Águila se apresura a coger su arco, coloca una flecha y dispara. No obstante, parece que la distancia y sus heridas le impiden atinar.
Tirada: 1d100
Motivo: Disparo
Dificultad: 60-
Resultado: 90 (Fracaso)
Si no es por la dificultad hubiera sido una buena tirada...
Mala suerte.
Espero que tengáis mejor fortuna compañeros.
Zorro mira al que fuera su maestro, ya no reconoce en él nada más que los ropajes que lleva.
Ataca, el Lobo gris qque te enseñó hace años ha muerto, ésto no es ni la sombra de lo que aquella persona era...
Debes... Pagar... Por tus crímenes... ¡Abandona éste mundo para siempre!
La estocada mortal se dirige con efectividad contra el cuerpo del maestro del magnakai. Zorro Plateado no puede detenerla y sabe que Lobo gris está por encima suyo con lo que tiene la oportunidad de tratar de esquivar la estocada.
Tirada: 1d100
Motivo: Último ataque
Dificultad: 100-
Resultado: 30 (Exito)
El ataque ha dado su fruto, espero ahora que saque menos que yo en la tirada.
Los dos señores del Kai se precipitan desde el cielo. Lobo Gris está tan ciego de furia, tan enzarzado en el combate, que Buho duda de que siquiera se percate de una flecha acercándose a él. Parece qué Águila también ha tenido la misma idea.
Saca una flecha de su carcaj y eleva una pequeña oración a Kai, apunta, y espera el momento oportuno.
¡Ahora!
Tirada: 1d100
Motivo: Flechazo
Dificultad: 40-
Resultado: 16 (Exito)
¡Exito!
A ver si Buho sabio tiene razón ;-)
Con el flechazo de Buho, Lobo Gris no podrá esquivar ya, por lo que de hecho el ataque de Zorro también tiene éxito.
Además, a Lobo le quedaba ya sólo un punto de resistencia, por lo que no tiene salvación posible.
Debes... Pagar... Por tus crímenes... ¡Abandona éste mundo para siempre!
Situado por encima de Zorro Plateado, el viejo Maestro trata de desviar la estocada de su antiguo alumno, pero es imposible detener la furia del Señor del Kai. Silbaestrellas se hunde dos palmos en el costado de Lobo Gris, que vomita un chorro de sangre.
Con satisfacción, Zorro sigue moviendo la espada dentro de la herida, pero de pronto Lobo Gris sujeta el filo de su oponente con la mano, trabándola a pesar del dolor que esto le debe producir.
Y, mientras caen a una velocidad increíble hacia el Abismo que cada vez se hace más y más grande, Zorro es incapaz de evitar que Lobo Gris le trabe la otra mano, sujetándole en una presa que lo mantiene inmovilizado, apretado junto a él, en un claro intento de llevárselo consigo a las profundidades de la garganta de Maaken.
Los ojos de ambos Señores del Kai quedan a centímetros de distancia, mirándose con odio, hasta que una expresión de desconcierto surca el rostro de Lobo Gris.
Es una flecha que de pronto le atraviesa el hombro.
Lobo Gris grita. Un grito que se oye a pesar del aire huracanado que os rodea en vuestra caida.
El viejo Maestro se debilita. Zorro se da cuenta de ello. Sacude un puñetazo en la cara de su oponente y se suelta de la presa. Después apoya ambos pies sobre el torso de Lobo Gris y patea su estómago, liberando en el proceso el filo de Silbaestrellas.
Y entonces, con otro poderoso movimiento, Zorro Plateado gira sobre sí mismo en el aire, en un ataque giratorio que termina con el filo de su espada cercenando de cuajo la cabeza de Lobo Gris, que se pierde en la oscuridad del Abismo.
Es el fin del viejo Maestro...
Zorro cae, siendo engullido por el Abismo Maldito...
Cuando sucede algo totalmente imposible. La velocidad a la que cae empieza a ser cada vez menor, hasta que literalmente el Señor del Kai levanta el vuelo, llegando hasta el borde del precipicio.
Zorro llega hasta el suelo flotando como si fuera una pluma de ave. El Señor del Kai se tira en la tierra, exhausto por el esfuerzo de utilizar su disciplina de Poder Mental para detener su caída, pero contento de seguir vivo.
