Kylian emprendió la carrera en dirección al combate. Por mucho que sus cortas patas se movieran rápido, la pesada armadura le retrasaba y no logró llegar a tiempo de darle un bastonazo al cultista, pero al menos quedaría cerca de la batalla para dificultar la huída del zebomita. Si es que quisiera huír...
- ¡Ríndete, estás perdido! - Le gritó convencida de sus palabras.
Corro en diagonal todo lo que pueda y lo más cerca posible de Ulfgar.
Presenciar la angustia de la kender hace que se me encoja el corazón. Mi magia le confiere una robustez de la que su cuerpo carece y está viviendo un tiempo prestado que se desvanecerá en cuanto lo haga el conjuro de polimorfía.
A mis pies, Terciopelo agoniza, pero no puedo atenderle. No todavía. No mientras su compinche aún respire y siga siendo una amenaza. Le di la oportunidad de rendirse pero la rechazó, de modo que le apunto con mi varita y pronuncio la palabra que desencadena una nueva andanada de proyectiles mágicos. Espero que sobreviva, porque necesitamos tantos prisioneros como podamos llevarle al emperador si queremos ganarnos su favor.
—Kylian, la hidra es Bugambilia, no dejes que muera —me gustaría que mi voz hubiera sonado más autoritaria, pero en realidad lo que sale de mis labios es una súplica.
Yo no puedo salvarlos a todos sin la ayuda de la curandera goblin y tener que reconocerlo, aunque solo sea a mí mismo, resulta descorazonador. Yo necesito a la goblin...
Motivo: Proyectil mágico
Tirada: 3d4
Resultado: 6(+3)=9 [1, 1, 4]
Mientras Kylian corre hacia la batalla, los proyectiles disparados por la varita de Ailaserenth terminan de derribar al cultista, ya muy malherido por las dentelladas y pisotones de la hidra.
La propia Bugambilia parece gravemente herida y casi es un milagro que siga en pie en medio de este campo de muerte.
Miréis donde miréis, podéis ver cadáveres abrasados, asaeteados o aplastados. Ahora que la niebla se ha disipado, es incluso posible ver el cuerpo destrozado de Flechas de Muerte tras caer desde lo alto. A quien no se ve por ninguna parte es a Terciopelo.
NOTA: Kylian está en un área de "silencio" conjurada por ella misma. Si quiere lanzar un conjuro, debe superar su propio TS o invertir una acción estándar en disiparlo.
NOTA 2: Aunque el combate ha terminado, seguimos posteando por turnos porque hay contadores de vida corriendo.
Ailas (21) → 37/37 [protección vs flechas8, armadura de mago11, fuerza de toro16, ver lo invisible22]
Bugambilia (17) → 11/66 [soportar los elementos10, polimorfar13]
Kylian (14) → 29/69 [fuerza de toro12, niebla de obscurecimiento17]
8: Protección contra las flechas (NL 11) [RD 10/magia hasta absorber 100 puntos de daño o durante algo menos de 11 horas]
10: Soportar los elementos [permanece confortable entre -10ºC y 60ºC; durante algo menos de 24 h]
11: Armadura de mago (NL 11) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 11 horas]
12: Fuerza de toro (NL 10) [+4 de mejora a FUE, durante algo menos de 10 min]
13: Polimorfar (NL 11) [en una hidra de 11 cabezas, durante algo menos de 11 min]
15: Escudo de entropía (NL 8) [ocultación parcial vs ataques a distancia; durante algo menos de 8 min]
16: Fuerza de toro (NL 11) [+4 de mejora a FUE, durante algo menos de 11 min]
20: Silencio (NL 10) [en un radio de 20' del enmascarado si falla un TS de Vol. (CD 15), durante 10 min]
21: Invisibilidad (NL 3) [durante algo menos de 3 minutos o hasta que ataque]
22: Ver lo invisible (NL 11) [durante algo menos de 110 minutos]
Me arrodillo junto a Terciopelo y le tomo el pulso.
No respira.
Levanto la vista y compruebo con alivio que Kylian ha corrido hacia Ulfgar y Bugambilia. Solo puedo esperar que no les deje morir a ellos como dejó morir a Flechas de Muerte, porque me temo que a mí no me queda más magia curativa para salvarlos.
