Vigfus escuchó atentamente la interesante conversación que mantuvieron el hijo del jarl y Otrygg a propósito de la lanza, no considerando oportuno intervenir en ella excepto en el momento en que Vlödi preguntó por su maña utilizando armas de asta, lamentablemente para decirle que no.
Después de ello, cuando Vlödi les pidió que se contuvieran en los festejos, mal que a gusto habría degustado el viejo consejero hidromiel hasta caer redondo al suelo, supo que estaba en lo correcto y, sin rechistar, dedicó una sonrisa de complicidad al hijo de su jarl y cuando éste se dispuso a hablar con Guerd, caminó en dirección a un grupo de jutos que estaban montando mesas en una posición cercana y les dijo, con la mano levantada:
-¡Salud, compañeros! ¡Que los dioses nos acompañen en estos festejos y beban con nosotros! Soy Vigfus, hijo de Storn, consejero de Rohald. ¿Me permitís echaros una mano?
Y se dispuso a ayudar con el montaje.
El hombretón Juto mira a Vlödi y le devuelve la cortesía del saludo mientras sus hombres se unen en el trabajo a los jutos, lo cual es celebrado abiertamente por Ösvif y el resto de daneses
-Pues si os soy sincero no, no conozco vuestras tierras. La verdad es que hasta hace poco nos hemos centrado más en tener trato...- hace una ligera pausa como si buscara las palabras adecuadas- trato más o menos afable con los Finnr, y salvo algunos contactos comerciales esporádicos no nos hemos mezclado mucho con vosotros los daneses... Bueno, hasta que nuestro jefe decidió cambiar la política... Claro.- Antes de seguir hablando uno de sus hombres le reclama para supervisar una de las tareas dentro del barco- Ahora estoy con vosotros, esperemos a estar sentados en la mesa y podremos conversar amigablemente.- el juto se da la vuelta y camina apresuradamente hacia el barco para supervisar la descarga de varios toneles de los que los de Rohald suponen que es hidromiel.
Cuando la luna asoma ya regresaron los cazadores con un buen venado en sus manos, el cual es destazado y asado en una gran hoguera que se ha preparado al efecto, se han desplegado mesas improvisadas con troncos, y se han dispuesto los bancos de los barcos para que los comensales tomen asiento. Los cadáveres han sido enterrados en una fosa común a lo lejos para evitar que amarguen con su olor la celebración. Jutos y daneses se mezclan en la noche iluminados por el resplandor del fuego, coreando canciones juntos, bebiendo, comiendo, compartiendo anécdotas y, en definitiva, pasándolo en grande antes de tener que volver a sus obligaciones. Guerd Latik comparte asiento flanqueado por Vlödy y por uno de sus hombres. Un hombre de estatura media y pelo grasiento con cara de preocupado. Vigfus está al lado de este personaje y le acompaña Ösvif en el otro lado. Otrygg comparte espacio con los marineros de ambos lados, algunos de los cuales le están importunando para que haga uso de sus habilidades adivinatorias sobre preguntas tan futiles como el amor, o sobre si sus ganados crecerán.
Si queréis sacar información sobre algo debéis hacer una tirada de Carisma+elocuencia.
Vlödy y Otrygg tenéis un +4 por haber ayudado en los combates y haberles salvado de los piratas.
Vigfus tiene un +6 por haber ayudado, además, a montar el tinglado de las mesas y haber ayudado a los Jutos.
Rolead málditos, rolead.
Otrygg estaba exasperado. La hidromiel merecía la pena, pero la compañía comenzaba a ser irritante - marineros pesados, soy tan capaz de adivinar el futuro como de expulsar fuego. - - Al próximo que me pregunte por su futuro amoroso le auguro un matrimonio con una troll. - respondió a la desesperada tras la decimotercera pregunta.