¿Todo ha terminado? Le pregunta a nadie en concreto.
Como respuesta, le llegan los gritos de Águila Certera y Buho Sabio, que llegan hasta él riendo, sin acabar de creerse el haber sobrevivido a esta aventura. Buho y Elessa se ayudan mutuamente para caminar y Águila lleva en brazos a la princesa Diana que, dormida, respira con tranquilidad.
En ese momento, el dolor de sus heridas desaparece y Zorro se levanta fundiéndose en un abrazo con todos. Es un reencuentro feliz, lleno de carcajadas y alegría.
La ciudad de Maaken vuelve a la calma en este nuevo día que nace, en el que los rayos de sol llenan de luz todo, calentando las viejas piedras de la ciudad de Maaken.
Incluso el sobrenatural aullido del viento del Abismo Maldito se apaga.
La brisa de la mañana sólo arrastra las risas de los cuatro amigos...
Parece increible que diga esto, pero sí: HEMOS LLEGADO AL FINAL.
Y como hay que darle un digno final, me gustaría que postearais algo sobre vuestro personaje, para poder incluirlo en el cierre de la historia. Unas pocas palabras que cuenten un poco por encima cual será el destino o la vida de vuestro personaje. A qué os gustaría que se dedicase o algo así.
Ejemplo: Uno de los personajes podría permanecer en Ruanon como Señor del Kai designado como consejero y educador de Dan Vanalund para formarle hasta que sea mayor de edad y sea investido como nuevo Barón.
En cuanto cada uno lo hayáis hecho, postearé el final de Sombras del Pasado.
Águila deja caer su brazo tras ver como Zorro cae a salvo. Mira a su alrededor a sus compañeros y sonríe. Las posibilidades estaban en su contra pero consiguieron salvar a la princesa y vencer al maestro.
Sólo una sombra se cirnió sobre este momento de gozo, las vidas de todos los que habían perecido por la acción de Lobo Gris y sus compañeros de complot. En especial su compañero y amigo, Serpiente Silenciosa.
Tras un suspiro, el joven Señor del Kai, vuelve a su tarea, coge a la princesa en brazos y continúa aplicando la disciplina curativa que otrora también practicara el maestro Lobo Gris. La joven había pasado mucho en estos días y pese a que las heridas del cuerpo sanarían, el recuerdo de todo esto se cerniría sobre su vida...
Pero eso será preocupación de otro momento, es hora de reunirse con los compañeros y regresar a casa. Juntos habían conseguido algo digno de toda alabanza, mucho más de lo que cabría esperar de unos Señores del Kai tan jóvenes.
Las capacidades de Águila lo sitúan más agusto en la naturaleza que entre gente, pero cuando le ofrezcan seguir haciéndose cargo de la salud y seguridad de la princesa no podrá rechazar el honor. Sus días en la corte no lo harán feliz, pero servir a Magnamund (y a la joven princesa) sí colmarán su vida.
Como recompensa le darán un señorío agreste y forestal donde no se tenga que hacer más cargo que de sus bosques, animales y de los pocos leñadores que hacen de esas tierras su hogar. Allí se retirará cuando sus ocupaciones al lado de la princesa se lo permitan y adquirirá un gran conocimiento de la vida en la naturaleza. Seguirá desarrollando su puntería y su arco terminaría en manos de uno de los hijos de la princesa...
Por fin todo había terminado y el nuevo día amanecía en el horizonte. Una fina lluvia comenzó a caer un poco después, refrescando el ambiente y lavándolo de toda la maldad que habían traido los ejércitos espectrales.
La ciudad en ruinas de Maaken volvía a descansar en paz.
Uno de los barcos alados de los magos de Torán fue el que los descubrió a las afueras de Maaken y los llevó de nuevo a la ciudad de Ruanon. Atendidos de sus heridas por los hechiceros de la Orden de la Estrella de Cristal durmieron prácticamente durante todo el viaje de vuelta.
Al llegar, el barco alado sobrevoló la ciudad, aproximándose a la fortaleza de La Mano, y allí aterrizó en el patio principal, donde una multitud les aguardaba.
