Partida Rol por web

¡AGH!- grité, pues obviamente me dolió una barbaridad el impacto de aquel enorme vehículo contra mi... ¡joe, debí haberlo visto antes! Y ahora no solo estaba preocupado porque necesitase encontrar algo con lo que recuperarme... ¡sino que había escuchado dos explosiones provenientes de dentro del centro comercial! -¡Roll!- exclamé preocupado obviamente por ella.

¡Ahora si que no debía de perder más tiempo con este robot! -¡MEGA BUSTER!- grité apuntando y disparando el disparo más cargado que pude contra él para volarle en pedazos. ¡Ahora debía encontrar la bomba cuanto antes para volver a entrar en el centro comercial!

Ahora que ya no había ninguna amenaza en el parking, tan solo quedaba buscar concienzudamente dónde estaba la bomba. Revisaste los bajos de cada uno de los coches y no encontrabas nada. Fue entonces cuando un leve pitido te alertó de que tu objetivo estaba cerca. Justo el vehículo que te lanzaron minutos antes era el que albergaba el condenado explosivo, la cuestión era ¿por qué no detonó cuando impactó contra el suelo?¿fue suerte?

 Abriste el capó para ver entre el amasijo de metal como el artefacto gris parpadeaba cada vez más rápido. Esa bomba iba a explotar en cualquier momento. En estos instantes pensabas en cómo le iría al resto de tus hermanos, ¿habrían tenido tantas dificultades como tú? Al menos te consolaba saber que no había más civiles por la zona. Si había destrozos serían materiales.

 La bomba en cuestión

Cada vez me estaba deseperando más en buscar la maldita bomba... Desde luego lo mío era saltar sobre púas, disparar a robots malos y derrotar a Willy... No tenía paciencia para buscar bombas en cientos de vehículos -¡Aghhhh... Que alguien me mande una señal!- exclamé ya con la paciencia agotada.

Pero entonces escuché ese leve pitido... Del primer vehículo que me lanzaron. Al llegar a el, lo abrí... Y lo encontré... ¿Porque no había pensado en examinarlo primero?

Da igual... ¡Aquí está la bomba!... Ehh... ¿Ahora como la desactivo? No es que lo hubiera pensado mucho, lo mío era la acción -​​​​​​A ver... Quizás si hago esto... Y conectó esto con esto... Cojo esto... Y...- iba diciendo mientras que desconectaba la bomba un poco... Mucho por instinto. Espero no explotar, debo comprobar cómo estaba Roll cuanto antes.

Con pericia y paciencia, lograste desactivar la bomba que amenazaba con destruir todo el complejo del parking.

Ahora que habías cumplido tu objetivo tocaba reunirse con Roll ¿estará ella bien? ¡No había tiempo que perder!

Cuando abrí los ojos pensé que me encontraba ante un mal sueño. Las ruinas del restaurante se extendían a mi alrededor. Intenté moverme y noté que mis músculos no reaccionaban de la forma que debían. Tuve que retirar bastantes restos del destrozo causado de encima de mi cuerpo hasta que pude levantarme a duras penas. Fue entonces cuando me di cuenta de lo que había pasado. Mi cuerpo estaba gravemente resentido por la explosión y dudaba que fuera a ser de mucha utilidad en lo que quedara de misión. De hecho las lágrimas comenzaron a correr por mi cara al caer en la cuenta de que no solo había fallado a mis hermanos y al Dr. Light, sino también a ese hombre y que eso le había costado la vida. Aun en estado de shock intenté alejarme de los restos del restaurante buscando cualquier señal de mi hermano Mega Man. Iba a necesitar ayuda para reponerme de este revés.

Me arrastré cojeando hacia la fuente central donde nos habíamos separado y esperé a la llegada de mi hermano. Mi cuerpo estaba bastante dañado por algunas partes así que me costó moverme con naturalidad. A pesar de todo, los mayores daños estaban en mi mente. Me sentía como si hubiera fallado a todo el mundo, como si me diera cuenta de que nunca debía haber salido del laboratorio del Dr. Light, porque si hubiera sido cualquiera de mis hermanos el que hubiera estado en mi lugar la bomba no habría explotado. No fue hasta pasados un par de minutos que me di cuenta que la juguetería también estaba en ruinas. El hecho de no ver restos de una explosión proviniendo del aparcamiento exterior me dio la sospecha de que Mega Man había tenido éxito con su bomba. Noté cómo las lágrimas se volvían a asomar a mis ojos mientras esperaba a mi hermano.

Os reunisteis todos en la fuente donde apareció el holograma del que supuestamente había maquinado todo este plan. En pocos minutos os pusisteis al día de como os había ido a cada uno de vosotros en solitario. Por un lado Roll no pudo desactivar la bomba del restaurante, sin embargo muchos de los rehenes pudieron escapar gracias a su pronta llegada. En el parking en cambio, Mega Man pudo encontrar y desactivar la bomba tras superar una serie de desafíos.

