Drang se considera el líder de la compañía. Es bocazas y dominante, aprovechando cada momento para exponer la gloria de Bane*. Drang cree que las anteriores partidas de guerra que han sido enviadas a esta búsqueda fracasaron debido a la falta de fe y que Bane ha ordenado que él sea el impulso para el ascenso del Clan.
Drang Aggou ha pasado toda su vida al servicio de Bane y de la Mano Negra. De joven su devoción ciega y fanatismo hacían cabrear hasta al mas pío de los clérigos que por poco acaban con su vida en mutliples ocasiones solo para que se callase de una vez. Por suerte suya, la escasez de sanadores fuerza a los Grandes Jefes de Guerra a tragarse con patatas a este tipo de gentuza para que les ayuden con su lucha contra los elfos.
El hobgoblin cree realmente que la misión está maldita y abocada al fracaso a menos que todos sus compañeros acepten a Bane como su señor. Él se encargará de atribuir cualquier fallo, por mínimo que sea, a la falta de fe en su dios y cualquier éxito o cosa buena en designios y bendiciones de Bane.
Raza: Hobgoblin
Clase: Clérigo de la Guerra
Drang, momentos antes de perder su anterior grupo (explotaron). Al menos él intentó detenerlos.
*Bane es el Dios Maligno de la Tiranía, de gente mala malosa.
Babo, aparte de ser un suave conquistador, es un cleptómano. La mayoría del tiempo cuando Babo roba lo hace sin darse cuenta realmente. Cada vez que haya un descanso corto o largo o un parón en la acción, Babo se dará cuenta que lleva algo que no es suyo y que no tiene recuerdo de haber adquirido.
En esos momentos se hará una tirada para determinar lo que se ha encontrado en sus bolsillos (se tira de nuevo si se repite).
1 Una taza de limosna de un pobre con 2 piezas de cobre 2 Una moneda de oro con marcas de dientes 3 La ropa interior de Lodo Cabezablanda 4 Un pequeño tótem de la suerte orco de madera con 13 lascas en un lado 5 Un puñado de canicas con alguna sustancia pegajosa 6 Un grillete con una mano arrugada aún colgando 7 Una pequeña bolsa de piel llena de caca de Remorhaz (nunca se enfría y huele fatal) 8 Una pieza de carne podrida con un tenedor aún clavado 9 El símbolo sagrado de Drang Aggou 10 Un sujetador de una mujer orco de la talla 52DD 11 A Mongui, completamente confundido 12 Una vela completamente consumida por los dos lados 13 El pelador de patatas de Panza Palocorto 14 Una moneda de plata colgando de una cuerda 15 Un pote de cristal lleno de gusanos 16 Una suela de zapato mordisqueada 17 Una camisa de suave seda de color morado doblada a la perfección y limpia 18 Un pergamino arrugado con el nombro de todos los del equipo 19 Una pipa de confección enana con tabaco, lista para fumar 20 Una botella medio vacía de Whiskey Orco Gritón(tm) Como la mayoría de los ladrones, Babo decidió ese rumbo en su carrera por el dinero fácil y las bebitas goblins que se veían atraídas por la riqueza. Por eso durante el transcurso de tantos años dedicados a ello, se convirtió en una máquina del robo, aún sin darse cuenta.
Babo no tiene ningún interés en la misión del Jefe de Guerra, pero joder es una gran oportunidad para hacerse notar, conseguir algunas cicatrices de esas que vuelven locas a las goblins de grandes culos.
Raza: Goblin
Clase: Pícaro
Babo tramando algo completamente malvado, justo antes de olvidarse
Mongui no tiene claro de que va todo esto de la misión y de su importancia. A él siempre le dicen "tu ves para allá" o "ahora vamos hacia allí" pero siempre acaba siendo lo mismo. Un lugar es tan bueno como el otro. Esta vez ha oído algo acerca de un Dragón pero se distrajo y luego se pusieron a hablar de una Corona y no se enteró de la mitad.
