Fruncí el ceño - ¿Qué pasa? – susurré
El elfo se comportaba de una forma extraña – No, no noto nada ¿Qué tengo que notar?
Entramos a la habitación, pero allí faltaba gente – Bueno, ¿me lo vas a contar o qué? - ¿A qué venía tanto misterio?
Pasamos a la habitación y cierro la puerta suavemente. Rapidamente me doy cuenta de la ausencia de Korba y Aaron, pero aun asi comienzo a hablar, aunque nervioso pausadamente...
- Un dama de mi raza ha hablado conmigo, amigos del caminos... Los bosques, los elfos, todo está siendo destruido por el malvado rey, debemos actuar rapido o mis hermanos será aniquilados... digo preocupado, metido en mi nueva identidad de lleno... Ella y yo, hemos estado hablando, y de repente hemos sentido una presencia maligna, maga, poderosa procedente de abajo... un silencio perturbador... Aribel, pues asi se llama la hermosa elfa, ha bajado, pero no debemos dejarla sola, presiento algo tenebroso... amigos... mi voz se va apagando poco a poco en un susurro casi inaudible...
Lobosol, desmarca a Korba y Aaron! :D
Me hizo gracia su comentario, el no tenía nada que de de aquí…- ¿Tus hermanos? – Dije con sorna – Bueno vale – dije poniéndome serio, había que acostumbrarse a este mundo.
- Coño – exclamé agarrando mi estada – pues habrá que bajar a pelear ¿no? – dije decidido
- Avisemos a la chica y al viejo que están en la habitación de al lado
¡Sorry!
-Vayamos, susurro ya saliendo de la habitacion, pero de momento con cuidado... no sabemos lo que nos espera abajo.... Por cierto... donde están Aaron y Korba?
Salgo de la habitacion, y me dirijo a la habitacion del mago...
Toc, toc...
... llamo a la puerta...
No entendía porque tanta precaución por una presencia maligna, pero bueno, estábamos en un mondo nuevo, no dejé de empuñar mi espadón y acompañé al elfo a la habitación de al lado, quizás el viejo nos pudiese iluminar un poco más.
Cogí aire ¿Y si el viejo era el culpable? O mejor pregunta aún ¿Cómo el viejo no se había dado cuenta? Si era tan bueno…