Vuelvo a mirar al amoratado espía de la Legión de Acero. Sus esperanzas de sobrevivir sin la intervención de la goblin son muy escasas y me temo que ella no llegará a tiempo para reanimarlo. Su vida está una vez más en mis manos y no estoy dispuesto a cargar con el peso de su muerte sobre mi conciencia. Los cadáveres de Shrentak todavía me persiguen cada vez que cierro los ojos.
Aplico mis labios a sus labios para insuflar aire a sus pulmones y golpeo con mis fuerzas mágicamente acrecentadas su pecho aplastado de forma rítmica y enérgica.
«Vive, maldito traidor. No vas a escapar de la justicia muriéndote.»
Motivo: Primeros auxilios a Terciopelo
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 17 (Exito) [17]
¡Vamos esos daditos buenos! ^^
No es una RCP para mi amigo Terciopelo, es que los elfos son gays y este a lo mejor es un poco necrófilo también. :P
- ¡Eso intento! - Gritó enfurecida y llena de rabia. - ¡Pero estás absurdas patas de goblin no me dejan avanzar más rápido!
El combate había empezado bien, pese a la emboscada. Había podido probar los nuevos dones que Gilean le había otorgado y habían funcionado de maravilla. Sin embargo, el no portar consigo su símbolo sagrado, le impedía acceder a muchos de esos dones. Los más poderosos de hecho...
- No debí dejar el medallón en manos de nadie. - Se recriminó a si mismo. - No sin tener uno de repuesto. Pero... ¿quién iba a pensar que nos iban a traicionar? ¿Habrá sido el condenado Emperador? Quiere que la fortaleza le salga gratis, el muy facineroso...
Es entonces cuando llegó junto a Ulfgar. Se arrodilló junto a él y trató de verificar si seguía con vida. No son antes imponer sus manos sobre él tratando de sanarle.
- ¡Oh Gilean, estabiliza a mi amigo! ¡Te lo imploró! - Oró con los ojos humedecidos por las lágrimas.
Motivo: Sanar
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+5)=7 [2]
Motivo: VOL (silencio)
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 18(+12)=30 (Exito) [18]
7 para tratar de descubrir si respira. Entiendo que basta para saber si respira... Creo que incluso podría saberse sin tirada.
Curo 1 pg con heridas menores (crear agua)
Bugambilia vio cómo unas diminutas bolas de luz alcanzaron al cultista en el pecho y lo tumbaron. Rugió triunfal alzando las patas delanteras. Ahora vendría la mejor parte. ¡Abandonarse a devorarlo, desmembrarlo y todas esas cosas horripilantes que su instinto de hidra le decía que hiciera! Pero se tomaría su tiempo.
Lo husmeó por encima con varias cabezas y empezó a morderle una pierna con cierto comedimiento. Ya no tenía tanta prisa por destrozarlo.
Perdón chicos, hoy llevo todo el día con fiebre y ni me acordaba que faltaba yo...
Cuando ya todo parecía perdido, Terciopelo comienza a boquear como un pez fuera del agua, a jadear y a toser hasta que finalmente la inconsciencia viene a poner fin a sus sufrimientos. No está ni mucho menos fuera de peligro, pero ahora es capaz de respirar por sí mismo y su corazón late de forma regular aunque algo acelerada.
Cuando el mago elfo levanta la cabeza, descubre con horror que la hidra ha comenzado a comerse por una pierna a su atacante, ahora indefenso. La pierna derecha del enmascarado cultista se encuentra ahora entre las fauces de Bugambilia y pierde sangre a chorros a través de la desgarrada arteria femoral.
Por su parte, Kylian se encuentra bastante ocupada con Ulfgar. En el área de silencio solicitada a su dios, a la sacerdotisa goblin le resulta imposible escuchar el corazón de su camarada enano a través de su ennegrecida coraza y no está del todo segura de que Gilean haya escuchado su plegaria para salvarle de la muerte.
Motivo: Daño Bugambilia
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+6)=11 [5]
Contra todo pronóstico, consigo estabilizar a Terciopelo. Su vida sigue pendiendo de un hilo, pero al menos le he dado tiempo a Kylian de venir a ocuparse de él una vez que termine de atender las heridas de Ulfgar.
—¿Cómo está nuestro amigo ena...? —comienzo a preguntar, pero me interrumpo al ver con auténtico espanto cómo Bugambilia ha comenzado a comerse a nuestro prisionero—. ¡No, no, no!