Descendiendo por la pasarela del barco, los héroes de Ruanon llegaron hasta el patio llevando a la princesa Diana en brazos, y, cuando se la entregaron al Rey, la multitud estalló en una ovación que resonó con ecos infinitos en las murallas de la fortaleza. Los aplausos y los gritos de júbilo pronto se extendieron por toda la ciudad y, cuando llegó la noticia, al resto de las ciudades de Sommerlund, especialmente en la capital, Holmgard.
En muy poco tiempo, la historia llegó a todos los lugares del Reino, e incluso se extendió a los países vecinos: Unos héroes habían evitado la catástrofe que amenazaba con arrasar todo Magnamund. El Bien había triunfado sobre el Mal, y ahora el mundo era un lugar mejor para toda la gente de buena voluntad...
Con el paso del tiempo, los nombres de aquellos que salvaron Sommerlund se olvidarían, pasando a la leyenda simplemente como “los Héroes de Ruanon”...
Tras su recuperación Zorro tenía una cosa en la cabeza. Debía de cerciorarse de algo y hasta que no estuviera seguro no estaría tranquilo. Su camino le llevó de nuevo hasta las ruinas de Makeen, revivió paso a paso la cruenta batalla y lo difícil que fue para él tener que decapitar a su antiguo maestro. Aunque fuera un traidor y se hubiera vuelto loco seguía siendo merecedor de un respeto. Ése respeto es lo que Zorro plateado iba a darle.
Despacio descendió el desfiladero por el que casi pierde la vida. Buscó tres cosas, la cabeza de su maestro, el cuerpo y lo más importante, algo que no debía de caer en malas manos. La espada Colmillo. Esa espada debía de ser entregada a los grandes maestros del magnakai para que aquel que volviera a ser merecedor de ella la empuñara de nuevo. Sino, sería un triste pero justo recordatorio del maestro Lobo Gris.
Una vez la espada estuviaera en manos más sabias que las suyas partiría en busca de nuevos reclutas para la orden del kai...
Siento no haber podido postear. he tenido un fin de semana ajetreado y luego he tenido que ir a llevar muebles y mover cosas al pueblo.
Mientras se recuperaba de sus heridas, Buho todavía se maravillaba. Contra todo pronóstico, no solo habían truncado los planes de Lobo Gris, sino que todos ellos habían sobrevivido al enfrentamiento final con el Gran Señor del Kai. Sólo lamentaba que su compañero Serpiente Silenciosa no estuviera con ellos para celebrarlo.
No podía permitirse que sucediera de nuevo nada parecido. La historia de lo ocurrido no podía perderse. Buho lo tenía decidido. Se convertitia en un maestro en el monasterio y allí trataría de guiar a los nuevos iniciados para que no se torciesen en su camino.
Y así fue como la leyenda se forjó. Durante mucho tiempo, se recordaría la leyenda de los Héroes de Ruanon...
... pero eso ocurriría con el transcurrir de los siglos, no a la semana siguiente...
Porque siete días después, un carruaje os transporta hasta la escalinata de la Catedral de Ishir.
De él descendéis los Señores del Kai Águila Certera, Buho Sabio y Zorro Plateado, ataviados con vuestros uniformes de gala de la Sagrada Orden de los Monjes del Kai. Ayudada por ellos, después desciende Elessa, ataviada con un vestido elaborado de las más exquisitas sedas y con joyas, dignas de una princesa vassagonia.
Es una mañana luminosa, y la ciudad se ha engalanado para la ocasión, resplandeciendo como una joya, con banderas al viento en cada una de las torres y edificios de Ruanon. La gente se agolpa en la plaza para ver mejor, y se respira un ambiente de fiesta y celebración, con música resonando por todas las calles.
En el cielo, barcos volantes extienden banderas gigantes en el cielo y dejan caer sobre la ciudad una lluvia de pétalos de flores que contribuyen a conseguir un ambiente idílico.
Unas trompetas resuenan con su poderoso cantar y se hace el silencio en toda la plaza. Al momento, una música orquestal comienza a sonar, y los cuatro compañeros comenzáis a subir por la escalinata.
A ambos lados, una guardia formada conjuntamente por Caballeros de Ruanon y Señores del Kai forman una escolta para vosotros.
Poco a poco, vais llegando a lo alto de la escalinata, donde, ante la entrada de la Catedral os espera un séquito encabezado nada más y nada menos que por el Rey Ragnar I de Sommerlund, que os recibe con una sonrisa. Unos pasos detrás suyo, está la princesa Diana, ya totalmente recuperada de la experiencia.
