentario. La idea de que fuese enjuiciado en Neverwinter sonaba bien, al menos para mí, ya que eso es mucho mejor ver la daga de un amigo manchada con sangre de su sed de venganza.
No tenemos que desviarnos ahora del asunto. Deberíamos ir al castillo a rescatar a Gundren. Después nos ocuparemos del tema de la nota - miro a Ingeir - Tampoco sabíamos que saldríamos tan pronto de las cuevas. Además, si los tenemos a todos concentrados en el mismo lugar, los podremos matar a todos en el mismo viaje y no estar dando vueltas todo el día.
Tras las palabras de Taker, asiento en su afán de dirigirnos al Castillo de Cragmaw, pero mi rostro reflejaba un poco de preocupación. Hemos corrido con suerte hasta ahora, y las fortunas han estado de nuestro lado. Es por ello que no debemos confiarnos de nuestros enemigos, congregar a todos en el mismo lugar puede ser en extremo peligroso, así que seamos precavidos.
Por suerte Ingeir propone algo bastante acertado:
- Me parece bien. Ivellios contamos con tu guía, pero ¿será mejor que descansemos antes? Mi fuerza mágica está un poco débil, si nos encontráramos con algún enemigo duro no sé si podré estar a vuestro nivel.
Yo también opino que recuperemos nuestras fuerzas y partamos mañana a primera hora. Eso nos dará tiempo de poder realizar un plan de viaje y estar preparado para lo peor.
Además, el descanso nos servirá para liberar nuestras mentes de este asunto de Iarno y enfocarnos en nuestra real misión...
El goblin asiente ante la petición de Ingeir.La verdad parece bastante inocente,ni si quiera estaba armado cuando os estaba espiando,pero no deja de ser un goblin...
De modo que,entregáis al Mago maligno a Sildar,éste os devuelve el favor a modo de oro,250 piezas de oro.
Si queréis preguntarle algo,tenéis tiempo hasta el amanecer.Será cuando será trasportado hacia Neverwinter.
Sea cual sea vuestra decisión,lo cierto es que necesitáis un descanso.Además de comer y relajarse*.Barthen os da cobijo y comida sin problemas.El hombre está bastante contento de acojer a unos personajes tan heroicos como vosotros,a pesar de tener a un goblin...
ASi que un nuevo dia se hace presente y tras un buen desayuno ,meditáis y os preparáis para ir al Castillo de Cragmaw.
El goblin,inocente os dice:
Yo os podría guiar.
*Apuntaros una de inspiración.
- Hay que pequeñin más majo. dijo al ver que el Goblin asentía a sus palabras. - Yo no tengo más que preguntar, me cansé de oir mentiras. comentó Ingeir mientras se giraba hacia Sildar. - Podríamos ir a descansar con el amable Barthen, le podemos dar unas monedas a modo de agradecimiento. Sugirió al grupo mientras se ponía en marcha apoyandose en aquel bastón de cristal, lleno de misterios que no sabía si llegaría a descubrir. - Vamos pequeñin. Conocemos un sitio donde descansar y comer muy tranquilos. ¿Te apetece comer?
Se dirigieron a la tienda de Barthen e Ingeir le recibió con un gran abrazo y le contó las hazañas que habían realizado, no había sido demasiado pero lo adorno para que pareciera una historia épica mientras usaba sonidos mágicos de fondo para darle colorido a la historia. Se acostó cerca del inocentón Goblin para descansar y abrazada a su nuevo bastón pasó un rato concentrada en examinarlo y descubrir las maravillas que podría contener aunque finalmente cayó rendida en un profundo sueño y durmió plácidamente durante la noche.
El amanecer llegó rápido cuando uno más disfruta del sueño y a Ingeir le costó desperezarse. Su primera mirada fue hacia la parte superior del maravilloso bastón de cristal con el que había dormido, sin duda una bella vista para comenzar bien el día ya que se veía reflejada así misma en él. Notó en su interior que había recuperado sus energías arcanas bullendo en su interior. Se giró hacia un lado y miró hacia el pequeño Goblin que parecía despierto. Quizá no hubiera dormido esa noche pero no parecía tenerles miedo y eso hizo que se pusiera en pie con una sonrisa, sacó la flauta de la mochila y comenzó a tocar una bella melodía para alegrar el corazón de sus compañeros y Barthen. - ¿Que quiere que toque señor Barthen? ¿Qué canción le haría comenzar un estupendo día? tocó con entusiasmo la melodía que Barthen le indicó haciendole bailar a él y al inocente Goblin con sus melodías y desparpajo.
Tras la música y los bailes matutinos Barthen anunció que el desayuno estaba preparado. Con un hambre voraz devoró el desayuno y recogió sus pertrechos. Mientras el grupo terminaba de prepararse continuó estudiando aquel báculo buscando inscripciones en él y exponiendolo a los primeros rayos del sol para ver a través de él.