Será mejor ir con ellos y seguirles el rollo como si me hubiera enterado de algo.
Mongui no recuerda demasiado su pasado, aunque le suena que vivía en una aldea llena de kóbolds adoradores de algún dragon. Mongui en general no recuerda mas de 3 o 4 días en el pasado, eso le permite redescubrir cada vez las maravillas y los peligros del mundo.
La curiosidad de Mongui es grandisima, pero su capacidad de atención y retención es casi nula, mezclado con la falta total de miedo y temor lo convierte en un verdadero milagro que aún siga vivo. Obviamente no tiene ni idea que tiene un guardián secreto que lo considera su mascota y se encarga de mantenerlo a salvo.
Mongui no es capaz de hablar orco ni común, solo dracónico por lo que no se entera demasiado de las cosas, muchas veces se limita a rugir, gruñir e interpretar distintos ruidos para expresar sus emociones.
Raza: Kobold
Clase: Hechicero salvaje
Momentos después de incinerar su pequeño poblado (su idea era iluminar con una pequeña antorcha apagada)
Panza lleva tiempo esperando la oportunidad de probarse a sí mismo en combate real.
Su baja estatura comparada con el resto de los suyos lo han relegado siempre a tareas completamente simples y aburridas y le ha sido arrebatada cualquier oportunidad de demostrar sus habilidades.El osgo estaba apunto de quebrarse y perder la cabeza hasta que Drang lo llamó para que lo acompañase a las Cuevas de Gargantatroll.
Finalmente tendrá su oportunidad de acudir a la llamada del deber, devolver la Corona al Gran Líder y demostrar al Clan de lo que es capaz.
La mayoría de los Osgos miden mas de 2 metros y aprovechan su embergadura para joder a las razas mas pequeñas, pero Panza Palocorto mide tan solo 1 metro y medio. Ha crecido desde pequeño siendo acosado por el resto de los suyos. Ahora de adulto detesta a cualquiera que sea mas alto que él y se pasa la vida demostrando que no le da miedo los que son mayores que él.
Panza ve en esta misión la oportunidad de demostrar a los Jefes y a él mismo que lo vale.
A Panza le pone de los nervios Lodo con su embergadura y su pasión por las ratas y alimañas varias. Sabe que el payaso ese es necesario para la misión pero no por ello le va a hacer el viaje agradable.
Es pelador de patatas oficial.
Raza: Osgo
Clase: Guerrero
Panza haciendo de niñera porque incluso las mujeres Osgo tienen mas oportunidades que él.
Lodo Cabezablanda es completamente ajeno e inadvertido en cuanto a los peligros de las Cuevas de Gargantatroll. Los guerreros del clan lo ven a él como un zoquete con una gran debilidad por el "ñaca ñaca élfico".
Ningún orco que se precie se preocupa nunca por pequeñas mascotas peludas, pero él es diferente. A Lodo nunca le ha importando lo que piensan de él, pero acepto a ir en esta misión solo para poder alejarse de la tribu y mantener a su pequeño y peludo ratón Bola-de-Sebo III a salvo del resto de guerreros. Dado que Lodo solo sabe contar hasta tres, la última docena de roedores que ha cuidado se llaman así.
Lodo es un poco tonto incluso para los bajos estándares orcos. Quizá es debido a que es felizmente inconsciente de como se tienen que comportar los orcos de bien y por ello ha obtenido su gran pasión por cuidar de los animalillos pequeños y peluditos. Normalmente a alguien así lo torturarían e incluso lo matarían pero su descomunal cuerpo le hace salvarse de este destino aún sin saberlo.
Lodo le tiene mucho aprecio a Mongui, tanto que lo llama Mongui-de-Sebo I, a la espera que muera y adoptar el siguiente. Mongui no tiene ni idea pero Lodo le ha salvado la vida incontables veces, ya que le gusta seguirlo sin que se de cuenta y vigilar que le vaya todo bien.
Raza: Orco
Clase: Bárbaro
Lodo quería pastel ¿dónde te sentaste lodo?