A un lado también podeis ver al Gran Maestre de la Hermandad de la Estrella de Cristal y al Gran Maestre de la Orden del Kai. Podeís ver el orgullo que reflejan los ojos del líder de los Señores del Kai.
Junto a ellos están el pequeño Dan Vanalund, Heredero de Ruanon, cuya mano es sostenida por su hermana Irina, convertida ahora en su tutora y Baronesa Regente. La muchacha os dedica una cálida sonrisa y un gesto de sincero agradecimiento, en su nombre y en el de su pueblo.
Al llegar a lo alto la música se para y comienza una espontánea aclamación por parte de la multitud de la plaza. Tras varios minutos ininterrumpidos tiene que ser el mismo Ragnar el que pida silencio para hablar.
De esta manera el Rey comienza su discurso, en el que no hace más que elogiaros. Pero vosotros apenas escucháis, ya que vuestros pensamientos están en otra parte.
Están en aquellos que murieron en el camino que os ha llevado hasta aquí. Personas valientes que lucharon junto a vosotros por lo que creían. A muchos ni siquiera los llegásteis a conocer, pero sí a otros, y en este día también se les rinde homenaje a ellos.
Tenéis sobre todo presente en vuestros pensamientos a Serpiente Silenciosa, caído en la Batalla por la Mano a manos de Lobo Gris. El cuerpo de vuestro compañero reposará ya para siempre en un lugar de honor en el mausoleo del Monasterio del Kai, junto a aquellos que dieron su vida por Sommerlund.
¿Y el futuro?
Esta historia os ha demostrado que Sommerlund siempre tendrá enemigos, y estará acechado por peligros, y que no todos ellos provienen de las Tierras Oscuras.
Os preocupa la visión que os relató el malogrado Lobo Gris sobre la destrucción del Monasterio del Kai y la caída de la Orden.
Pondréis todo el empeño en que eso jamás tenga lugar, en que nunca se produzca.
Águila Certera ha aceptado un puesto en la corte de Holmgard, como escolta personal de la princesa Diana y protector de la familia real. Un gran honor al que corresponderá con todo su empeño, aunque en el fondo de su corazón sabe que volverá algún día a su verdadero hogar, a la naturaleza, donde por fin se sentirá completamente realizado.
Buho Sabio volverá de nuevo al Monasterio donde trabajará educando a la nueva generación de Señores del Kai. Sabe que la Orden aún no ha llegado al máximo de su esplendor ni de su poder y está dispuesto a dedicar su vida a conseguirlo. También será el responsable de poner por escrito los acontecimientos que aquí sucedieron, de manera que en el futuro nunca se olvide la verdad de estos terribles hechos.
Por su parte, Zorro Plateado recuerda la pira funeraria que levantó para Lobo Gris en Maaken tras recuperar su cuerpo. El viejo Maestro descansa por fin en paz. Su arma, la espada Colmillo, será devuelta al Monasterio del Kai, como testigo de lo que sucedió en Ruanon. Y él emprenderá un largo viaje por todo Magnamund en busca de nuevos reclutas para la Orden. Su intención es aventurarse allí donde ningún Señor del Kai jamás ha estado. El mundo está lleno de maravillas por ofrecer y Zorro piensa descubrirlas todas.
Elessa no ha revelado mucho de sus planes de futuro. Sólo ha comentado que sus tareas como comerciante la llevarán muy pronto de nuevo a su país. Las intenciones de la vassagonia permanecen ocultas, como su rostro bajo el velo de sedas. ¿Pero quién sabe qué nuevos retos depara el futuro a uno de los asesinos más letales de Magnamund?
Vuestros pensamientos vuelven de nuevo a la realidad, donde el Rey acaba su discurso dando vivas a Ruanon, a Sommerlund y a los Señores del Kai. Vivas que son coreados por miles de voces mientras las trompetas vuelven a sonar y comienza de nuevo la música, el cielo se llena de pétalos de todos los colores y desde los barcos volantes surgen estelas de luces de colores que iluminan el cielo de esta mañana con una intensidad como la de los fuegos artificiales en una noche sin luna.
Henchidos de orgullo por haber llegado hasta aquí, hasta el final, compartís una mirada cómplice, mientras disfrutáis de vuestro momento de gloria.
