Partida Rol por web

Al cabo de poco la puerta es abierta por uno de los mayordomos que al reconocerte te da las buenas noches con una pequeña reverencia y te deja pasar al interior de la lujosa mansión, incluso algo ostentosa en al decoración cómo si quisiera dejar claro lo que es capaz de conseguir y pagar...
El criado en cuestión te acompaña hasta una de las muchas salas de la primera planta, una habitación pequeña con varias butacas mullidas, una gran chimenea de mármol ahora apagada, librerias de madera tallada llenas de libros que probablemente sólo están para adornar y aparentar y a los pies una extensa alfombra perfectamente limpia representando un mosaico romano que no identificas en éstos momentos.

Al cabo de pocos minutos Maxwell cruza las puertas sonriéndote ampliamente.
-¡Jennah! Qué sorpresa, apenas creía a Robert cuando ha venido a avisarme...- se te acerca besándote en las mejillas tras lo cual toma asiento en un sillón cercano -¿A qué debo el honor?- pregunta mirándote con suspicacia.

Jennah puso la mejor de sus sonrisas cuando vio entrar a Cathen, sus ojos se encontraron con los de él y mantuvo el contacto durante unos tres segundos, antes de dedicarle una dulce caida de pestallas. Cuando el anfitrión se sentó la chica acercó un asiento al de Cathen y se sentó cerca de él.

-Te echaba de menos- le dijo con una sonrisa pícara- si no he venido antes es porque he estado muy... ocupada este tiempo. No se si debería decir algo sobre el proyecto que tengo entre manos...- Jennah se inclinó hacia delante y deslizó su mano por la del chico hasta que finalmente la agarró con dulzura, volviendo tras eso a alzar la vista hacia él mientras se mordía levemente el labio inferior- pero sé que en tí puedo confiar. He estado investigando, trabajando con un grupo de la universidad Londres y están interesados en encontrar unos manuscritos antiguos que implican a la iglesia en cosas demasiado oscuras como para ser nombradas hasta no estar completamente convencida de ello...- Jennah hizo una pausa dramática- El problema, es que necesito conseguir un libro de la exposición en el Museo de Historia, y... necesito tu ayuda. Siento pedirte esto, y se que no debería, pero... ¿me acompañarás?- su mirada se clavó en la del chico inquisitivamente mientras alzaba una ceja.

Llevaba desde que iniciaron el trayecto en coche pensando una excusa medio convincente, pero no estaba segura de que realmente hubiese sonado realista.

Cathen sonrió a Jennah al cogerle la mano, pero su expresión denotaba duda cuando ésta terminó de hablar, sospechando algo turbio de todo aquello...

- ¿Pero y... que quieres que haga? ¿En qué te puedo ayudar? - preguntó para asegurarse, aunque dulce y amablemente.

¿Conoce a alguien del museo que les pueda ayudar?