El cainita esboza una sonrisa y extiende una mano para presentarse.
- Mi nombre es Vincent, señorita. Busco a la dama Tatiana porque mi señora quiere tener una reunión con ella. ¿Sabe dónde puedo encontrarla? Al parecer, no está. Y usted parecía venir a verla...
Aah, vaya :O Bueno, arreglemos esta escena y la subes, y te pongo un turno nuevo :)
Daphne mira la mano y la estrecha débilmente.
-Bueno, Vincent, como comprenderá no puedo darle su ubicacion sin preguntarle a ella antes. ¿Por que no me da un numero de telefono de contacto y le digo que le llame cuando la encuentre?
¿Y este quien narices es? piensa la setita.
- Ah, no se moleste, seguiré esperandola. Mi señora aún tardará un poco en llegar, puede que entonces la dama Tatiana ya esté aquí. No quisiera entretenerla más, señorita Daphne, si tiene prisa...
Hace un ademán elegante para hacerse a un lado y dejar libre el camino.
Daphne se fijo bien en el tal Vincent. Tatiana le preguntaria por el a buen seguro. Despues, paso por su lado y salió del despacho. Por si acaso, de camino a su vestuario, aviso a seguridad para que le echaran un ojo. No estab ala cosa para ir teniendo a desconocidos en los despachos.
Daphne bajó a la zona de bailarinas y abrió su guardaropa. Cogió lo más discreto que encontró, unos pantalones vaqueros con grandes agujeros, una blusa muy escotada (aunque era el escote mas pequeño que tenia en aquel vestuario) y una chaqueta de cuero. Lo dejó todo preparado y se metió en la ducha. El calor del agua la relajó un poco después de la nocha tan horrorosa que había vivido. Daphne aborrecía la violencia. Había tenido que fingir el arrebato de celos para cubrirse las espaldas respecto a Viktor pero no estaba orgullosa de sus actos.
¿Estara vivo? ¿De quien seria ese monton de cenizas?
Cuando salió se puso los vaqueros sin ropa interior (hasta las bragas le olian a mierda de claca), la blusa, se calzó unas botas de ante y se puso la chaqueta. Al menos ya no parecia una sin hogar. Después llamó a Christine para que llevara a Michelle y a Lucas al Eliseo, donde suponia que estaria Tatiana. A ver si podia matar dos pajaros de un tiro.
- Tatiana te está buscando - dijo secamente Lou. - Está en su reservado. Dice que es urgente - remarcó la última palabra con una mueca.
Daphne se quedó mirando al gorila mientras la repasaba con los ojos. en otra ocasion hubiera comentado algo ingenioso pero hoy no estaba de humor.
-Voy para alla, si ves a mis amigos diles que me esperen en el club. La mencion a su rebaño levanta aun mas el apetito de la setita pero se guarda de demostrarlo delante de Lou.
Dicho esto, Daphne salió de allí sacudiendo las caderas desde la altura del tacón de sus botas. Al llegar al reservado, antes de entrar, avisó de su presencia:
-¿Tatiana?
Pasa por el Rincón del reservado para seguir la conversación. Recuerda marcarte mientras dure la charla ;)
Durante el camino hacia la salida, Lillian conversaba con alguien que caminaba a su lado; este alguien era invisible, Daphne no lo veía, pero por la manera en la que la Primogénita hablaba, era como si realmente estuviese hablando con una persona real.
- ¿Cuanto crees que durarán? ... No, no creo... Ah, Franz tiene la fachada de hombre perfecto, pero es un egocéntrico... ¿Qué? No, no, que va... Estoy segura, sí... Te lo digo yo, que lo conozco bien, la dejará cuando ya no sea de utilidad. Oh, ah, disculpa - se volvió a la setita - este es mi amigo Phil - le dijo, presentándole a su amigo invisible. - Bueno, muchacha, ¿cómo vamos a ir hasta Warrior Square?
Podriamos ir en Limusina pero creo que llamaría demasiado la atención. ¿Que tal un taxi?
Por mucho que le hubiera gustado birlarle la limo a Abel era decididamente la opcion menos práctica.
- Uh, ¿no tienes medio propio de transporte? - dijo la Malkavian, como si hubieses faltado a su sentido del honor. - Tsk, muy mal por tu parte, no sé cómo piensas llevarme. ¿Un taxi? - se quedó un momento pensativa. Bastante tiempo. Luego se encogió de hombros. - Vale...
Sin más, la Primogénita se aproximó a la acera y pidió un taxi. Ambas cainitas iniciaron la marcha hacia Warrior Square. Las luces de la ciudad se reflejaban en los cristales, la noche londinense era como tantas otras, oscura, silenciosa y neblinosa. A medio camino, la vampiresa se acercó a Daphne arrastrándose por el asiento hasta pegarse a ella.
- Y... dime, ¿qué tal se porta Viktor? O se portaba, caso de que esté muerto. He oído que es un poco... "brusco" - realmente parecía muy interesada en conocer la vida sexual del otro Primogénito. - Oh, no te preocupes por Phil, es un hombre muy discreto...
Daphne se habia reclinado contra la ventanilla del taxi y habia echado la cabeza hacia atras, apoyando el lado de la frente en el cristal frio. Estaba deseando olvidarse de todo aquel embrollo y por eso le siguio la corriente a la malkavian. Mientras hablaba, su dedo indice recorria la sinuosa linea de su cuello involuntariamente, acompañando el recuerdo de su encontronazo con victor.
Has oido bien. Follar con el me dejo peor que la pelea con la desconocida. Es un animal en todos los sentidos. Diselo a phil de mi parte.
