Tras una noche de descanso, habéis sido convocados para recibir información y una nueva misión en las cercanías del puerto, lejos de la logia de Almas y de los sitios de reunión más habituales.
La brisa marina fresca de Almas, es menos amable esta mañana de lo que suele ser, dejando las calles vacías hasta de maleantes. A medida que los últimos rayos de luna bañan de plata la calle de adoquines y que los primeros rayos de sol comienzan a ascender desde el horizonte acuoso, una figura solitaria surge de un callejón cercano.
Retirándose la capucha se revela como la Capitana de Misiones Alissa Moldreserva. La mujer os saluda ligermente antes de hablar, aunque todos notáis la expresión adusta de sus facciones:
Es una pena que no pudiéramos reunirnos en la logia, pero debido a todas las desapariciones, la marejada política y a lo que vosotros sabéis, diría que es mejor mantener un perfil bajo por el momento, al menos hasta que se solucione todo. Ya es suficientemente malo que el buen nombre de la Sociedad esté poniéndose en entre dicho por todo el continente, gracias a ese traicionero grupo de villanos, los que se hacen llamar la Logia de las Sombras. Ahora los políticos quieren nuestra cabeza gracias a la maldita Ouidda.
Sé que Brackett os ha hablado de ella, Dorianna Ouidda, una de las representantes electas del Consejo del Pueblo de aquí, de Almas. Apareció en Almas hace unos años y desde entonces está detrás de la Sociedad.
El relato no hace sino acentuar la expresión de fastidio de la capitana.
Sus orígenes parecen casi imposibles de trazar por medios ordinarios; nos ha llevado todo este tiempo llegar al fondo del asunto, y aunque no es ningún secreto que nos tiene ojeriza, pocos saben la verdad que hay detrás de eso, que es lo que voy a contaros.
Sabemos de buena tinta que Ouidda no es otra que la Araña - la jefa de la célula de la Logia de las Sombras de Almas- y que ha estado usando a sus colegas de la cábala para manchar nuestro nombre por toda la capital. Está intentando que los miembros legítimos de la Sociedad sean expulsados completamente de Almas o que estén completamente bajo su control. ¿Sus razones? Las desconocemos.
Sabemos que en el pasado tuvo algún devaneo con el comercio de esclavos, y pensamos que todavía está detrás de ese asunto aquí en Almas.
La capitana se pone algo más seria.
En unos días Ouidda va a pronunciar un discurso delante del Consejo que pondrá a toda la administración de la ciudad en nuestra contra. Desgraciadamente no tenemos pruebas suficientes para desacreditarla y mostrar ante todos la maldad de la mujer...
Es imperativo que encontréis pruebas de su doblez para que podáis desacreditarla antes de que dé el discurso...
Os dejo por si queréis hacerle alguna pregunta.
Así que la araña... - dice Harold, inclinándose ligeramente hacia Clarissa y susurrándole - Y no de las que tienen ocho patas...
Mira entonces a la Capitana y le pregunta. ¿Tenemos algún punto donde empezar, un hilo del que empezar a desentrañar su madeja de secretos? Supongo que habrá que investigar los mercaderes locales de esclavos si es que está involucrados en ese asqueroso negocio...
- Y, si sabemos la localización de todos los Trasgoides que quieren atacar la ciudad, ¿no sería otro punto interesante a tratar? - dijo Lorik con la miel del combate en los labios.
De los trasgoides ya se ha encargado la guardia de la ciudad, no os preocupéis. En cuanto al comercio de esclavos, es algo totalmente prohibido en Andoran, con lo que no hay mercaderes de esclavos. Supongo que la mejor manera de que llevéis esto es con discreción. ¿Alguno sois de Almas o de Andoran? Quizá vuestro conocimiento de la ciudad os podría venir bien.
A mi no me mireis, yo soy Numerio. Y no tengo Saber Local.
Clarissa escuchó atentamente las palabras de la nueva Capitana. Era obvio que al incompetente de Brackett le habrían degradado por su estulticia, idiocia e incompetencia, un amigo de las fiestas y del jolgorio más que del trabajo honrado y de los planes serios. Claro que no lo harían público, porque si no la verguenza alcanzaría a los que lo nombraron, pero lo máximo que Brackett comandaría en el futuro sería una expedición al retrete.