 De repente se escuchó una voz que provenía de debajo de vuestros pies.

 - Ahora es mi turno, mi segunda oportunidad para sacar a la luz todo mi potencial… ¡pienso aprovecharla al máximo! – dicho aquello surgió con gran violencia chill man. Su mirada era diferente a la que estabais acostumbrados en los Robot Master. Éste alzó el dedo y os desafió.

- Os convertiré en chatarra, jamás volverán a infravalorarme, no defraudaré a quienes consideraron que tengo opciones de ganar -  y dicho aquello adoptó su postura de combate. Seguramente sea el último desafío que quede en el centro comercial, aunque os queda la duda sobre cual era realmente su papel allí. ¿Una mera distracción?¿Qué habría en el subsuelo de donde vino?

Dentro de lo que era mi decepción con mi desempeño me alegró ver que mi hermano había conseguido desactivar la bomba del parking sin más daños. En ningún momento había dudado que fuera a ocurrir otra cosa, así que al menos era una victoria para nosotros.

Sin embargo, no tuvimos tiempo de saborearla porque Chill Man se presentó ante nosotros. ¡Estaba escondido debajo del suelo! No sé cuánto tiempo nos habría estado siguiendo pero nos lanzó un desafío. No podíamos permitir que Chill Man amenazara las vidas de más gente. Teníamos que detenerlo.

- Chill Man, ¡tus acciones te han condenado! ¡No esperes que nos retengamos por ti! - dije mientras ignoraba mis anteriores errores y el dolor de mi cuerpo. Ahora tendría una oportunidad para demostrar que aun puedo hacer algo de utilidad.

Desde luego... ninguno de los dos lo habíamos tenido fácil la misión. No dejé que Roll se desanimase... me daba igual que las bombas hubieran explotado, lo que me importaba es que ella había conseguido salvar a las personas que aún quedaban allí, como una buena heroína. Y eso lo debía de tener ella muy presente...

Y entonces, vino el "invitado de honor": Chill Man. Desde el suelo... ¿que habría estado haciendo allí? No lo se, pero habría que detenerlo -Te esperábamos Chill Man... aunque ya esperaba que apareciera Bomb Man después del numerito- dije preparándome para combatir. Ambos estábamos hechos polvos, tanto mi hermana como yo... ¡pero tocaba machacar a este polo helado!

Mi hermana atacó y le hizo daño, y ahora me tocaba a mi intentar herirle.

Tanto mis ataques como los de mi hermano hacían mella en Chill Man. Podía notar como sus movimientos ya no eran igual de ágiles o como ya no se paraba entre ataque y ataque para soltar una perorata absurda. Se estaba cansando. Le estábamos derrotando.

Por desgracia yo también estaba al borde de mi límite. Mi cuerpo cada vez se sentía más pesado y me costaba esquivar los ataques de Chill Man, que comenzaron a impactar en mi ya maltrecho exoesqueleto. Pero no podía dejar que acabara así. A pesar de todos mis fallos todos contaban conmigo. Decidí que sin importar lo que costara, no decepcionaría de nuevo a todos. Logré levantarme a pesar de todos los daños recibidos y apuntar mi arma hacia Chill Man.

- ¡No vas a poder hacer daño a nadie más, Chill Man! ¡Este es tu fin!

Miré con rabia como Roll caía inconsciente después del ataque de Chill Man -¡Hermana no!- me quejé asustado y enfadado mirando al Robot Master -¡Me las vas a pagar Chill Man!- dije, lanzando un montón de disparos contra el enemigo intentando destruirle en venganza de mi hermana de forma muy temeraria, pues ahora estaba muy enfadado.

Por desgracia, Chill Man supo aprovecharse de las heridas que ya teníais en vuestra estructura debido a vuestro paso tanto por la zona de restauración como del parking.

Mega Man no desistió en seguir luchando y más tras ver a su hermana Roll tendida en el suelo desactivada. Tan solo un milagro podría salvar una situación así... sobre todo cuando el último ataque del Robot Master provocó que el héroe azul también acabase en el suelo con un cortocircuito.

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Nada más acabar tu misión en el Mega Zoo, te teletransportaste tan rápido como pudiste a la Super Centro Comercial, allí pudiste comprobar que había bastantes zonas destruidas, como si varias bombas hubiesen detonado por los alrededores.

Justo en el interior, en mitad de todos aquellos locales encontraste un panorama desolador. Roll y Mega Man estaban en el suelo, gravemente dañados, mientras que Chill Man se reía ante su precipitada victoria.

 - ¡Como os dije iba a sacar a la luz todo mi potencial!… ¡ahora os convertiré en chatarra para siempre! – dicho aquello se preparó para realizar un último ataque que destruyese por completo a sus rivales.

Por fortuna llegaste a tiempo. Lo último que esperaría Chill Man es que Proto Man acudiese justo en el mejor momento para equilibrar la balanza. ¿Lo conseguirá?