Con cuidado desciendo sobre la azotea.
Cuando Llama dice que hay que entrar entro en el jet decidido, he venido hasta aquí para enterarme de lo que está pasando, así que mejor ser directos.
¿Alguien puede decirme a que clase de fiesta he sido invitado?
El señor Castle nos invita a repeler una invasión alienígena... la verdad es que no estoy muy contento del marco en el que se desarrolla todo este problema, aun no sé porqué tienen que involucrar a nuestro planeta en una disputa familiar. - comento explicando vagamente lo que sucede - El caso es que no se puede depender de las fuerzas de los gobiernos para defendernos, y también parece que algunos super-malotes se han apuntado al otro bando.
-El señor Llama está en lo cierto en algunos puntos. Primero, el señor Castle no ha organizado nada, ha sido mi organización y yo como su representante les he escogido a ustedes. Y los gobiernos, algunos al menos, sí han colaborado. No crea que mi organización se sustenta del aire. De resto es tal y como ha explicado el señor Llama.
-¿Ah sí? ¿En una película? ¿Y salió bien? -pregunta el dios del Trueno. Luego se vuelve hacia Shauna- ¿Tu humana tiene algo que decir? ¿También han contactado contigo?
-Que organizacion es la suya, Sr.Smith?
Aquel nombre era obviamente falso pero quizas el nombre de la organizacion le sonara mas a Rachel.
- Si, pero claro, era una película... Independence Day creo que se llamaba, podéis verla si queréis... - Luego miré a Shauna, esperando su respuesta a Thor.
Shauna devolvió la mirada con el ceño fruncido.
-No soy humana de nadie -dijo con etiqueta, aunque con evidente molestia- Los superheroes desconfían unos de otros? Deberían blanquear el asunto entonces y se les pasaría enseguida. Se sentirían necesitados, o como minimo sentirían lo que realmente pasa: que su hogar esta a punto de ser invadido y conquistado. No creo que nos perjudique en absoluto, el enemigo sabe que la tierra ya esta prevenida de su asalto, los unicos que estamos en desventaja manteniendo a la gente ciega. Habría caos entre la gente corriente? Quizá un poco, pero todo depende de como se les anuncie, y de como se manejen los temas de seguridad normal. Pero atraería a, probablemente, muchisimos heroes y mutantes anónimos y no tan anonimos. Esta para pensarselo.
Devolvió la mirada, analítica.
-No me han contactado. Había alguien que quería hablar conmigo pero nunca llegué a tener la audiencia, mi perfil es de lo mas bajo que puedas imaginar. No soy una heroína. -golpeó levemente el bastón en el suelo, indicando la pierna mala, y continuó diligentemente- Y lo que se hacer no es bonito ni lanza colores o fosforines como los heroes de las historietas o las películas, pero es efectivo si me obligan a usarlo. Creo que es todo aqui. Creo que todos tenemos asuntos que atender luego de lo que se ha puesto en claro aqui.
Hmm, un avión. Esto puede ser bueno y malo a la vez. No estoy seguro de si se puede trasladar a un prisionero por aire así por las buenas, sin orden judicial, por lo que probablemente sea algún asunto sucio.
Pero esto es bueno, muy bueno. En cuanto estén dentro del avión, no tengo más que esperar a que estén a suficiente altura. Entonces me cepillo los motores y listo, a sentarse con unas palomitas. Tendré que acercarme a los escombros para rematar a Drill, si es que sobrevive, pero no será una pelea tan dura como de costumbre. Tendré que tener mucho cuidado con donde cae el avión, eso sí. No quiero que mueran más inocentes por mi culpa.
Aún así, aún no estoy seguro de que va todo esto. Así pues, me situo a una distancia prudencial y espero.
¿Usted me ha elegido a mi?- No había visto a aquel hombre en mi vida, así que dudaba que me hubiese elegido para nada, más bien parecía un "a mi amigo el hombre de hierro tambíen le gusta meterse en estos fregaos ¿puede venir?" dicho por Stardust que otra cosa.- ¿Y qué es eso tan maravilloso que ha visto en nosotros para seleccionarnos? Su amigo Castle parecía tener una opinión bastante diferente de nosotros.
-Je,je. En realidad no querian esperarte. Lo han hecho porque me he puesto pesada -dijo con un gesto divertido. Despues su gesto cambio al volver a escuchar el nombre de Castle. -Dejad ya a ese pesado! Tenemos que salvar al mundo!
Monto en el jet. - Vamos a salvar la Tierra y luego ya veremos... - replico.
Ya era hora , estaba pensando en que con lo que habéis tardado solo para que venga tuercas los aliens podrían haber conquistado nueva york .
Comentó con claro sintoma de aburrimiento en el chico con traje negro y rojo que tenía ambas manos puestas apoyando la mandibula en ellas y por ende la cabeza . Se notaba claramente que si por él hubiera sido ya habrían partido , tanta conversación sobre ese tal castle al cual ni siquiera conocía no le llamaba la atención .
Este hombre enfundado en una armadura de hierro ¿es el mismo al que conocimos Ángel y yo la primera noche que nos vimos?
No te olvides que el tipo al que atacaste la primera noche que saliste con la armadura está ahí con Loren xDD
Al ver como aterrizaba ante nosotros el tal Steven Meyers se erizaron todas y cada una de las plumas de mis alas. Estaba segura de que él no me reconocería pero yo le reconocí a la perfección y no pude poner buena cara. Me crucé de brazos y me quedé en la azotea mirando hacia el interior del jet, tenía muy mala cara: Si ya me iba a costar compartir un espacio tan estrecho con aquella barbie ahora me iba a ser imposible al lado de aquel hatajo de metal.
Abrí la boca para quejarme pero las palabras del hombre de azul y rojo hicieron que me tragara lo que tenía que decir, me di cuenta en ese momento que no sabía como se llamaba pero no me importó, total no me interesaba relacionarme. Miré de reojo hacia Ángel y resoplé tragándome mi orgullo encaminándome hacia el transporte haciéndole una señal con la mano para que me siguiera. Al menos parecía que Meyers no se acordaba de lo que había pasado aquella vez, no tenía sentido prestarle atención en ese momento, había cosas más importantes.
Entré al Jet, me crucé de brazos y resoplé, iba a ser un "largo camino".
Me asombraba la facilidad y la alegría con la que algunos se dirigían a un destino incierto. Una vez dentro del jet decidí no sentarme y permanecer en pie. No sabía si los asientos estaban reforzados para soportar el peso de una armadura de combate y preferí no tentar a la suerte y evitar terminar rodando por el suelo.
El tipo con las enormes alas de ángel entró segundos después, con extraños aliados me había encontrado en aquella azotea para defender la tierra de esa supuesta amenzada extraterreste.
Y bien señor Smith. ¿Donde se supone que están los aliens? ¿En el area 54?