Me llevo las manos a la cabeza y mis gemidos son de pura incredulidad y desesperación. Ahora al único reo que tenemos para presentar ante el emperador es al espía de la Legión. ¡Tantos esfuerzos y tantos sacrificios para nada! Teníamos dos asaltantes que entregar a la inquisición y ahora... ¡Para esto lo mismo hubiera dado que los hubiera incinerado a todos en los primeros compases de la emboscada!
Siento ganas de llorar de pura frustración y de arrebatarle a la kender esta forma descomunal, pero en el fondo sé que es culpa mía. Yo se la di para salvarle la vida...
No acostumbro a perder los papeles pero siento que estoy muy cerca de hacerlo.
Impongo mis manos sobre el inconsciente Terciopelo y recito las palabras de mi conjuro de teleportar. Si le dejo aquí, van a acabar matándolo también con lo que me ha costado que sobreviviera.
Motivo: Teleportar a mis aposentos en Mem
Tirada: 1d100
Dificultad: 97-
Resultado: 44 (Exito) [44]
Motivo: Curar heridas leves
Tirada: 1d8
Resultado: 1(+1)=2 [1]
Me llevo a Terciopelo a mí torreón para ponerlo en custodia de la guardia silvanesti hasta que llegue el emperador. Por supuesto, desarmado, engrilletado y amordazado, aunque antes le daré una poción de "curar heridas leves" del fondo común.
No publicitaré su presencia en la fortaleza. No quiero a los jinetes de dragón curioseando y ni Agapanto, no Klunurig han entrado nunca en el torreón suroeste y no quiero que empiecen ahora "casualmente".
Kylian se concentró unos instantes para hacer que la zona de silencio desapareciera. Lo que realmente necesitaba ahora era sentir el corazón de Ulfgar latiendo.
La goblin volvió a fijarse en el enano o más bien en su pecho. Si se hinchaba quería decir que estaba respirando. Si no pasaba eso quería decir que el ingeniero barbudo ya no estaba entre ellos.
- ¡Vamos despierta! - Le imploró. - ¡No puede ser que hayas muerto!
Motivo: Sanar
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+5)=7 [2]
Bugambilia nunca pensó que alguna vez se comería a alguien, pero con su nueva forma todo era muy diferente. Ojalá durase para siempre. Nadie volvería a ningunearla, y si lo hacían, ¡también se lo comería!
Alcanzó a ver al señor mago alterarse por algo y desvanecerse en el aire un instante después. Otra cabeza observó con cierta preocupación a Kylian con el señor enano. No parecía moverse. Posiblemente el enano estaba muerto. Pero lo peor de todo vino después, cuando los ojos de otra cabeza localizaron el cuerpo de su mentora.
Si corazón de hidra dio un vuelco. Agarrando por la pierna al cultista, que colgaba boca abajo, corrió hasta el borde del desnivel para ver mejor a Flechas de Muerte.
Con un rugido de rabia y dejándose llevar por la cólera terminó de desmembrar lo que había empezado siendo su almuerzo. Había bajado la guardia. Había sido estúpida. Ahora el dolor de la pérdida había vuelto para inundarle el pecho.
Miréis donde miréis, solo veis muerte.
Kylian pide a su dios que acabe con el inquietante silencio, pero Ulfgar sigue allí tendido, inmóvil y abrasado. La sacerdotisa de Gilean pelea con los correajes de la pesada armadura completa del enano para quitarle ese peso de encima y comprobar si respira.
A Kylian le lleva un buen rato, primero porque no está acostumbrada a las complicadas ataduras y segundo porque hacerlo con lágrimas en los ojos no resulta nada fácil. Termina tirando de daga para cortar las correas y suspira aliviada al comprobar que el peludo y canoso pecho de Ulfgar sube y baja lentamente. Parece plácidamente dormido, pero tardará en despertar sin ayuda divina.
Para entonces, la descontrolada hidra ha reducido al último cultista a poco más que despojos sanguinolentos e irreconocibles. Pero eso no le ha devuelto, ni le devolverá a Flechas de Muerte.
Ailaserenth se ha marchado, dejando en manos de Kylian y Bugambilia qué hacer con el clérigo enano y los asaltantes muertos.
Se acabó el combate por turnos. Último turno de Kylian y Bugambilia para declarar lo que vayan a hacer y hacemos salto temporal.
- ¡Gracias Gilean por salvar a mi amigo! - Imploró la sacerdotisa mientras regaba en lágrimas su ahora desnudo pecho. - ¡Sana sus heridas! ¡Te lo imploro! - Rezó a su dios patrón.
