Has hecho unos frugales preparativos y tras una breve visita a la convaleciente Kaede, te has echado a la carretera, tu primera jornada te lleva a prenoctar en el castillo del Roble pálido, cerca de la capilla del Ki-rin en las tierras occidentales del clan, fronterizas con el dragón, la carretera baja hacia el sur, entre las tierras de los dos clanes hacia Toshi Ranbo, esa es la ruta más rápida.
Por desgracia, tus papeles de viaje solo los han firmado tus daimyo y solo son válidos para viajar por tierras fenix, más alla deberás de encontrar a un magistrado esmeralda que te de unos que te autorice a ir por las clazadas imperiales, salvo que vayas por caminos de comerciantes y etas.
Otra opción también podría ser pedir permiso a las distintas autoridades de las tierras de los clanes que quieras cruzar, pero esas decisiones tendrás que tomarlas en días venideros, de momento estás cansado tras caminar todo el día y la idea del recivimiento que tus primos te puedan dar en el castillo es una tentadora promesa, que se impone a todas las demás preocupaciones.
El camino habia sido largo y llegaba el momento de descansar .
Las tierras dragon eran un lugar extraño e imponente que podia maravillar a cualquier viajero sobretodo si nunca habia estado alli.
Ahora antes de eso debia parar en el castillo del roble palido en espera de el dia de mañana
Pues no no me habia dado cuenta,no me llego nada hasta hoy...
Un rayo cae del cielo, para perderse tras una colina cercana, iluminando la creciente oscuridad, el rugido colerico de los kami se hace oir a tu alrededor, pero al mirar en la dirección donde ha caido el rallo ves una figura iluminada por él q hasta ahora no había llamado tu atención, parece seer un samurai Shiba, que camina pausadamente pero sin descanso, algo exhausto o esa impresión es la que te da.
perdón por el intermedio, pero navidades siempre quitan mucho por medio
El samurai no acaba de alcanzarte, pues no te has detenido, desde lejos grita tu nombre, al reconocerte, y la voz te resulta familiar.
Arashi-sam!!! su voz distorsionada por la tormenta se te antoja familiar.
Arashi se paro un momento volviendose hacia el shiba .
¡Aqui Denbe -sama,me oyes estoy aqui!
El ishi se acerco pausadamente hacia la figura de Denbe intentando combatir el temporal.
Que razon habria hecho al compatriota dejar sus tierrras siendo que estaba prohibido,bajo dura pena..