por mi parte si, sino tardamos siglos en terminarla, y a duras penas
Los esforzados marines sobrevivientes corrieron hasta la sala de comunicaciones. Las defensas externas mantenían a la Horda fuera, y el ocasional Orko que se aventuraba al interior moría rápidamente ante la potencia de fuego de los marines, y las chisporroteantes cuchillas del exterminador de asalto.
Finalmente, una torpedera Thunderhawk descendió a asistirlos, para elevarlos por los aires. Desde allí pudieron observar la magnitud del asalto planetario... decididamente, habría más trabajo pronto. No hay descanso para los Ángeles de la Muerte.
Gloria Imperatus!
Bien, abro una escena de opiniones, que recuerden que esto era para probar un par de reglas.