Por lo demás, la celebración era tan buena como cabía esperar, y aunque no sabía grandes historias Otrygg de vez en cuando participaba añadiendo información sobre barcos y armas, desde sus humildes conocimientos como constructor y artesano. - Por cierto Guerd, este hidromiel es fantástico ¿adonde lo llevabais? Tal vez nos planteemos comprarte algún barril para nuestra vuelta a casa. -
Tirada oculta
Motivo: Carisma + Elocuencia (pobre de mi)
Tirada: 2d10
Resultado: 1, 9 (Suma: 10)
Espero pacientemente a estar sentados en el banquete para intentar sacarle información útil al líder juto. -Me hablabas de vuestro trato con los Finnr. ¿Qué tal son? ¿Cómo os ha ido con ellos? -escucho atento su respuesta, y luego pregunto también: -...y entonces vuestro jefe decidió cambiar de política, no? ¿En qué sentido? Que dicho sea de paso, no sé quién es vuestro jefe... -la intriga me corroe. ¿Será cierto que debemos estar esta noche con este hombre, siguiendo las palabras de la Dama de Escarcha? ¿Habrá sido un error tardar más en volver? Y en caso de que sí debamos compartir tiempo con este juto, ¿en qué sentido? ¿Hay algo que debamos averiguar? Maldita sea... demasiadas preguntas y demasiadas pocas respuestas. Espero sacarle provecho a este banquete.
Motivo: Car+Elo
Tirada: 2d10
Resultado: 5, 8 (Suma: 13)
Otrygg: ni has respondido a mi pregunta de si te manejas bien con armas de asta, ni has dicho nada sobre mi petición de no beber demasiado y estar atentos.
Gasto un punto de furor. Mierda de Carisma xD Total: 24.
También quiero indagar sobre por qué el hombre de al lado de Guerd Latik está preocupado, pero no lo he sumado a este post para poder ir interpretando y no amontonarlo todo en un solo turno. De todos modos si consideras que no va a cambiar nada por preguntar eso en el próximo post, puedes tomártelo como que se lo pregunto también acto seguido :)
El Juto deja de beber de su cuerno cuando Vlödi empieza a hablarle y le escucha con atención.
-EEEEEH, Bueno, los Finner son... Finnr.- dice rascándose la cabeza- Vuestros paisanos los consideran salvajes... Tal vez lo sean. Viven en cabañas de palos... están muy sometidos a sus brujas... Aunque nosotros también hacemos lo que dicen nuestra mujeres, ¿eh?.- suelta una gran carcajada a la vez que da una palmada en la espalda al hijo del jarl que casi le hace tirar su cuerno y varios de los que están alrededor le siguen ante el chiste- En realidad son gente pacífica que pastorea renos y comercia con los bienes que estos dan.-
Cuando oye hablar de su jefe la alegría momentanea se desvanece y vuelve a ensombrecerse su rostro...
-Nuestro jefe- piensa de repente profundamente como si se le olvidara algo- Nuestro rey, el gran Olaf Gunderssen, recibió el gran honor de que su hija, la preciosa Hedriss, se case con el Jarl de Odense, en la isla de Fynn, Hord Beinirsson- las palabras se le atragantan como si le costase continuar. Bebe un largo trago de su cuerno y sigue.- Partimos de Ribe para escoltar el barco donde la princesa iba, junto con el hijo de Olaf, Vagn Hordsson y sus hombres daneses.- traga saliva antes de seguir- Hace dos días, cuando entrabamos en el Skarregak, aparecieron cuatro velas desconocidas, como esas que hay en la playa ahora mismo. Les sacábamos mucha ventaja, pero de pronto una tormenta nos hizo perder velocidad y esos locos nos asaltaron.- se pone de pie y empieza a gesticular muy fuerte para dar mayor énfasis a sus palabras- Luchamos como valientes, pero nos dividieron en dos y nosotros nos vimos arrinconados y tuvimos que escapar de esos bastardos, y hasta aquí que hoy nos habéis salvado.- vuelve a sentarse y mira fijamente a Vlödy con su único ojo sano- Ya fue suerte que justo vinieseis en nuestra ayuda. Pero que además seáis daneses es una señal de los dioses, sin duda...No he podido evitar ver que a vuestro hombre- dice señalando a Otrygg- Le piden lanzar las runas, si tiene dicha habilidad quizá pueda saber de donde vienen estos piratas. Y si puede averiguarlo... no quisiera abusar de vosotros, pero la situación lo exige. Yo y mis hombres debemos ir a la Isla de Fyn como estaba planeado, para ver si han llegado sanos o si por contra... Prefiero no pensarlo. Además, nuestro barco está fatal como para ir a ninguna aventura. Me gustaría pediros, que si averiguamos de donde son esos barcos, vayáis a ver si allí han llevado a la princesa...