La victoria es vuestra.
EPÍLOGO 1
Lobo Solitario cerró el libro tras haber terminado de leerlo. Pasó con suavidad la mano por el lomo, acariciando las letras del título del mismo: “Sombras del Pasado”.
Con cuidado, volvió a colocarlo en la estantería donde pertenecía y volvió a reflexionar sobre el antiguo volumen, escrito hacía siglos por un Señor del Kai llamado Buho Sabio.
Había sido un milagro que parte de esta biblioteca quedase intacta tras la destrucción del Monasterio del Kai. Hace unas semanas, cuando comenzaban el proceso de reconstrucción de esta zona del Monasterio, había aparecido tras un muro derrumbado, con la mayoría de los libros en perfecto estado.
Por alguna extraña razón el libro le había llamado la atención, y desde que comenzó su lectura no había podido dejarlo hasta su conclusión.
Comprendió ahora la tragedia de la historia de Lobo Gris, un Señor del Kai que tuvo una visión del futuro, de la destrucción del Monasterio por las hordas de los Señores de la Oscuridad. Por desgracia para Lobo Gris, éste interpretó mal su visión. Creyó que el lobo que podría salvar a la Orden del Kai era él mismo, cuando en realidad se debía referir a Lobo Solitario.
Y el plan que el antiguo maestro había trazado para acabar con los Señores de la Oscuridad usando al ejército de Lord Vashna hubiera llevado a Magnamund a su destrucción.
No se puede combatir el Mal con un Mal todavía mayor.
El fin no justifica los medios.
Por suerte, los protagonistas de la historia habían detenido a Lobo Gris, enfrentándose a él en el Abismo Maldito, de una forma similar a cuando el mismo Lobo Solitario se había enfrentado a Barraka, el noble renegado de Vassagonia, en aquél mismo lugar.
Sólo había un detalle que no le había quedado claro. En ninguna parte de la historia se mencionaba el arma que era necesaria para llevar a cabo el terrible ritual. No había ninguna mención a la Daga de Vashna... un objeto maldito que sin duda había acabado en poder de Lobo Gris.
¿Qué había sido de aquella Daga tras la derrota de Lobo Gris?
¿Cómo fue posible que, siglos después, hubiera llegado a manos de Barraka?
Sabiendo que nunca conocería esas respuestas, que se habían perdido en el tiempo, Lobo Solitario se levantó del escritorio, apagó la vela que le había estado iluminando y salió de la antigua biblioteca...
EPÍLOGO 2
Bajo un sol abrasador, la larga caravana avanza por las arenas del desierto de Vassagonia de camino a Barrakeesh.
Decenas de camellos transportan tanto las pesadas cargas como a los viajeros, que se protegen como pueden del calor.
En cabeza, un gran camello transporta a la dueña de la caravana, asistida por sus sirvientes y protegida del sol por un toldo de sedas. A la mujer se la conoce como una comerciante de productos exóticos de exquisita calidad. Su nombre es Elessa.
La vassagonia vuelve a Barrakeesh tras haber pasado el último año en Sommerlund.
Entre sus manos sostiene una pequeña caja de madera con intrincados diseños. Elessa la acaricia mientras sonríe para sí. Todavía no sabe qué es exactamente este objeto, sólo sabe que es portador de un gran poder.
Fue una gran suerte que lo encontrara cerca del Abismo Maldito en Maaken.
La vassagonia abre la cajita y se deleita apreciando la belleza de la Daga, creada en acero negro de Helgedad, con una empuñadura sumamente elaborada y un filo ondulado como una serpiente que, durante un instante, se inflama levemente con un fuego azul.
Vuelve a cerrar la caja y la guarda en una alforja. Satisfecha, Elessa mira hacia el horizonte, donde ya pueden verse las torres de su ciudad.
Seguro que allí encuentra a algún comprador interesado...
Comunidad Umbría ha presentado...
Lobo Solitario: Sombras del Pasado
Modron como el Señor del Kai Águila Certera
Marko como el Señor del Kai Buho Sabio
Conanelectronic como el Señor del Kai Zorro Plateado
Basada en la serie de librojuegos de Lobo Solitario, creados por Joe Dever.
Lobo Solitario: Sombras del Pasado
Inicio 16-06-2008
Final 7-10-2010