Partida Rol por web

Se habían logrado esconder tras los arbustos correteando por ahí sin entrar en el campo de visión de aquellos extraños seres. ¿Qué serían aquellas cosas? Daba miedo realmente. 

Estaba por preguntar a las chichas si al final huían o seguían el plan de la alarma cuando la voz de aquella mujer la hizo estremecer, como si fuera un aviso de que algo no iba bien y... Efectivamente, estaba atacando a Kibomu con su mirada y palabras. Aún no había pasado a la acción pero... Estaba claro que lo haría pronto. 

Entonces se dio cuenta de algo. Por su culpa la llave estaba más a mano de esa mujer, si no hubiera atado con su liga la llave al cuello de Kibomu, aún la tendrían ellas. Aunque por otro lado... ¿Eso quería decir que aquella mujer las habría perseguido a ellas? 

Apretó la mano de Umeko (no olvidemos que sigue ahí cual NPC olvidado ;) ) y respiró profundamente. Tenía miedo, sus piernas temblaban pero... ¿No iban a salir bien de ese lugar, cierto? Y aunque lo hicieran, ¿Donde les dejaría eso? Habían conocido a una criatura impresionante y... ¿Ahora dejarían que le dieran una paliza delante de sus ojos? 

Para ella mirar hacia otro lado no la hacía mejor que esa señora. Susurró a las chicas. -No... No puedo ver como le hacen daño a nadie. Lo siento, iros vosotras yo no... Puedo. Acojonada como estaba, en ese momento parecía más preocupada por la vaquita voladora que de si misma. 

Se alejaría de sus compañeras para que no fueran descubiertas, aunque si alguna quería venir con ella lo agradecería con toda su alma y en cuanto estuvo a "tiro" hizo un nudo pesquero en la punta de su cinta de gimnasta para intentar pescar a Kibomu y tirar de el para sacarlo de la vista de la mujer. Era lo único que se le ocurría. Apartarlo de ahí y... CORRER. Correr mucho y muy fuerte. 

     _{^{Asi que viene de una monarquia...}} - mentaría muy por lo bajo mientras se suscitaban los hechos, los cuales... no parecían estar demasiado a favor del pequeño minitauro, mas cuando se le notaba que no estaba en condiciones para esto, quizás por lo mismo y viendo que mi compañera Akihiko comenzaba a salir del escondite, mi primera reacción fue la de pillarme una piedra o similar cosa de que si era necesario la arrojaría a modo de distracción ... e visto muchas pelis como para saber que el heroe siempre necesita un chico de la silla...

Ichimi fruncio el ceño cuando aquella mujer apareció, al parecer estaba interesada en la llave del pequeño minitauro y estaba dispuesta a quitarsela.

"Eso si que no, dijo que la llave era muy importante para el"

Ni se dio cuenta de que Yua habia pasado a la accion, cuando se dio cuenta, estaba corriendo a su lado y mientras Yua estaba haciendo el nudo, Ichimi salto a placar a la chica que parecia llamarse Shudder.

Yua e Ichimi salen de su escondite entre los arbustos, listas para intentar ayudar al minotauro. Pero en ese momento las rodean varios de los siniestros soldados que acompañaban a Shudder, soltando varios gritos de alarma de manera amenazadora. 

Shudder se gira y os mira. -Mmmm? Vaya, parece que tienes algo de caballería-comenta con una risa burlona mientras os mira como si no fueseis gran cosas. 

-Chicas!!-grita preocupado Kiboumu al veros.

-Ah...ya veo parece que no has tardado en hacer amigas...que pena que no vayan a acabar bien por tu culpa-dice Shudder mientras os mira y luego al minotauro. -A menos...que me des la llave, puede que las deje ir en ese caso-dice la mujer.

Kiboumu alza la mirada de sorpresa y Shudder sonríe con crueldad. -No querrás que nadie más acabe herido por tu culpa, ¿cierto?-comenta la mujer. Kiboumu mira la llave y luego a vosotras, el miedo y la preocupación en su rostro.

Nimi frunció el ceño cuando Ichimi salió a enfrentar a los enemigos, al parecer estaba interesada en aquella mujer que apareció de la nada, y que parecía interesada en la llave del pequeño minitauro y estaba dispuesta a quitarsela.

^_-No... -Comentó por lo bajo, lamentándose de la decisión de su hermana.

Ni se dio cuenta de que en un abrir y cerrar de ojos, esta estaba corriendo para reunirse a su lado, para poder ayudar y socorrer a su hermana mayor en aquel acto de violencia sin sentido, o con un sentido que ella no lograba comprender.

Acababa de hacer el nudo cuando fueron sorprendidas por varias de aquellas extrañas y terroríficas criaturas, rodeándolas, haciendo sonar una alarma que delató completamente sus posiciones. Definitivamente aquello no era algo que se esperase ni por un segundo. ¿De donde habían salido tantas criaturas de golpe a su alrededor? Aquello era peligroso y daba miedo, tenían que salir corriendo más rápido que antes y como pudieran... Pero no sin su vaquita alien voladora. ¡No podía dejarlo allí!

**En cuanto lo enlazara tenía la pura intención de salir pitando del lugar, gritando a todo pulmón  CORRED pues definitivamente no se iba a quedar allí, nadie debía quedarse allí. Tenían que salir todas y era algo que tenía claro desde el inicio. ¿Por qué se preocuparía siempre antes por cualquier otro que por si misma? Si es que era re-tonta. Ya se lo decía siempre Umeko. 

Aunque su acción e intención fuera correr y esquivar como bala cualquier cosa, si viera que Ichimi y Nimi quedaban atrapadas, le lanzaría a Valentina quien estaba más lejos de todos a Kibomu para tener una pequeña oportunidad de huída todos por el caos de perder a su objetivo.

Ichimi miro a su hermana.

-Que haces aquí boba, te pueden hacer daño.

Dijo mientras se ponía entre aquellas criaturas y ella en actitud protectora, mientras adoptaba una postura de combate.

-Si os atrevéis a tocar a mi hermana os hare trizas.

Comento a aquellas cosas envalentonada, aunque en su interior sabia que no tenia gran cosa que hacer contra aquellas armaduras, su intencion era usar el factor sorpresa contra aquella mujer, pero les habian emboscado, asi que ahora lo habian perdido.

-Minitauro, ni se te ocurra darle nada a esa tipa, menos si es importante para ti, nosotros nos las arreglaremos.

   Hmmmmm...- un grito ahogado se me escapaba en cuanto comienzo a ver como la formación se iba rompiendo dejándome como la única en el precario escondite ... que darle apoyo a Akihiko era posible, pero ahora también las hermanas.... e- eso ya son mas blancos de las piedras que tengo a mano... , por lo que saliendo del arbusto me mantuve cerca de Yua mientras apuntaba a cualquiera que se le acerca en plan de ir priorizando interceptar enemigos, mas que derribarles rezando que esto nos comprara los segundos valiosos para escapar de aquí lo mas ilesas posibles ... para algo que valga las horas jugando Space invader...