Inmediatamente las heridas del enano comenzaron a sanar. Con eso seguramente despertaría de su descanso. Estaría dolorido y al borde de desfallecer, pero lo cierto era que prácticamente había agotado sus reservas mágicas.
- ¿Estás bien? - Le preguntó. - Ulfgar, ¿me oyes? Flechas ha muerto, pero puedo traerla de vuelta. Sólo necesito rezar a Gilean y un diamante de valioso... - Se secó las lágrimas con el dorso de la mano y se limpió la nariz con la manga. - Creo que Ailas nos ha traicionado. Creo que ha huído llevándose al legionario... - Sollozó. - Tenemos que ponernos en marcha, registrar los cadáveres y ver si alguien sigue con vida. Habrá que interrogarlos. Y si no los interrogamos vivos, lo haremos muertos...
Motivo: Curar heridas leves (protección contra el mal)
Tirada: 1d8
Resultado: 2(+5)=7 [2]
Bugambilia regresó tristemente junto a Kylian y Ulfgar. El señor enano estaba vivo al final. Los dioses ya debían estar saciados de sangre. Quiso alegrarse pero no pudo. Su mentora ya no estaba. ¿Por qué habían salvado al enano, que era viejo, y no a Flecha, que era más joven y tenía aún mucho que hacer...?
Se sentó pesadamente junto a ellos y empezó a sollozar roncamente con sus once cabezas cabizbajas.
Supongo que en cuanto Bugambilia vuelva a ser kender se pueden echar los cuerpos de Enrielle y el del cultista al que interrogará Kylian muerto sobre el xñcaballo de Terciopelo y a andar de vuelta a casa.
─Buen Reorx, qué desastre tan terrible... ─masculló Ulfgar en enano al conseguir incorporarse hasta quedar sentado a pesar de sus heridas, la coraza y su propio nada desdeñable peso corporal.
Sin llegar a ver demasiado, sí pudo ver lo que quedaba del zeboimita tras haberle desmembrado una hidra, hidra que ahora estaba ¿sollozando? juento a ellos, como un perro llorando la pérdida de su amo. Y esa era Bugambilia, poliformada en hidra de once cabezas. Nada menos. Al parecer sus instintos se habían impuesto a su mente kender, pero ahora, acabado el combate, había dejado de ser agresiva y peligrosa, supuestamente, hacia el grupo.
─Hubiera sido más fácil interrogar al zeboimita si estuviera más entero... pero supongo que yo mismo no he sido capaz de vencer al enemigo con más sutilidad ─dijo haciendo mención del otro cultista, a quien había abierto la cabeza de un martillazo.
Tocaba revisar los cuerpos, sí, por si quedaba alguno de ellos todavía con vida. Si era el caso bien podían desarmarlo, maniatarlo y transportarlo a un lugar seguro donde interrogarlo. Un hombre vivo podía dar muchas más respuestas que un hombre muerto, aunque se dispusiera de los hechizos adecuados.
─Imagino que la forma de hidra no durará mucho más, Bugambilia ─dijo en voz alta, para que la criatura reptiliana le pudiera escuchar─, y puedes estar segura que haremos todo lo que está en nuestra mano para que Flechas de Muerte vuelva con nosotros.
Aunque él mismo no era capaz, estaba seguro que Kylian sí podía. Y si era necesario él mismo empeñaría su acero para conseguir la piedra preciosa que necesitaba.
─Os curaré todo lo que pueda antes de continuar y luego habría que regresar. Podemos utilizar el caballo del legionario... y también burros de carga de la bolsa de Flechas.
Como siempre, había muchas cosas que hacer: revisar a los caídos, estabilizar a los inconscientes, registrar a los cadáveres e inconscientes, enterrar a los muertos y un largo camino de vuelta a la ciudad. Luego tocaría conseguir la gema, devolver a Flechas de entre los muertos, proceder con el interrogatorio e informar largo y tendido. Pero al menos la tarea principal, conseguir una nueva fuente de información ya la habían conseguido. Con un alto, altísimo precio pagado, eso sí.
Para la curación me quedan 3 hechizos de 3º (9d8+24), 5 de 2º (10d8+40) y 5 de 1º (5d8+25). Los repartiría entre los que quedan y, si hace falta, con los inconscientes, para asegurarme de que no se mueran (no sé si queda alguno que cumpla con esos requisitos).
