Partida Rol por web

Gente, quedan doz habitazionez que buzcar, cazi mejor me bajo con Argi por zi laz mozcaz, que vale que en una biblioteca zeaz buena, pero ezto ez el mundo real, y eztaré máz acoztumbrado que vozotroz a buzcar cozaz - Apostillo Arek con falsa modestia. Pero yo zeguía queriendo dormir.

Rufus, Argi y Arek deciden probar suerte en el sótano de la casa del desaparecido. Entran al sótano a través de una trampilla en el suelo, al abrirla se ve una escalera descendente. El sótano es más grande que la casa, aunque está extrañamente vacío. Hay librerías alrededor de las paredes, pero no hay nada en ellas. 

Lo único interesante en el lugar, además de las librerías, es su estado, indudablemente son nuevas, ya que huelen a eso... a nuevas, seguramente tienen menos de un año de antigüedad. Es claro que los libreros son mucho más nuevos que el sótano.

Rufus estaba frustrado. Sentía que su ayuda en la situación era mas bien nula, y por ello queria terminar con esto cuanto antes. Quiza incluso ir a una taberna, beber unos tragos y lo que le deparara el azar.

- Aqui no parece haber nada. Terminemos con la ultima habitación

Argi arrugó el rostro, claramente molesta por el tiempo que estaba perdiendo revisando unas estancias que no estaba segura de tener algo útil, tiempo que preferirí invertir en poder ojear la libreria bien surtida del templo.

Avanzó tras Rufus, murmurando a cada rato las mismas palabras arcanas que le permitían visualizar el tejido mágico que impregnaba todos los planos.

Argi comienza a buscar concienzudamente, revisando cada milímetro, cada esquina y cada rincón de la caza, tremenda tarea le ha llevado casi todo el mediodía y ya está bastante entrada la tarde. Al parecer no ha encontrada nada más de interés, incluso utilizando métodos mágicos. En la habitación principal y en el sótano no se encuentra más nada, además de lo ya descrito y en la otra habitación sólo encuentran ropa sucia y comida seca.

Ya oz habeiz quedado a guzto... venga, vamoz a comer que ze haze tarde. Tendremoz que dizcutir el metodo de actuazión, laz opzionez poziblez zon: 

1.- Preguntar a loz vezinoz, había una gran biblioteca en el zotano y mover tantoz libroz habrá llamado la atenzión

2.- Ir al templo para confirmar la informazión del hermano Egil

3.- Preguntar al capitán por zu relazión con el hermano Luziuz.

¿Por donde empezamoz? Y pazo de zepararnoz

Arek puso voz a lo que todos tendrían en mente o deberían tener, la mañana solo había servido para encontrar una infima pista sobre lo acaecido y demasiadas incognitas por resolver.

Aine asintió con la cabeza.

- Tienes razón, Arek. Yo lo haría precisamente en el órden en el que lo has ido diciendo. Si preguntamos a los vecinos, podremos saber si aquí había algo o no. Luego hacer una visita al templo debería de ser algo rápido, además, es un templo de Oghma. Espero que estén dispuestos a compartir información con una devota.

... El tema del capitán me da mala espina. Y creo que podríamos aprovechar la caída de la tarde para habler con él y la noche para acercarnos a ver qué hace.

Argi seguía ojeando el diario que habían encontrado, sin hacer demasiado caso a la charla sobre qué orden seguir.

Me parece bien. - dijo sin apenas levantar los ojos brevemente de las hojas de papel.

Aburrido y malhumorado por haber resultado de tan poca ayuda, Rufus solo abrió la boca para decir...

- Os sigo.

El grupo parece estar de acuerdo en el accionar a tomar. Tras asegurarse de no dejar pistas en la casa del devoto desaparecido salen y cierran con la llave que les fue otorgada.

Al salir se vuelven a encontrar con el barrio humilde por el que habían pasado en su camino al hogar del hermano. Se encuentran en un barrio de clase media-baja, la gente que camina por la calle usa ropas simples y en muchos casos remendadas. Más de una casa tiene aspecto de abandonada aunque se escuche gente de dentro. 

Aine fue entonces a preguntar a los vecinos. Querian saber si habían notado algo extraño en Lucius o si habian escuchado ruidos o sentido cualquier cosa fuera de lo "habitual".

Pobrecita, se le da bastante mejor cantar y bailar que negociar con los aldeanos, bueno, me aprovecharé de su cara de frustración.

Como en todo barrio pequeño y temeroso, la vida a las calles tiende a llegar por la tarde, cuando las personas mayores salen a la calle, para disfrutar de la luz del sol, ver correr a los niños y disfrutar de la conversación de épocas pasadas y para ellos siempre mejores. Y se acerco hacía ellos.

Buenoz díaz, ziento moleztarlez en eztoz momentoz de relajazión, pero mi amiga ezta muy nervioza, haze tiempo zu hermano Luziuz vino a vivir aquí y no ha vuelto a rezibir notiziaz, en el templo le dijeron que tenía una caza en loz alrededorez, pero parece que no ezta. Agradezeriamoz cualquier informazión que pudieran ofrezernoz.

Tras tres horas preguntando en los alrededores a vecinos y transeúntes sobre los últimos movimientos del hermano el grupo se vuelve a reunir en la puerta de su casa.

Al parecer los vecinos reconocen no ver al hermano hace un tiempo, quizá una semana o más, no podrían dar un tiempo exacto, pues no han prestado atención hasta que un grupo de extraños (ustedes) se ha presentado preguntando por él. Nadie recuerda haber visto a alguien entrando junto al hermano a su casa o que este deambule en horarios poco habituales. 

Tres horas preguntando y no habían conseguido nada. El camino a seguir estaba claro, Aine miró al resto del grupo y preguntó:

- Bueno, ¿Vamos al templo? - Por un lado le apetecía compartir experiencias con gente del culto al que ella también adoraba, pero por otro lado le daba un poco de miedo lo que allí pudiera encontrar.

Pareze la única opzión máz o menoz viable, aunque zi ha zido capaz de tener engañadoz a todoz zuz vezinoz que no habrá hecho con todoz los miembroz de tu culto, en cualquier cazo ya hemoz llamado demaziado la atenzión por aquí, a zaber que zorprezaz noz deparará el haber eztado trez horaz preguntando, ya ze ha dejado la zemilla... Ezpero que noz den algo de merendar.

El temperamento de Rufus comenzaba a rozar la mala hostia. Tres horas tiradas entre parloteos justo despues de otras tantas rebuscando en una casucha... Definitivamente no era a lo que estaba acostumbrado el guerrero.

- El templo o el capitan, me da igual pero que sea rapido. Estoy cansado de hablar tanto.