Vale, pues ahora decidme, ¿quien conduce? El coche que os han dado es un monovolumen, con capacidad para 7 personas conductor incluido, por lo que vais espaciosos. El coche es familiar por lo que no es nada cantoso ni nada, no lleva cristales tintados ni nada de esas cosas modernas. Tambien podeis ver que tiene armas escondidas en algunos puntos clave, de facil acceso. Pistolas S&W con cartucheras y cargadores suficientes para todos.
Y otra cosa ¿adonde vais primero?
Cojo las llaves del monovolumen y pregunto a mis compañeros:
- ¿Alguno sabe conducir por la izquierda? si no le echo un par de huevos y lo hago yo...
Nunca llevé un coche por la izquierda así que tendré que ir despacito para no cometer ninguna barbaridad. No se a dónde ir primero, por mí iba a dar un garbeo por la ciudad y ver que ambiente se respira. Alimentarme un poco y luego pasarme por la iglesia esa pero el príncipe tiene prisa y es mejor no contrariarle.
Arranco el coche y salgo en dirección al pueblo, en busca de esa iglesia para inspeccionar el terreno.
- Vamos a la iglesia primero ¿no?
- ¿Realmente importa quien conduzca? Vámonos ya y cumplamos con nuestras obligaciones, que parecemos un grupo de nenas. - digo bastante enfadado en vista de que nadie más había tomado la iniciativa.
Siento la tardanza, me estaba poniendo al día.
Vais conduciendo y al cabo de una hora o asi llegais al emplazamiento de la iglesia. No se ve a mucha gente por allí cerca, pero podeis ver que estais en una zona costera. La iglesia esta en un pueblo pequeño, en lo alto de una colina. A unos 200 metros de la iglesia hay un pequeño puerto y en el puerto un par de hombres que estan hablando de sus cosas.
La iglesia no es muy grande, pero claramente es la que se anuncia en el folleto. El caso es que por alli no hay nadie a estas horas.
- Bueno ya hemos llegado señores...echaremos un vistazo al alrededor...no debemos llamar la atención mucho...sobre todo si va pasar algo aquí...
Echo un vistazo a nuestro alrededor esperando no encontrarme ninguna mirada inquisidora dirigida a nosotros. No hay nadie pero puede que alguien esté observando desde alguna ventana y mejor que no llamemos la atención de nadie, sobre todo si hay inquisidores de por medio.
- Podríamos separarnos y así abarcaremos más zona y revisaremos esto antes...¿qué os parece?
Ni una palabra ha salido de mi boca durante el trayecto hacia la iglesia, ¿qué más decir? Me entretengo examinando las armas que hay en el coche, mucho más interesantes que otra cosa. Escojo una de las pistolas y un par de cargadores, no creo que sea útil contra algo que no sea humano, pero nunca se sabe.
Dos grupos, sería bueno dos grupos.
Digo mientras bajo del coche metiendo la pistola en la parte trasera de mi pantalón. Miro a todos, pensando cómo hacerlos.
Creo que sería mejor Miyu y yo por un lado y el resto por el otro. Nos encontraremos en ese punto.
Señalo un punto al otro lado de la iglesia.
Ya estoy aquí :-)
La hoja afilada, hermosa, lista para ser usada. La veo de reojo en el automóvil mientras nos dirigimos hacia la Iglesia. Una sonrisa se escapa, mi lengua baila y se agolpa en mis labios.
"Te... tendrás cuidado, ¿verd... dad? Piensas que soy tan estúpida como vos seguramente... quiero divertirme un momento, hay algo que ese idiota impidió y me gustaría cobrármelo con él. Pe... pero, es poderoso y lo... los que lo sig... uen también. Descuida, dedícate a observar".
Mi cabeza se mueve en una silenciosa conversación y, sin darme cuenta, ya estamos en el lugar. La zona parece fantasmal. No sucede nada, no hay prácticamente nadie. Esto huele bastante mal... incluso podrían estar observándonos ahora mismo.
Escucho las palabras de Misha y me resultan las más acertadas.
"- Así es, lo mejor será estar juntos luego antes de adentrarnos más... divididos no podremos contra los lupinos- agrego a las palabras de mi compañero y le miro-. No te pases de listo... si intentas algo, te corto las pelotas- le susurro y sonrío... él lo entendería, siempre lo hace-. Tal vez sería bueno ver si aquellos en el puerto han visto algo últimamente- concluyo".
Sería de agradecer un poco de ritmo. Por lo pronto decidme ¿quienes vais y a donde?
Sonrío ligeramente a Kiyu, niego con la cabeza ligeramente.
Kiyu, sólo si tú tienes cuidado yo lo tendré, ya lo sabes.
Miro al resto.
¿Entonces? ¿Nos movemos? Quedarme aquí de pie para que puedan detectarnos no creo que sea buena idea.
Hago un gesto a la malkavian para que me siga, mientras empiezo a andar.
Vamos, nos vemos al otro lado de la iglesia, Kiyu, si quieres hablar con los del puerto, podemos pararnos un momento.