Y por eso tenía nueva líder. Aunque no era buena idea reunirse en callejones sombríos... ¡Ellos no eran la logia de las sombras!, pero ya habría tiempo de judgar a la nueva Capitana. Su cara mantuvo ausencia total de emociones.
-Pero ojalá su veneno se pudiera tratar como esas alimañas, sí...-respondió murmurando y asintiendo a Harold.
-Capitana, yo no he estado en ésta ciudad hasta que llegamos en barco antesde ayer... pero no soy una bárbara de los desiertos de las tierras centrales; podría conseguir una audiencia con el Archibanquero Silvershoe*, el clérigo de mayor rango de la Catedral de las Formas Perfectas, para pedir ayuda y consejo. El Archibanquero es uno de los clérigos más respetados...
aunque algunas de sus doctrinas representan nuevos caminos "buenos" en la adoración de Abadar... los resultados de su política de "bondad hacia los vecinos" son sobradamente conocidos.
... y es posible que supiera algo de lo que está pasando.
*Vease "Andoran Spiri of liberty". Apartado de Fe.
Cualquier fuente de información es buena. Preguntad en la calle, en la iglesia o donde convengáis. Confío en vuestra capacidad para encontrar esa información lo antes posible.
- Los esclavistas y la Logia de las sombras no saldran impunes capitana.
¿Ninguna pregunta para la capitana? Porque si no hay preguntas procedo al primer acto previa entrega de misiones de facción ;-)
Miro a todos, y por último a la capitana. Frunzo el ceño y suelto un bufido.
¿Y porqué ir contra unos esclavistas que serán dificiles de encontrar, cuanto menos, si se supone que no existen en Almas? Yo iría contra esos abortos de orcos de la logia de las sombras. Si esa perra está usando a eso malnacidos para poner en entredicho a la Sociedad Pathfinder, creo que sería por ahi por donde deberíamos ir. Nadie mejor que ellos para saber cuales son sus planes y por tanto encontrariamos las pruebas que necesitasemos.
¿No tienes nada más de información que podamos usar?
Al ver que les encargan una misión de exploración, Clarissa casi se echa a llorar. Recordando aquellos días por las calles de Trollheim, preguntando en mercados y puestos y tabernas. Las largas horas sin conseguir ningún dato.
Abadar, dios mío. Espero que mis compañeros sepan hacer algo más que mover afilados trozos de metal de un lugar para otro.
Su suspiro es largo y su voz triste.-Capitana, nos pedís investigar y encontrar pruebas contra una espía de gran habilidad, a nosotros, unos recién llegados a Almas que no conocemos prácticamente nada de la ciudad. Pero entiendo que al menos nosotros somos de fiar y cualquier otro no. Es trágico. Os prometo que haremos todo lo que podamos, todo lo que sea humanamente posible por atrapar a esa traidora.
El elfo mira turbado a Hothar, viendo con cierto temor como sus maneras eran similares a Grachius.
Sus pensamientos casi fueron verbalizados No, otro guerrero sanguinario no por favor.
Tranquila Clarisa, que he subido Diplomacia y averiguar intenciones XDDDDDDD
Lorik asintió con la cabeza. Ordenes estúpidas pedirle a dos guerreros... tres si contabamos a aquel enano que olía tan mal, que buscaran informacion. ¿Intuía acaso que aquello significaría problemas?
Su cabeza rondaba estos pensamientos pero, al fin y al cabo, si quería conseguir misiones más complicadas, debería de pasar por el aro de vez en cuando.
- Si, señora - añadió.
Esta Araña lleva tiempo en el submundo de Almas y si la Sociedad es capaz de demostrar que Ouidda y la Araña son la misma nos habremos marcado un punto muy importante. Como os he dicho, ya hay gente ocupándose de los hobgoblin.
En cualquier caso, es bueno que sepáis que Ouidda tiene previsto hacer su intervención dentro de dos días y que deberíais tener vuestras pruebas para entonces si queremos tener alguna posibilidad de detenerla...
Os deseo la mayor de las suertes.
Dadme un tiempo a que os ponga la cosa faccional y luego empezamos el primer acto.
Dos días, bien. - el tono pesimista de Harold hacía juego con la mirada que había echado al nuevo componente de su expedición y que casi se asemejaba a la de Clarissa.
Bueno, entonces no tenemos tiempo que perder... - añadió-