Tus golpes demuelen a David, que pierde el último atizbo de fuerza que le quedaba.
No puedes alegrarte más; tu propias fuerzas están cercanas de flaquear, mientras al ola de vítores te cubre.
YOU WIN!
Felicitaciones. Realmente, ganaste por ser ligeramente más rápido que David :)
Nate levantó las manos con orgullo, exhibiendo los golpes que David le había propinado.
Se acercó al caído, y le tendió la mano para ayudarle a levantarse.
-Has sido un oponente más que digno. En una semana o dos no podré combatir como Diox manda.- sonrió agotado Nathan.
Hay que aprovechar bien las ventajas de cada uno. Por suerte corro más :D
Triunfar es bueno para el negocio, parece. La voz se ha corrido y el bar estuvo lleno por días, a reventar. Todos quieren verte, invitarte una copa (como si el bar no fuera tuyo, piensas con sorna), preguntar, charlar...
Incluso los hay que quieren patrocinar al club de lucha... esto último te preocupa. No es que haces algo realmente ilegal, pero si la policía tiene ganas de indagar te pueden clausurar por un millón de motivos: sospechas de apuestas ilegales, actividades peligrosas para la salud, servir alcohol en un "evento deportivo"...
Lo más interesante sin embargo, son las repercusiones en la Red. David aparentemente era un combatiente respetado por su poder y su fuerza. Te han llegado contactos e informes instándote a que te midas pronto de nuevo; sabes que tienes que salir a buscar a alguien o alguien saldrá a buscarte a tí.
Ni corto ni perezoso, Nathan se lió el petate, cogió los días de vacaciones corespondientes, y se marchó a buscar más enemigos con los que luchar. El que le recomendó a la Red le había dado un par de direcciones útiles en las que buscar camorra.