El tiempo había pasado y Daphne estaba satisfecha con sus progresos. Poco a poco iba arañando su parcela de poder en el Haven y aumentado el flujo de información que pasaba por sus colmillos de serpiente. Tatiana, completamente enchochada con Lucrecia, andaba mas alterada de lo normal últimamente (Cualquiera la culparía, últimamente en Londres acostarse con Lucrecia parecía ser lo más cercano al Nirvana).
Tatiana no es la misma desde que está con ella y resulta hasta sospechoso esa dependencia que ha nacido entre las dos. Aprovechando que Lucrecia no se pasa desde hace un tiempo y que la cosa esta tranquila en el club, Daphne se viste con un traje de chaqueta y una blusa escotada de color verde serpiente y se dirige hacia el despacho de Tatiana...
Realmente habían sido unas semanas de locura. Todo el asunto con Viktor, las sospechas, los interrogatorios...la nueva relación de Tatiana con aquella diosa de Lucrecia... Como siempre, Daphne había sabido moverse entre mareas y había salido a flote de todo aquello, aprovechando el hueco dejado por Tatiana para hacer su posición en el Haven más fuerte. Los anillos de las serpientes se cerraban sobre el Haven y Daphne debía averiguar como estaba exactamente la situación con Tatiana.
Aprovechando que aquella noche la toreador estaba en el club, Daphne se vistió con su chaqueta de raya diplomática, una falda larga (para ella, ya que solo llegaba hasta por encima de las rodillas), se hizo un moño alto y cogió su bolso Hermes y se dirigió hacia el despacho de su "jefa".
Por el camino se procuró una excusa para entrar en su despacho. Se hizo con los números del club de aquella semana para comentarselos a Tatiana. La afluencia seguia bajando y aquello era un motivo perfecto para una charla con Tatiana.
La setita llamó a la puerta y la voz de su jefa le llegó desde el otro lado.
- Pasa, por favor.
Así lo hizo Daphne. Su jefa estaba cambiada, eso podía notarlo Daphne sin necesidad de ningún poder ancestral. Eran cosas de mujeres, por mucho que Tatiana se recubriese de esa coraza de frivolidad y total indiferencia, la Toreador no brillaba con la misma intensidad que los días que estaba con Lucrecia.
- Toma asiento.
Hasta su voz parecía cansada. Daphne se sentó, pero Tatiana no inició ninguna conversación... Esperaba que fuese la setita quién dijese algo.
Como por el momento tenemos a Tatiana desaparecida, la llevaré yo y se quedará con lo que saquemos de esto xD
¿Como andas, jefa?- dijo Daphne con ese tono informal que la caracterizaba. Tatiana y ella nunca habían sido amigas pero quería pensar que, tras todo lo que había pasado, al menos se respetaban y Daphne podía hablar con ella en un tono coloquial.
Te traigo los números de la semana. La tendencia sigue siendo a la baja. Vamos a tener que hacer algo para conseguir más clientes. Me temo que esta debe ser la única guerra que no le viene bien al negocio del sexo. Tal vez buscar chicas nuevas o enseñar al ganado fuera para hacer entrar a los indecisos... ya se que no es el estilo del club pero el camino que llevamos lleva a reducir costes y no creo que eso te guste tampoco...
Daphne se interrumpe ante el gesto cansado de Tatiana y cambia de tono a uno mas suave, mas de confesionario...
-¿Que te ocurre Tatiana? Te veo desmejorada. ¿Todo anda bien entre tu y Lucrecia?
La Toreador mudó la expresión a una completamente indescifrable cuando Daphne le preguntó por Lucrecia.
- Todo bien - dijo con una sonrisa, aunque parecía tensa. - No, desde luego, no quiero ir sacando ganado a la calle como si esto fuera un burdo mercadillo, el Haven es un local con clase, por dios. No podemos perder la poca elegancia que nos queda con algo así. ¿Tienes otra solución? - se recostó en el asiento, más pálida de lo habitual.
-Tal vez refrescar nuestra oferta. Chicas nuevas. Tal vez diversificar. ¿Por que no buscar una hermosa cantante que amenice a nuestros clientes la velada mientras nuestras chicas trabajan? Pero, principalmente, creo que al club le vendría bien que pasaras mas tiempo aqui, Tatiana. La gente te conoce. Muchos vienen a verte a ti, aunque solo sea un fugaz momento. Tu presencia da clase al local. Lo mio no es la clase, ya lo sabes.
Daphne rodeó el escrtiorio, se sentó en el tablero y puso su mano en la de Tatiana.
-Se que estás muy ocupada con Lucrecia pero estoy dispuesta a ayudaros en lo que sea, si asi lo necesitais y asi podrias volver mas por aqui.
Daphne sabia que pisaba terreno resbaladizo y espero la respuesta de su jefa.
Tatiana se echó hacia atrás en la silla, apartándose sutilmente del contacto de su empleada.
- Hace semanas que no salgo de aquí - murmuró con una mueca indescifrable en el rostro. - Pero supongo que tienes razón... - se tocó la barbilla mientras reflexionaba. - Me parece buena idea lo tener una voz bonita que encandile a la audiencia, ¿te encargas tú de buscarla? Necesito una chica que sea mona, que tenga voz sugerente y esté dispuesta a cantar todas las noches canciones tranquilas y seductoras. Y que también esté dispuesta a ofrecer sus servicios a nuestro negocio de la manera en que se precise... ¿me comprendes?
Y ya que dices que me debo a mi público, voy a ver quién ha venido esta noche a nuestro local...
Se levantó dispuesta a salir de su despacho.
-Como quieras dijo mientras recogia todos los datos de su carpeta.
Daphne parecia tener un buen follon alli disperso y espero a ver si Tatiana esperaba a que acabara para salir de su despacho.
Perdon! No me acrodaba que me tocaba a mi