Marco estaba desempacando cuando nota como por la puerta entra dos personas nuevas para este aunque los vio en el hall, se acerca a cada uno y los mira. Buenos días chicos soy Marcos y ustees?. Extiende su mano, tambien ven como una de las camas la que esta contra la pared cerca a la puerta fue tomada por este.
- Gabriel... - Respondí en tono seco, devolviéndole en apretón de mano, antes de ir a una de las camas desocupadas. Nunca fui muy dado a hacer amigos, pero tampoco era de los que despreciaba un gesto de cortesía. Puse una de mis maletas sobre la cama y la abrí, buscando mi neceser, donde guardaba mi bote de aspirinas... Con tanta gente y ruido, las iba a necesitar, por culpa de mis jaquecas...
- ¿Alguien sabe sonde puedo conseguí un vaso de agua?. Aunque sea la cocina o el comedor, por favor... - Pregunté a los presentes, mientras cogía una de las pastillas y guardaba el resto en su sitio.
Carlos tendió la mano a Marcos y la apretó con fuerza, acompañándola de una sonrisa Yo soy Carlos. ¿Ambos sois nuevos? Este sitio no está mal, hay de todo, así que seguro que no os aburrís escuchó las palabras desganadas de Gabriel mientras se dirigía a la cama libre y soltaba sus cosas. En el pasillo están los baños, a tu derecha respondió sin girarse. Las indicaciones estaban claras, no se perdería.
Después se dirigió hacia su antigua habitación que ahora estaba vacía, pues como le habían dicho el año anterior sus amigos, era muy probable que para este curso no vinieran. Y así había sido. Así que ahora pudo elegir la cama cercana a la calefacción, odiaba tener que dormir en la que estaba junto a la puerta, porque era donde más ruido había y encima era la más fría. Colocó todo su equipaje en los armarios y esperó a ver si este año estaría solo, o si por el contrario, ya le habrían asignado nuevos compañeros de cuarto.
- Gracias... - Respondí, antes de disponerme a dirigirme a la dirección indicada, no sin antes dejarlo todo cuidadosamente guardado. A continuación salí de la habitación en dirección a los baños...
Salgo de mi dormitorio, director...
De repente la puerta se abre dejando entrar a una persona, Elsa Fernandez la encargada de estudios que os queda mirando. Bueno chicos deben irse cambiando que tienen clases y no quiero que lleguen su primer dia tarde, deben saber que no se justifica las faltas aqui dentro.
Carlos miró la persona que se quedaba frente a la puerta y se irguió completamente. Siempre le había parecido que tenía parecido a su madre y eso no le gustaba nada.
Sí, sí, en seguida, profesora respondío casi con tartamudeos, mientras volvía corriendo a su cama y sacaba el uniforme para cambiarse. No se dio la vuelta, pero esperaba que ella se hubiese ido y que no le viesen quitarse la camiseta.
Miro como una persona entra y nos avisa que debiamos ir a clases porque no se perdonaba la falta, observo a los chicos mientras me terminaba de cambiar. Ella quien es?. No la habia visto presentarse pero por lo que parecia era alguien importante.
Carlos miró por encima del hombro y comprobó que Elsa ya se había ido. Soltó el aire que había retenido lentamente, recuperando los nervios.
Es Elsa, la jefa de estudios contestó al nuevo, mientras se terminaba de cambiar. Es un poco arisca y borde no podía decir nada bueno de ella, no había tenido relación y, cuando la habían tenido, no había sido para bien.
Deberíamos irnos. ¿Habéis terminado?
Iker se cambió en la mayor brevedad posible, y después miró a Marcos. Es arisca, pero la verdad que es buena profesora. Simplemente es estricta y le gusta que las normas se cumplan a rajatabla. Es normal. Si no existieran personas como ella, esto sería un desmadre. Dijo encogiéndose de hombros tratando de defender a Elsa.
¡Venga, vamos a clase! Dijo tomando la mochila y sus libros.