Guerd Latik se queda callado esperando a que le respondan ante su petición...
Para saber algo sobre el barco o los piratas es necesario una tirada de Instinto+Runas
ambién quiero indagar sobre por qué el hombre de al lado de Guerd Latik está preocupado, pero no lo he sumado a este post para poder ir interpretando y no amontonarlo todo en un solo turno. De todos modos si consideras que no va a cambiar nada por preguntar eso en el próximo post, puedes tomártelo como que se lo pregunto también acto seguido :)
Si se lo preguntas, Guerd te dirá y el lo confirmará presentándose como Ligurd, que es por lo que te cuenta Guerd.
Guerd mira a Otrygg cuando le oye hablar sobre lo excelente de su hidromiel desde el otro lado de la mesa
-Si nos ayudáis, os daremos todos los barriles que nos quedan... unos 20.
Vigfus disfrutaba del excelente venado regado con una jarra de hidromiel, sin dejar que las viandas le nublaran el juicio ni la atención, pues debía seguir al dedillo las instrucciones del hijo de su jarl para esta noche. Mientras tragaba, conversaba con sus vecinos de mesa. Hasta que Guerd Latik, situado cerca de él, comenzó a relatar cómo habían acabado perseguidos por los piratas. Era un gran esfuerzo lo que los jutos les pedían, así que mientras se decidía si Otrygg iba a tirar de nuevo las runas, Vigfus intentó sacar de su memoria sus conocimientos sobre Jutlandia, la isla de Fynn, sus gobernantes, y el resto de datos que Guerd les había proporcionado, por si hubiese algo que no cuadrase en la historia.
Motivo: Intelecto + Saber
Tirada: 3d10
Resultado: 4, 5, 4 (Suma: 13)
Hago una tirada de Intelecto + Saber por si fuera necesaria para tener los conocimientos que busco.
Resultado: 9 + 5 = 14
Escucho atentamente el relato de Guerd Latik, gracias entre otras cosas a haber decidido no beber demasiado. El relato me sorprende, y me quedo absorto escuchándolo con detalle. Mi rostro muestra mi preocupación por el tema, mostrándome a juego con la preocupación de estos jutos. Suspiro reflexivamente, noto cómo la mayoría de los hombres, por lo menos los más cercanos, se han sumido en nuestro mismo silencio expectante. Entonces me levanto, aún con el cuerno en la mano, y digo mirando a unos y a otros:
-Nosotros también tenemos una historia que contar. Mi padre, nuestro jarl, tuvo un fatídico sueño premonitorio sobre un peligro que nos acecha. Nuestra völva habló, y nos dijo que encontraríamos las respuestas que necesitamos de boca de la Dama de Escarcha. Y así fue que partimos, gracias al bueno de Ösvif, hacia las heladas tierras de la bruja. Una vez en su costa, fuimos emboscados por furiosos nativos que se avalanzaron sobre nosotros ondeando sus hachas y lanzas, buscando nuestras cabezas. -gesticulo y modulo mi voz para hacer la narración más interesante aún, hablando hacia todos, en pie. -Gracias a mi previsión e instinto me adelanté, a lomos de mi fiel corcel, y pude descubrir la emboscada poco antes del enfrentamiento. Vencimos raudos al enemigo, como cabe de esperar de los lobos de Rohald. Pero aún deberíamos enfrentar otros desafíos, antes de obtener nuestra recompensa. Un lobo espectral, extrañas alucinaciones mágicas y difíciles acertijos en una oscura cueva... al final de la cual, sabios y vencedores, encontramos a la Dama de Escarcha. Lanzó las runas para nosotros, y nos dijo que estamos destinados a combatir épicas batallas; que somos enviados de los dioses y que éstos nos juzgan... y que debemos seguir el rostro de Odhinn. -entonces me giro hacia Guerd Latik, ante todos los hombres que nos rodean. -Tú, Guerd Latik, líder de estos valerosos jutos... tú, que perdiste tu ojo como otrora perdiera el Padre de Todos... no debes albergar duda alguna. Nosotros, los Lobos de Rohald, haremos cuanto esté en nuestra mano para rescatar a la princesa. ¡Sköl! -grito pidiendo un brindis, alzando mi cuerno, y acabo su contenido de un solo trago. Entonces miro a Otrygg y digo: -Ahora todo está en tu mano, camarada. -y me siento, expectante como todos los demás.