Por más que los buscáis, no parece que haya supervivientes entre los asaltantes. El único ser vivo al alcance de la vista, a parte de vosotros mismos, es un caballo atado no muy lejos de donde yace el cadáver de Flechas de Muerte.
Aun así, os tomáis vuestro tiempo para desvalijar a vuestros enemigos tratando de hallar alguna prueba o pista que indique quiénes eran y por qué os atacaron.
Del enmascarado más tenaz lo único que queda es su torso. Bugambilia ha hecho un admirable trabajo desmembrándole y masticándole a conciencia de modo que sus rasgos resultan irreconocibles. Bajo su túnica, polvorienta y destrozada, descubrís una coraza de color azul turquesa con el espaldar decorado como el caparazón de una tortuga.
El segundo enmascarado, aquel al que Ulfgar aplastó la cabeza con su poderoso martillo de guerra, también es inidentificable. Aún así, su cuerpo se encuentra mucho más entero que el de su compañero y no os cuesta reconocer colgando del pecho un medallón sagrado con la forma de una tortuga marina. Un símbolo que Kylian conoce bien y que se niega a tocar, recordando que eso estuvo a punto de costarle la vida en Belleria la primera vez que se cruzó en el camino de uno de estos cultistas. Bajo su túnica lleva una coraza similar a la de su compañero y, al cinturón, un elaborado puñal ondulado como las olas del mar.
Los cinco enmascarados se encuentran con diversos daños. Asaeteados algunos, abrasados otros, descoyuntados por los tentáculos conjurados por Kylian... Por su tamaño y complexión, todos parecen humanos, aunque no es fácil afirmarlo con rotundidad en algunos casos. Escogéis a uno que por lo menos conserva sus facciones con la esperanza de que al menos alguien pueda reconocerle y le montáis en el caballo junto con el cuerpo inerte de Flechas de Muerte.
Kylian afirma que el animal trajo a Terciopelo hasta aquí, pero no lo veis por ninguna parte por más que le llamáis.
Estáis a punto de reemprender camino con el cadáver de vuestra amiga legionaria cuando Bugambilia pierde su forma de hidra. Por fortuna, la previsión de Ulfgar y la intercesión de su dios han evitado que cayese fulminada en el acto.
Motivo: Curar heridas graves a Ulfgar
Tirada: 3d8
Resultado: 10(+8)=18 [4, 4, 2]
Motivo: Curar heridas graves a Bugambilia
Tirada: 3d8
Resultado: 9(+8)=17 [2, 1, 6]
Motivo: Curar heridas graves a Ulfgar
Tirada: 3d8
Resultado: 14(+8)=22 [7, 3, 4]
Motivo: Curar heridas moderadas a Kylian
Tirada: 2d8
Resultado: 14(+8)=22 [8, 6]
Motivo: Curar heridas moderadas a Ulfgar
Tirada: 2d8
Resultado: 13(+8)=21 [8, 5]
Motivo: Curar heridas moderadas a Bugambilia
Tirada: 2d8
Resultado: 10(+8)=18 [8, 2]
Motivo: Curar heridas moderadas a Ulfgar
Tirada: 2d8
Resultado: 9(+8)=17 [8, 1]
Motivo: Curar heridas leves a Bugambilia
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+5)=12 [7]
Motivo: Curar heridas leves a Kylian
Tirada: 1d8
Resultado: 3(+5)=8 [3]
Motivo: Curar heridas leves a Ulfgar
Tirada: 1d8
Resultado: 3(+5)=8 [3]
Motivo: Curar heridas leves a Ulfgar
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+5)=11 [6]
NOTA: Los conjuros de Dominio no puede ser cambiados por conjuros espontáneos de "curar/infligir heridas". Para lanzar los hechizos he seguido el criterio del conjuro más poderoso disponible para aquel al que le quede menor % de vida.
Ulfgar → 102/109
Bugambilia (17) → 23/31 [soportar los elementos]
Kylian (14) → 59/69
NOTA 2:
Botín de cultista 1: coraza dgc (sin identificar) [30 lb]
Botín de cultista 2: coraza dgc [30 lb] y puñal dgc [1 lb]
Botín de los arqueros: 5x armadura de cuero tachonado dgc (sin identificar) [20 lb], 5x arco largo dgc [3 lb], 5x alfanje dgc [3 lb]