La parca pareció decepcionada por la respuesta de Van Helsing y cuando Richleau habló giró la cabeza hacia él centrando su atención.
- Eres curioso, Hijo del Dragón... no sólo te pareces al Dragón en su aspecto, sino en su osadía y su descaro a la hora de eludir su tiempo- la parca se acercó entonces al duque situándose a unos escasos metros de distancia de Richelau- si... además de osado eres temerario, si aquel que se hace llamar principe de las tinieblas hubiera sido menos temerario no se hubiera convertido en lo que es. Harías bien en recordar estas palabras si no quieres seguir su ejemplo... y- en este punto no pudo evitar sonreir de manera abierta- no son vuestras vidas la mejor forma de negociar que teneís conmigo... Os recuerdo que vuestros hilos están marcados y que los cortaré cuando hayan sido terminados de hilar... Aunque me parece ingeniosa la manera que has tenido de ofrecerme tu vida, mortal. Me ofreces venir a buscarte cuandos hayas vivido lo suficiente- volvió a reir divertida- los mortales tenéis vuestra gracia, he de admitirlo... sin embargo- una expresión traviesa acudió a su rostro- te diré el nombre porque hace mucho que ningún mortal se había atrebido a hablarme como tu- sonrió nuevamente- Emilie Portman es la descendiente directa de Boris "La Hoja", con esto ya he dicho más que suficiente, hay otras entidades en juego con las que me las tendré que ver si sigo perdiendo el tiempo con vosotros... lo demás tendréis que averiguarlo.
La parca nada más terminar de pronuniar estas palabras desapareció en un parpadeo dejando a solas a ambos caballeros, en mitad de la humilde y lúgubre casa de los Portman.
La reacción del duque dejó anonadado al profesor. ¿Le negaba un trato cuando él ofrecía otro?¿Acaso seguía en sus cabales? Al final iba a ser cierto que la nobleza es un tanto excéntrica. Sin embargo no le dio mayor importancia que la sorpresa inicial. Conocía ya lo suficiente al duque como para seguir asombrándose por sus reacciones.
Las últimas palabras de la mujer dejaron pensativo a Van Helsing. Boris “La Hoja”. Aquella mujer desapareció sin que el profesor fuese capaz casi de percibir el momento en que lo había hecho. Asegurándose que se encontraban solos de nuevo preguntó a su acompañante:
-¿Conocéis tal nombre, sir? Quizás sea bueno conocer la sangre de Emilie. De esta forma podríamos adelantarnos a los pasos del enemigo. Si sabemos que quieren de ella, sabremos cómo encontrarlos y cómo detenerlos.
No veo ninguna habilidad para saber nombres, jeje. ¿Nos suena de algo o tiramos de biblioteca, mastercilla?
-Luz Eterna says:Boris es uno de los señores vampiros que el duque te nombró cuando nos conocisteis ^^ Ahora después te los pongo en tu escena personal, tu sólo conoces personalmente a Drácula pero hay más, uno de ellos ha sido asesinado, Tiberio "El Grande" de los demás solo sabes lo que te dijo el duque en su momento. Si quieres modifica el post antes de que el duque te diga algo. Que ya sabes como se las gasta XDDDD
No me fastidies que llevo medio post hecho >_<
Acababa de salvarle la vida aquel ignorante que se hacía llamar caza vampiros. Estaba seguro que no era consciente a ninguna altura de su propia inteligencia o sentido común de lo cerca que ha estado de condenarse antes de tiempo. Jamás le explicaría que acababa de salvarle, no lo veía necesario, y tampoco se merecía saberlo.
¿Cómo es posible que con lo que le gusta meter las narices en todas partes siga vivo?
Suspiré con hastío al ver cómo me miraba Van Helsing. Espero que hayas aprendido algo de todo esto. Pensé, volviendo a mirar a la mujer cuando me nombró. Mis dedos se cerraron entorno al pomo del bastón, y mi mirada se clavó en el de la mujer. Escuché como una vez más alguien me comparaba con el Príncipe de las Tinieblas. Pero hubo algo de diferente esta vez, pues mientras los demás se limitaban a sorprenderse del parecido físico, este ser me había comparado en temperamento y formas.