Por un lado, nos he bautizado frente a estos jutos como "los Lobos de Rohald". Por otro, he puesto a Otrygg en un grave compromiso. Soy consciente, y si bien por fuera mantengo la seriedad, la compostura y la expectativa, por dentro me estoy riendo a carcajadas pensando en la incomodidad que el pobre artesano estará sintiendo ahora mismo.
La historia de Guerd Latik resultó ser bastante interesalte, al menos lo suficiente para que Otrygg la escuchase con atención y curiosidad. La idea de perseguir o enfrentarse a más piratas no le hacía especialmente feliz, pero era decisión de Vlödi, no suya; además, no había esperado que Guerd realmente les ofreciera su hidromiel como recompensa, tan solo había balbuceado lo primero que se le ocurrió en un intento de soltarle la lengua a ese juto, aunque al parecer no hacía falta. Su oferta le había pillado por sorpresa y parecía muy generosa.
- Supongo que puedo haceros ese favor. Al menos no me están pidiendo que les adivine ningún capricho. - Sin darse demasiada prisa, sacó una pequeña bolsa de cuero llena de lo que parecían diminutas piedras de río, pulidas y talladas en el centro. Vació un cuenco de madera, lo puso frente a si e hizo girar un par de vueltas la bolsa en sus manos antes de sacar con su manaza un puñado de las runas y dejarlas caer sobre el cuenco como quien arroja un leño al fuego. Muchas cayeron fuera, que fueron apartadas y devueltas a la bolsa con indiferencia. Solo después de eso el enano se concentró en las que quedaban. Cuales eran, en qué parte del cuenco habían caído, y en qué dirección apuntaban.
Tirada oculta
Motivo: Instinto + Runas (2d10 +6) +2d6 furor
Tirada: 4d10
Resultado: 1, 10, 8, 10 (Suma: 29)
Creía que Otrygg no tenía la capacidad de lanzar las runas, al final va a resultar un personaje muy multiusos.
Vigfus, que por su propia labor para la aldea estaba más enterado en las intrigas palaciegas que en sus compañeros conocía esa historia. Es más, podría añadir algo de información que Guerd o a omitido o no conoce, no por malicia, quizá por no saber como reaccionarían los héroes. Este casamiento se lleva a cabo por la voluntad del Frodi, el nuevo rey fraticida de Dinamara. Frodi no lleva mucho en el trono y solo ha accedido a él tras matar a su hermano; Halfda. La noticia no sentó bien a muchos Jarls de Dinamarca, y vuestro propio señor o está contento con ello, pero no quiere involucrarse en una guerra civil. Con este casamiento Frodi consigue dos cosas, mantener calmado a un señor levantisco, y atraerse a los Jutos como posibles aliados...
Tras el discurso de Vlödy, Guerd no pudo más que levantarse y emocionado abrazar al joven
-Muchas gracias, sois buenos con nosotros, los dioses os lo pagaran y aún más nuestro rey y el vuestro...
Todos se lanzaron vitores, y jutos y daneses intercambian abrazos y palabras de amistad, un poco enforverecidos por el alcohol...
Todos se reúnen alrededor de Otrygg y embobados ven el ritual...
La tirada es inconfundible, Otrygg mira al barco capturado, y luego las runas... Habla con voz clara y potente
-Una gran cadena forjada por gigantes que guarda un cisne... Lobos, muchos lobos que rodean a uno más grande... ¿QUÉ?... Un gallo negro... y otro lobo, pero este es diferente...
Se queda pensando un segundo dando vueltas a lo dicho...
-Una cadena forjada por gigantes... Hirsk...
Todos sienten un escalofrío al escuchar ese nombre. No hace falta decir que Hirsk es una infecta roca en mitad del mar infestada de piratas, sanguinarios, sucios, y sin honor. Parece que los dioses vuelven a mostrar el camino y este lleva hacia uno de los pozos de miseria más grande de Scandia...
