Partida Rol por web

Poco a poco llegáis a la casa, a la que veis entre la niebla y la oscuridad de la noche. Probablemente hayáis llegado tarde a los licores.

Otelo aguarda en la puerta tan feliz como siempre, jadeando y con la lengua fuera.

- Le juro que le guardaré el secreto. Es más, dejaré que usted introduzca el tema cuando desee y yo le daré soporte. Sobre el tema de decidir cuando terminar... No lo acabo de entender. ¿Qué espera encontrar allí? Me parece que sabe más de lo que dice y no me parece una buena forma de iniciar una investigación de mayor envergadura. Si ahora nos oculta detalles, me da miedo pensar en las cosas que se puede callar por oscuros intereses sobre esa misteriosa expedición. Por el bien de todos sería preferible que no se callara ningún dato. A veces un dato que a usted le puede parecer irrelevante puede tener una importancia vital desde un aspecto arqueológico, etnográfico o cualquier otro campo que usted desconozca.

En  cualquier caso, en cuanto lleguemos a la mansión y vea a Otelo, lo acariciaré y lo agarraré en brazos.

- Buen chico, buen chico. Este es mi Otelo. Ahora, amigo mio, a disfrutar del descanso de los guerreros. Y llevaré mi perro a descansar en la habitación.

Hago una tirada para ver si Khaled tiene alguna herida visible o la ropa manchada de sangre en algún lugar centrándome en los puños de la camisa.

Con aire contrariado se acercará a Arthur dejando unos escasos centrimetos de distancia.

Nunca he estado en ese lugar y si he dicho que yo decidire cuando terminaremos es, por si la situación se pone peligrosa o hay algo ahi dentro que pueda perjudicar a los intereses del sr. Stahl

Aqui para un segundo

Y como usted bien ha dicho lo que a alguien le puede parecer irrelevante puede tener una importancia vital, asi que le aconsejo que si quiere seguir vivo, cuando yo guie una expedicion y diga corra, usted preguntara ¿hacia donde? y cuando diga al suelo usted se tirará al suelo sin pensarselo ¿Lo ha entendido?
Y nunca más vuelva a poner en duda mi palabra, nunca más.

Aqui parará unos segundos mirandote fijamente mientras observas que poco a poco sus facciones se relajan.

Lo observas bien, te fijas en las mangas de la camisa parace ser que no tiene ni rastro de sangre, ni de ningún rasguño o ropa rota. De hecho estás casi seguro de que hacía un rato estaba en la casa porque lleva la misma ropa y en un estado perfecto, no como si hubiera estado mucho tiempo caminando por el bosque.

No voy a discutir más sobre el tema, señor. Estoy seguro que entre caballeros no hace falta decir lo obvio.

Le doy la mano a Khaled y le dejo que me guíe hasta la sala de los licores.

Cuando llegáis a la casa, antes de iros cada uno a vuestra habitación Roger se acerca.

- Bienvenidos, supongo que tendrán hambre después del paseo. Con cara de asco os mira. - Dios santo, dónde se han metido? Huelen como si vinieran del infierno. Después de asearse les agradecería que fueran al estudio. Allí está el señor Gallagher estudiando un libro, creo que deberían ir a ayudarle con su tarea, ambos. Así me lo acaba de pedir el señor Stahl. 

Tras esto se va.

Me aseo, me cambio de ropa por una más de estar por casa (rollo batín y zapatillas de estar por casa de cuero, con pantalón y camisa) y me dispongo a volver al estudio.