Henutsen lo habia pasado mal, por un momento se habia visto muerto y cubierto de lava. Afortunadamente su magia era poderosa, y seguro que con sus conocimientos magicos sobre curacion y los de Leila podrian volver a dejar su piel sin ninguna marca de lava.
Despues de que Dranger se deshiciese del idolo hundiendolo en la lava, y cuando consiguio desembarazarse de los lametones de Kasr, echo un rapido vistazo por la habitacion en busca de algo de valor, o incluso algun libro o mapa que poder llevarse y cuando termino apremio a sus compañeros a no pasar un minuto mas en aquel lugar.
- vamos, largemonos de aqui - dijo algo tembloroso reviviendo la experiencia - o al menos reunamonos donde se pueda respirar bien - el druida pensaba en los compañeros que parecian estar pasandolo mal por culpa del calor.
Tirada: 1d20(+9)
Motivo: percepcion
Resultado: 20(+9)=29
yo y mis tiradacas... ¿donde estaba ese 20 hace unos dias? la cantidad de busquedas por foros que nos hubieramos ahorrado xD
Por fortuna el poderoso ataque de Dranger logra eliminar a la sacerdotisa, lo que parece repercutir también en el demonio que había invocado.
Pero lo mejor de todo es que Henutsen no estaba muerto, lo cual agradece. Leila se acerca a él para ayudarlo mientras el enano se deshace de la estatua de Moloch.
Como no puede ayudar a sanar al druida, y no tiene suficiente fuerza para ayudar al barbaro, el mago decide acercarse al cuerpo de la sacerdotisa y examinarlo con un detectar magia.
Pues eso master, reviso lo que llevaba la sacerdotisa.
Me alegro de que estés vivo Henutsen.
Dranger arroja el idolo de oro a la lava, rompiendo el conjuro que une éste lugar con el plano de Malevolche. La lava deja de fluir, y el valioso idolo se unde en los rios de magma.
El oro de la estatua, se deforma por el tremendo calor, pero tanto la espada aserrada como el hacha parecen resistir en parte el calor cada vez menor de la lava.
En eso, mientras Henutsen se recupera bajo los cuidados de Leila, y Owen, casi aplaudiendo el accionar de Dranger, se acerca a inspeccionar a la sacerdotisa, todos recuerdan al unisono que lo que venian a buscar acá era justamente....
¡Oh no! exclaman a coro.
:)
Sacerdotisa:
Cita:
Owen detectó varios objetos mágicos que llevaba la sacerdotisa. Estaba empezando a recogerlos cuando recordó qué habían venido a buscar algo a este lugar.
El ruido del idolo al caer a la lava se lo recordó que era eso precisamente. Se quedó mirando unos instantes como se deshacía.
Bueno, ya no hay nada que hacer. Y por lo menos se nos ha quitado ese molesto canturreo de la cabeza.
Encogiendose de hombros, el mago examina con más detenimiento los objetos mágicos.
Tirada: 1d20(+8)
Motivo: Identificar varita
Resultado: 9(+8)=17
Tirada: 1d20(+8)
Motivo: Identificar capa
Resultado: 12(+8)=20
Jejeej. Justo me acordé cuando lei que el enano lo tiraba a la lava. Pero buieno, tampoco creo que pase nada demasaido grave. ¿verdad?
Voy tirando los identificares por si averiguo lo que es alguna de las cosas. Y así no se me olvida.
En principio identifico la varita y la capa.
- Vaya por los dioses, ahí se va nuestro ídolo... no obstante no te recrimino nada, al menos hemos dejado de oír esas voces...
Dranger tarda un tiempo en ser plenamente consciente de lo ocurrido, una vez su furia remite y su respiración se vuelve pesada.
Con el pasar del tiempo los ríos de magma dejan de correr y van perdiendo su ardor. Suerte, pues no me apetecía volver a pasar por esos torrentes. Su mirada se posa en Henutsen y Leila.
- Creo que ya podemos salir para descansar y emprender de nuevo el camino de regreso.
El mago asiente ante las palabras del enano.
Pues sí. Me alegro de que hayamos podido lograrlo todos. Henutsen nos ha dado un susto pero no ha sido nada grave. Creo que merecemos una felicitación.
Me alegro de haber venido con vosotros.