Antes de salir entró a la tienda de Barthen para despedirse, le dió un fuerte beso en la mejilla y dejó dos monedas de oro sobre el mostrador. - Por los gastos que le ocasionamos señor. Pase buen día y esperamos volver pronto con el Enano. ¡Vamos pequeñin! le dijo al Goblin dandole la mano libre para que fuera cogido a ella. Cuando este les dice que les podría guiar se quedó sorprendida. - ¿Sabes a donde nos dirigimos?
Durante un descanso corto(short rest),puedes concetrarte mientras estás en contaco con el objeto,para identificarlo y,al final del descanso,conocerá sus propiedades.
Imagino que el descanso largo es para dormir y no ha podido concentrarse demasiado tiempo en el bastón ya que necesita recuperar fuerzas y energía arcana.
Me apunto de nuevo los slots gastados
Cita:
Cragmaw...Responde el Goblin.
Antes de partir os dair cuenta que falta alguien.La clériga enana,ya no está con vosotros.Encontráis una nota,donde estuvo ,supuestamente durmiendo:
Cita:
Pedazo bastón, está genial.
Cuando llego a casa le meto el baston en el inventario que aun no lo habia echo.
- que majo que eres pequeño, entonces te nombro nuestro guia. le dijo sonriendo. Cuando estaban listos para partir notaron que faltaba la enana y buscandola encontraron una nota en el lugar donde se habia acostado. Una lagrima cayo de los ojos de Ingeir al leer esas palabras y deseo suerte a su amiga.
- Barthen podrías ofrecernos comida de viaje, para dos días imagino. le pidió Ingeir poniendo 4 monedas de oro sobre la mesa.
Edito para coger 8 raciones de viaje donde Barthen y no morirnos de hambre por el camino, si estamos a tiempo.
La nota me dejó un poco descolocado. Al parecen Evyth había marchado sin decir nada. Después de varios meses con ella, había generado un punto de cariño hacia la clériga.
Esperaba que solucionara pronto sus asuntos y poder volver a verla en el futuro, aunque no confiaba en ello.
Una vez más volvieron a Phandalin victoriosos y esta vez acompanados de Gundren,quien os agradece enormemente ofreciéndoos 25 monedas de oro y más riquezas si le escoltais hasta las minas.
Una oferta irrechazable por parte de los héroes.
La gente del pueblo parece que está más alegre e incluso las calles están más concurridas que antes.Esto es debido a la erradicación de la banda Redbrand.
Ahora mismo os encontráis en la taberna Stonehill,celebrando junto a Gundren su rescate.El invita,con lo que no pudisteis rechazar la oferta:
Antes del amanecer parrtirremos hacia la Mina...os dice Gundren y alza su pinta de cerveza...
El enano había quedado satisfecho cob nosotros y una buena suma de monedas abultada aun mas ni bolsa. Pero a pesar de la tranquilidad actual, Gundren quería que le escoltáramos hasta las minas. Parecía que había quedado contento con nuestras habilidades con el cambiaformas y había decidido que éramos los más adecuados para emprender una nueva misión.
Por volver de una pieza nuevamente
Alzo también mi jarra.
Llegaron a Phandalin sin incidentes relevantes y en buena forma. Gundren estaba contento por su liberación y el pueblo parecía más alegres. Sin duda el grupo había impactado en la zona positivamente y aquello alegro a la muchacha. Gundren ofreció a los jóvenes aventureros bebida y cena en la taberna, algo que obviamente no podían rechazar con lo que escusandose un momento y que volvería en breve Ingeir marchó primero a saludar a Barthen para que supiera que estaban todos bien junto con el enano y que si quería podía pasarse a la taberna para charlar con ellos. Después se dirigió al ayuntamiento para informar al caballero Sildar de que el enano estaba a salvo, ya que el mismo estaba preocupado por él.
Un rato después llegó a la taberna y se sentó junto a sus compañeros a celebrar la buena ventura del grupo. Hasta ahora habían solventado las incursiones bastante bien. Echaba de menos a su compañera enana, pero sabía que si había marchado había sido por algo que requería de su inmediata atención.
- Brindemos por ello dijo Ingeir alzando su pinta de cerveza ante el brindis de Trake.
- Y una vez lidiemos con la mina, te prometo Ivellios que te acompañaré para tratar con ese Dragón, quizá a mi me escuche. le dijo al elfo para reconfortarle de nuevo. No quería dejarle tirado después de toda la ayuda que les había prestado. - Además quizá allí encontremos maravillas que nos ayuden para mediar con el Dragón, ¿Quién sabe las maravillas que crearon en la fragua mágica de las minas. dijo tocándose la gema del pecho de la que nada sabía salvo que un terrible dragón la quería. - No debemos dejar que esa tal araña llegue antes que nosotros.
Que así sea...Dice Ivellios levantando su jarra.
EN cuanto Roderic postee algo ,avazaré la partida.Igualmente como mucho abriré nueva escena esta misma semana.