Qué asco.
Y lo peor es que no aceptó mi trato. Ahora no sabía si se había dado cuenta de la trampa en mi trato, o si simplemente lo había descartado por otros motivos. Que la muerte tuviera que esperar 50 años para venir a buscarte eran todo ventajas, cabía decir. No sonreí a pesar de que ella si lo hiciera. Ya había bailado suficiente con la muerte aquella noche, como además ponerme a coquetear con ella sin una taza de té en la mano, o en un lugar tan asqueroso y repulsivo como aquel.
Y ni gesto varió, ni me moví, ni parecí inmutarme lo más mínimo en su relato hasta que pronuncio un nombre. Boris. Inconscientemente, mis dedos se cerraron con fuerza en torno al bastón, con toda la fuerza que era capaz de ejercer y mi mandíbula se tensó en un gesto apenas perceptible al ojo humano.
No me moví. No le di las gracias, no hice nada más que centrarme en aquellas tres palabras. Pasaron algunos segundos, en los que mis cejas fueron dibujando una mueca contrariada, enfadada, meditabunda. Buscaba sentido, buscaba respuestas, buscaba un régimen de actuación a partir de ahora.
Hasta que Van Helsing hizo gala una vez más de sus mejores cualidades. Preguntándome si conocía un nombre demasiado conocido para mí. Ignorante. Pensé, mordiéndome la lengua ante mi propio enfado. Seguí mirando donde estaba la muerte, fijamente.
- Boris "La Hoja" o Boris "el Esquivaflechas". Si existe un ser que pueda encarnar la crueldad y la maldad, ese es él. No solo es hábil, inteligente, astuto y rápido, también parece tener cierta habilidad especial para escapar de la muerte inmediata con demasiada facilidad. Hace dos años fue la última de doce intentos de acabar con él, pero acabó escapando. Mató a tres buenos amigos y estuvo a punto de arrancarme el corazón con su propio puño. No solo tiene una Gran Rivalidad con Drácula, también conmigo. Es uno de los cinco Señores de la No-Muerte... y Emilie su descendiente. - Había gravedad en mis palabras, y me di la vuelta, en un gesto rápido y brusco, caminando a toda prisa para abandonar aquel sitio lo antes posible.
Esperaba que Van Helsing hiciera algo útil y me siguiera. Debíamos volver a casa cuanto antes. Weaver era un excelente guardián, pero no era rival para Boris. Emilie podía estar en peligro.
Van Helsing ¿tiene usted algo más que decir? ^^
Perfecto. Al parecer el con el último actuar acababan de meter bajo el mismo techo a los dos objetivos más importantes para Boris "La hoja".
Si querían llegar hasta Boris, simplemente con esperar sería suficiente. Antes o después aparecerían en casa del duque. Pero debían prepararse.
Tirada oculta
Motivo: buscar
Dificultad: 0
Habilidad: 1+9
Tirada: 2 7 7
Total: 7 +1 +9 = 17 Éxito
Una última revisión por encima si no encontramos nada más, nos vamos.
Van Helsing se quedó mirando la habitación en semipenumbra, tan sólo estaba iluminada por la débil luz de la vela donde había estado trabajando la parca. La llama estaba comenzando a extinguirse, medio hipnotizado por la pequeña danza del fuego, el profesor pareció escuchar de nuevo el susurro de la muerte en su oído.
- La sangre lo es todo... y la tuya va a ser reclamada.
Van Helsing se giró hacia un lado para descubrir en una milésima de segundo el rostro enigmático de la mujer, pero en un parpadeó volvió a desaparecer. Con el corazón acelerado se preguntó si no lo había soñado, al volver a mirar a su alrededor descubrió que la llama se acababa de consumir. Era hora de salir de allí.