-Gracias.
La joven halfling se baja rápidamente de la silla y mira a la criatura muerta.
-¿Quién era? Parecen símbolos religiosos lo que tiene en la ropa.
-Si... -el paladín se agacha junto al cadaver- Los ropajes están mugrientos y raídos, pero parece el signo de nuestra Señora Iomedae.
Silencio, el cadaver era originalmente del padre Kelgrart. Lo leíste en los periódicos de hace 5 años. Intentó, junto con otros tantos aventureros, acabar con la maldición de este lugar. Nunca más se le volvió a ver.
El cadaver del padre Kelgrart. Lo leí en los periódicos de hace 5 años. Intentó, junto con otros tantos aventureros, acabar con la maldición de este lugar. Nunca más se le volvió a ver. El tono de voz es sombrio, aunque para nada sobresaltado.
Aunque el impacto de la criatura sobre la elfa fue tremendo,pronto recupero el sentido y se vio en los brazos del veterano paladín. Una agradable sensación de calidez recorrió su cuerpo, reconfortando la delicada salud de la joven. Con una mirada de agradecimiento, advirtió al paladín que le ayudase a incorporarse.
Atendió pacientemente lo que comunicaba de la criatura que había atacado al grupo. Sorprendida ante la información que Silencio daba, preguntó:
-¿ Intentaron acabar con la maldición?- tragó saliva mientras su cuerpo se resentía.-...Mi buen silencio,¿ que sabéis mas sobre el intento fallido del padre Kelgrart? - un rápido recorrido por el resto de las personas que componian el grupo, extendió su pregunta a estos.- ¿ o quizás algunos de vuesas mercedes saben algo de lo que ocurrió? cualquier pequeño detalle sera una buena noticia ..-
Motivo: Diplomacia (Sab)
Tirada: 1d20
Resultado: 18(+2)=20
Nada más que lo que os he dicho, digo ,mientras registro el cavaer.
-Muchacha... -el anciano comienza a hablar mientras se acerca al cadaver- Yo conocía a este hombre. -miró a la elfa a los ojos, pero no parecía estar viéndola. Parecía estar perdido en memorias- El padre Kelgrart era un viejo amigo mío. Un hombre de fe, pero también un hombre de acción. Para su desgracia...
El hombre se alejó dando la vuelta unos pasos. Parecía estar afectándole la visión de su amigo muerto y deformado por la maldición.
-Hace ya 5 años que decidió que decidió que esta casa de justicia debía volver a ser lo que era. Reunió a un grupo de famosos aventureros: el capitán de la guardia, Grimsdom "Hacha-Gemela", su amada la noble maga Sashrala, el mismo padre Kelgrat y varios más que estaban disponibles en ese momento. Entraron entre vítores de los transeúntes que veían en esta hazaña el fin de la maldición que pesaba sobre el barrio del acantilado de Beldrin. Esa noche se escucharon terribles gritos dentro de este mismo inmueble. Y al día siguiente, solo Grimsdom salió con vida. Pero para muchos, era mejor que hubiera muerto dentro junto con todos los demás. Llevaba en una mano sus propios ojos arrancados de sus cuencas, y con la otra agarraba por el cabello rubio y manchado de sangre la cabeza cortada de su amada. Y gritaba algo como "El colgado... un cuello roto por un cuello roto... el odio nunca olvida... ¡Enseñame el camino de vuelta, Sashrala! ¡Enseñame el camino!".
El anciano había terminado el relato con agitación en su viejo pecho.
Genial , estamos muertos si grandes heroes de la ciudad n ohan sido capaces de salir con bien de este maldito lugar, nosotros solo engrosaremos la lista de muertos de este infierno.
Bueno al menos si salimos de aquí con vida podré entregar este simbolo sagrado a su iglesia y talvez la benevolencia de su diosa de paz y descanso eterno al alma de este buen hombre.
Motivo: buscar en cadaver
Tirada: 1d20
Resultado: 16
23 en la busqueda en el cadaver.
Las raidas y mohosas ropas del cadaver no contienen nada de valor, excepto algún símbolo de su diosa de madera podrida.
La triste historia que contaba el anciano, no auguraba nada bueno. Dalanna pensaba que quizás en las incomprensibles palabras de Grimsdom pudiesen encontrar alguna advertencia...
Una vez mas, el silencio recorrió a placer la estancia, así como el temor y la desesperación comenzaba a hacer mella en los que aun estaban vivos. Dalanna inspeccionó con detalle su herida que, aunque no sangraba; no dejaba de tener mal aspecto. Rasgó su capa azul y vendó su herida tan buenamente como pudo para evitar que se infectase...
Miró una vez más a la cara de los presentes y habló:
-... Se que vuestros corazones están intranquilos, y mas ante las escenas que tenemos ante nosotros..- chasqueó sus labios al sentir algo de dolor en la herida,-... pero os pido una vez mas que superéis el miedo y encontréis el valor de seguir adelante...-
Lanzando una mirada suplicante al elfo Silencio, le sugirió:
- Mi buen Silencio, ¿habéis encontrado algo que nos pueda resultar de utilidad ante el inminente peligro que nos acecha?.-
Motivo: Sanar (Sab)
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+5)=11
Motivo: Diplomacia (Sab)
Tirada: 1d20
Resultado: 17(+2)=19
Motivo: Percepción (Sab)
Tirada: 1d20
Resultado: 13(+7)=20
Tiradas:
- una tirada de sanar para curar la herida que he recibido...( para evitar desangres y cosas varias..).
- Una tirada de diplomacia para envalentonar a los supervivientes.
- Una tirada de percepción para ayudar a Silencio en la búsqueda.
Nada util voy a examinar la a la doncella de hierro pero necesito que mantengais abiertas las puertas, y despeus a ver si damso con el maldito fantasma del ajusticiado y podemos solventar este disparate.
Silencio encuentra en un estante de la sala de la fría torturas tres javalinas de excelente calidad y un mayal con un nombre escrito en su mango: Ulako.
No hay nada más en esta habitación.
En el ala este, solo os queda un lugar por investigar: las escaleras de caracol que van al sótano. Vuestra otra opción sería volver a la inmensa sala central que ya conocéis y tomar otro camino a partir de ahí.
Nota: esto es un mayal: