Evidentemente esto no podía empeorar más, a fin de cuentas, había caído desmayado, su crush lo había rechazado porque la habían acusado de asesina, su ex-mujer (tecnicamente casados aún) se había ido con su archienemigo del cuerpo de policía, y todos los ex-compañeros de instituto y antiguos profesores... así como los actuales compañeros de policía lo habían visto todo. Aunque... faltaba una cosa...
-¡Ey!. -Exclamó uno del público- ¡Ha vuelto Mamoru el Pedorro!.
Ohhhh no, pero que mal - comentaría sin una pisca de arrepentimiento por haber errado en mi deducción ... aunque no se quien escribiría una nota así de una forma mas elegante... y lo dicho, el BDSM se siente fuerte en mi objetivo... , ni tampoco el hecho de que me despidieran por aquel motivo - Bueno, para otra ocasión será - para luego caminar tranquilamente hasta donde mi ex-superior, tomarlo desde el hombro y comenzar a cargar con el fuera de este sitio - Fue bonito lo que intento hacer por mi Superior - iba mentando sin saber bien si me estaba oyendo o no, a la vez seguíamos caminando fuera del lugar - Por eso.., ahora no como su compañero becario, si no... como su amigo, Yo Noa Coronado Kutznes Antares, me encargare de ayudarle.... - mientras mantenía aun mi monologo usaba mi mano libre para hacer una llamada - Heey~hey~hey my Lovely boss, lo~si~en~to, pero mi estadía en el cuerpo fue mas corta de lo que se pudo - sin tomarle mucho peso a mis propias palabras - ¡¡ Pero... !! tengo lo suficiente como para terminar ese documental, "El departamento de Sakurami, el gusano de la manzana apunto de pudrirse" - ensanchando aun mas la sonrisa - Por cierto necesito que contactes con Otto, tengo bastantes pruebas de adulterio dentro de un matrimonio... y quiero saber que tanto podemos aprovechar a nuestro favor... Cha~i~to - y cortar, para volver a coger bien a mi antiguo superior Yastis - Mi departamento no queda lejos, ¿ que le interesa para cenar ?.
Y así fue como, aquellos dos amigos tan peculiares, salieron del Instituto Sakurami City Sur, el destino era incierto para ambos, pero mientras se tuvieran el uno al otro -y esos vídeos- tenían todo lo que necesitaban para estar bien, o al menos para subsistir por un tiempo hasta que las aguas se calmaran. Y aunque Mamoru Ai Yastis seguía inconsciente, siendo arrastrado, probablemente esto fuera lo que quisiera.