Partida Rol por web

Pleaseville , Virginia.

El camión arranca con un gemido ronco, como si se quejase de tener que adentrarse en una ciudad humana, llena de humanos... sabiendo en lo que se han convertido los humanos ahora.

Continúais por la carretera rezando para que no esté cortada o no haya coches en medio de la misma, pero la carretera está misteriosamente limpia, como hecho adrede...

Preguntándoos por vuestra extraña suerte continuáis, Jim agarra el volante del camión con fuerza y véis como mira de lado a lado constantemente como si esperase que en cualquier momento algo ocurriera... pero nada ocurre hasta que pasáis un cartel en el que se ve " Pleaseville Population: 10.346" en ese momento os miráis acojandos, puede que os estén esperando 10.346 zombies...

Cercanías de Danville, Virginia

El camión avanza pesadamente por el terreno que incluso está enfangado en algunos tramos por las recientes lluvias, pero las grandes ruedas del camión son altamente efectivas y no tenéis que bajaros a empujar, cosa que por otro lado sería vuestra condena de muerte, pues veis hilera tras hilera de zombies a los lados de la carretera, por alguna extraña razón, apenas caminan por la calzada y podéis esquivar a los pocos que se ponen delante- a uno de ellos lo rozáis mandándolo disparado a un lado- , aunque llevéis un camión, atropellar a uno de elllos de lleno puede acabar con vuestro viaje antes de tiempo.

El terreno poco a poco va dando paso del altiplano y la llanura sin apenas árboles a un terreno boscoso en el que se nota que la densidad de población es más baja, pues poco a poco los zombies van desapareciendo y la carretera se va haciendo cada vez más estrecha, lo que no sabéis si puede ser una trampa mortal si os encontráis con un vehículo en medio de la calzada, tras más de una hora de camino empieza a anochecer justo cuando el camión se para por la falta de gasolina.

Danville, Virginia.

Es media tarde , el grupo se encuentra a salvo en un recinto vallado del ejército. Habéis entrado escoltados por el Ejército y la Guardia Nacional, cada uno de vosotros con sus propios motivos y llevados por sus propios actos, habéis sobrevivido milagrosamente(de momento) a esta pandemia, o enfermedad, o lo que demonios sea .

El recinto en sí, no es más que una iglesia semiabandonada situada en un pequeño claro y a a que se llega por el camino por el que van avanzando los transportes ahora mismo.