-Pues a Hirsk debéis ir- dice Guerd- Que los dioses os guarden...
Esta escena está chapando, el siguiente es vuestro último post. La siguiente actualización la haré en una nueva escena.
Vigfus escuchó atentamente el discurso de Vlödi mientras se mentalizaba de la misión que les iba a tocar llevar a cabo. En otra situación, habría reído gustosamente por la papeleta que su joven e impulsivo señor le había dejado al pobre artesano; pero en esta ocasión había algo que le inquietaba y su rostro no mutó lo más mínimo mientras daba pequeños sorbos de su ración de hidromiel. Tenía que hablar con el hijo del jarl, pues había cierta información que le incumbía y debía conocer.
Finalmente, después de la actuación de Otrygg, la fiesta terminó, y mientras jutos y daneses comenzaban a recoger el consejero pudo por fin apartar un momento a Vlödi:
-Mi señor Vlödi, antes de embarcarnos hacia ese infierno, debo aportar algo más de información a la que ya nos ha proporcionado nuestro amigo el tuerto. Esa boda la ha ordenado nuestro rey Frodi. Como bien sabes, tu padre quiere evitar un baño de sangre a toda costa, y por ello se mantiene leal; pero detesta al rey Frodi desde que mató a su hermano. Con un jarl Hord apaciguado y los jutos de su lado, el poder del rey no deja de crecer. Nunca es directo el lenguaje de Odhinn y debemos ser lo suficientemente inteligentes como para interpretarlo correctamente. Debemos seguir los designios de Odhinn, lo que implica ir a Hirsk, pero nuestro cometido puede no ser tan simple como rescatar a una princesita juta de unos vulgares noruegos.- Y, mientras una incomodidad extrema se adueñaba de su cuerpo por la perspectiva de pisar ese maldito lugar, Vigfus añadió: -Extremaremos las precauciones.
Me coge por sorpresa el abrazo de Guerd, pero entiendo la situación y el efecto del alcohol. Correspondo como es debido y favorezco los vítores con el deseo siempre de mantener lo más alta posible la moral de mis tropas. Entonces todos escuchamos atentamente al sabio Otrygg, y ante su adivinación digo, reflexivo: -El cisne... la princesa. Los lobos... los piratas, que rodean a su líder, un rival formidable al que probablemente debamos enfrentarnos; deberemos estar preparados ante todo. Pero ah! El gallo negro y el otro lobo, nuestros camaradas sin duda. -una amplia sonrisa se dibuja en mi rostro. -Nos reuniremos con nuestros camaradas, y los Lobos de Rohald volverán a estar unidos.
Entonces, más tarde, escucho con suma atención lo que mi consejero tiene a bien decirme. Suspiro profundamente y con aire de resignación le contesto: -Con razón eres tú el consejero y yo el aconsejado. Ojalá no hablara tan pronto... Bueno, mi palabra está dada y sabes que no puedo romperla. Rescataremos a la princesa dije, pero nunca dije qué haríamos con ella una vez rescatada. La llevaremos ante mi padre, y que él haga lo que crea conveniente. Éstas son las órdenes, trasmíteselas a Otrygg y a Ösvif en confianza, y recomienda la misma cautela a todos nuestros hombres. Deberemos mantenernos listos para la prueba que se nos presenta.
A medida que hablaba Otrygg no se había dado cuenta de a lo que les estaba condenando, pero cuando Guerd mismo les dijo que tenían que ir a Hirsk, Otrygg palideció un poco. ¿Entrar en una guarida de piratas? Seguramente serían muchos más que los del barco que los hombres de Vlödi habían eliminado. El enano se guardó las quejas a la fuerza, no podía criticar la decisión de Vlödi delante de los jutos a quienes había prometido rescatar a la princesa, pero no podía permanecer totalmente en silencio.
- Me haría ilusión volver a encontrarme con nuestros compañeros, pero espero que no estéis pensando en irrumpir en esa isla infecta de piratas sin más, por la puerta principal; nos atacarían de inmediato todos a la vez tan pronto como alguno divisase nuestro barco. Los únicos que llegan a desembarcar ahí son los propios piratas y sus prisioneros. -