Yo creo que está claro, Misha y Kiyu por un lado y el resto por el otro, para juntarnos al otro lado de la iglesia y entrar.
-Señores, el tiempo apremia - digo mirando al resto sabiendo que Misha tiene razón. Si seguimos así de quietos nos verán.
"- Hablar no es necesariamente lo que tenía en mente, Misha... pero... bueno, si así lo deseas. Hubiese preferido ir a tantear un poco el terreno, aunque con un perro en el equipo creo que será mejor hacerlo olfatear- le contesto sacando a relucir mis dientes un poco en algo similar a una sonrisa".
Me acerco a mi compañero para que emprendamos la caminata de inmediato y doy media vuelta antes que partamos.
"- Bien, nos encontraremos en el punto más adelante... de suceder algo... avísennos como puedan- les digo y continúo caminando".
- Gunnar mejor vamos a ver que se cuece en esa zona... - digo señalando a la zona del puerto - ...vosotros podéis inspeccionar los alrededores de la iglesia... - le digo a Misha y Kiyu - ...es mejor mantenerla alejada de los seres vivos de momento... - añado refiriéndome a la malkavian
Mejor que Gunnar y yo vayamos hacia donde hay hombres, la malkavian puede volverse loca como en Nueva York e intentar matarlos. Aquella noche por poco montamos una pelea con medio sabbat en medio de un almacén. No pienso poner de nuevo mi pellejo en semejante peligro por las ganas de juguetear de la malkavian.
Miro a Héctor y añado:
- Héctor ven con nosotros... - digo mientras señalo a Gunnar y a mí - ...siempre se agradece un diplomático en el grupo...ya sabes que nosotros no somos precisamente buenos con las palabras...más bien con los puños... - en ese momento me acaricio el puño izquierdo - ...es posible que tengamos que preguntar algo a esos tipos de allí y mejor que lo hagas tú que nosotros...
Héctor causa mejor impresión que nosotros y es por eso que mejor que hable él, si lo hiciéramos nosotros puede que los acojonásemos o los pusiéramos a la defensiva y eso no es nada bueno en estos momentos.
Entrar en una iglesia no es que me haga gracia pero bueno será mejor hacerlo hoy que estará vacía que no llena de fanáticos.
- Misha acuérdate de controlarla... - advierto al ruso
Por experiencias pasadas...NO DEJÉIS QUE KIYU SE ACERQUE A UN SER VIVO...xDDD
"- ¿Qué pasa?... soy inofensiva- le digo sonriendo a Bram- De cualquier modo, esto es un pueblo... suelen haber más juguetes- añado guiñándole un ojo".
Reviso la katana que llevo conmigo... hace tiempo que no la uso y los dedos parecen temblarme al tocarla. Mi lengua baila en mi boca, produciendo un molesto sonido... y, al instante, comienza a acariciar mis labios.
Miro a Misha y le tomo del brazo, tironeándole un poco.
"- Vamos... hay que ver que se cuece aquí".
-Dejad de discutir y adelante. Nos vemos en el punto señalado - digo mientras echo a andar viendo que el resto no tiene pensado moverse.
Bien, si no quieres hablar examinaremos la zona exterior, Kiyu, luego veremos.
Dejo que se agarre a mi brazo, y vuelvo a caminar hacia uno de los laterales de la iglesia, giro un momento la cabeza para mirar a Bram, sonriendo divertido.
No te preocupes, será una buena chica y se portará bien, ¿verdad?
Mi mirada vuelve a la malkavian, que mira demasiado su katana.
De momento tenemos que hacer algo más importante que jugar, luego, cuando termine todo esto, quizás puedas hacerlo.
Miro a mi alrededor, no me fío, nada, la iglesia está a oscuras y silenciosa, los alrededores también, a lo lejos puedo ver el puerto, oler la humedad que llega, salada. Un pueblo pequeño, muy pequeño. Veremos. Compruebo la pistola por un momento, al igual que los cargadores que tengo en los bolsillos. No creo que eso hiciera mucho a un hombre lobo, no, pero a un humano sí.
- Espera Gunnar...voy contigo -digo mientras me acerco a él para inspeccionar la zona que nos ha tocado en suerte.
No las tengo todas conmigo con la malkavian, espero que el ruso sepa controlarla si no tendremos que cargar con sus restos si la malkavian acaba con él.
- Primero echaremos un vistazo rápido...si veis algo raro avisad y le echaremos un vistazo más a fondo...intentad no parecer ladrones porque creo que en un pueblo como este les harán lo mismo que a los vampiros...
Es un pueblo demasiado oscuro, demasiado triste...se asemeja a los pueblos donde la Inquisición reclutaba hombres. Pobreza y fe, una peligrosa combinación en manos de un orador hábil.
Echo un vistazo por si acaso a mi alrededor en busca de miradas sobre nosotros. Luego me dedico a inspeccionar la zona con algo más de calma.
Dime que tiro para investigar.