Partida Rol por web

"Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad", había dicho Ben...

Lo lograron.

Las palabras de Ben, de su fantasma, o de la alucinación de mi cabeza que tomaba la forma de Ben, habían logrado calmar mi dolor interior. Ben ya no estaría con nosotros. Eso era algo que tenía claro. Pero había dejado un legado. Un legado en mi educación que había forjado mi personalidad. Un caracter y actitudes que le hacían sentirse orgulloso de poder considerarme su hijo.

Aquella combinación de palabras fue un bálsamo en mis heridas.

- Gracías Ben... -susurré aun con lágrimas, pero lágrimas ya no de pena, si no de orgullo, consuelo y despedida- Te prometo que haré lo que pueda por ser fiel a esa voluntad... Estés donde estés, descansa en paz. Haré que estés orgulloso. Lo juro.

Y sin considerar si Ben era alucionación, fantasma o sueño, me incliné instintivamente hacía él, tal como había hecho cientos de veces, para darle un abrazo con el que sellar mi juramento. No se me ocurría una mejor forma de hacerlo.

Un juramento que forjaría mi destino a partir de ese momento...