- Siempre tendrás que pedirme ayuda tú a mi, no lo olvides - te dice antes de guiñarte un ojo y desconectar la cámara. Cada vez es más atrevida con los guiños, con la manía de dejaros a solas a modo de empujón para que te atrevas a decirle algo. Pero eres paciente, o quizás te de miedo, aún no has encontrado el momento oportuno
- Hasta luego, Mei - se despide Kazou con una sonrisa. Una vez se marcha, alza la cabeza para mirarte - Me dijo que estuviste enferma este fin de semana, ¿no? ¿Estás mejor? - sonríe de forma encantadora con una preocupación sincera
-Ah... sí.-No es bueno comenzar nuestra conversación con una mentira, pero... ya no puedo decirle que no.-Solo tengo un poco de molestia en la garganta.-Y eso es cierto. Le sonrío, un poco ruborizada por su preocupación.-Tú has estado jugando, ¿no?
- Estuve haciendo muchas cosas. Quise quitarme el estudio antes que nada, y estuve cuidando de mi hermana. Jugar... no he podido realmente, no me ha dado tiempo. Y todavía no me ha llegado el envío de SAO... lástima que no juegues, con Mei será todo muy mecánico - dice, mientras se ríe, como si recordase algo - Cuando se pone con algo no hay quien la pare, seguro que enseguida me deja atrás.
-SAO...-Sí, decidido, mañana les contaré la verdad, pero a los dos en persona. Yo no dejaría a Kazou atrás, ¡ni hablar!-Espero que te llegue pronto, tiene que ser fantástico. Yo me dejé los deberes para el final, y así estoy... se nota quién es el más listo de los dos.-Añado riéndome.-¿Cómo está tu hermanita?
- Si no estoy detrás de ti para que trabajes, no haces nada, ¿eh? - te recrimina un poco - Mi hermana está bien, la he tenido que echar del cuarto para que me deje trabajar, pero ahora me estoy distrayendo yo mismo. No tengo remedio, así que estamos los dos por igual... ¿Quieres que colguemos?
-Bu-bueno.-No, la verdad es que no quiero colgar, pero si seguimos hablando lo voy a distraer. Además... lo veré mañana.-Si quieres sí. Nos vemos mañana, que te vaya bien.-Concluyo con una leve sonrisa.
Siempre tengo el miedo de no saber que decirle a Kazou, puede que le resulte aburrido hablar conmigo...
- No, no quiero - dice rápidamente, alterado - Pero no quiero que tengas problemas por mi culpa, que después puede venir tu hermano y hacerme responsable - se ríe de forma nerviosa, quizás imaginandose como una amenaza para Itsuki - Tú decides
Lo miro sonriendo, parece que sí quiere hablar conmigo. Si no fuera porque me está viendo, me pondría a agitar los brazos de la emoción.
-No te preocupes, no me distraes.-Digo mucho más relajada.-Ya casi he acabado, y la verdad... mi hermano no te va a hacer responsable, aunque es cierto que buscará una excusa para meterse conmigo.-Regreso a mis deberes, dudando de la respuesta de mi ejercicio.-¿El ejercicio de los trenes... da 64 km/h y 58 km/h?
Hablar de deberes... que divertido. Pero al menos puedo seguir hablando con él.
- Ehm... no, aunque la verdad no le he prestado mucha atención - dice, mientras se rasca la cabeza algo avergonzado, aunque se pone a corregirlo - Perdona, estoy siendo de lo más aburrido con esto, seguramente preferirías hacer otras cosas
-Pero si he sido yo la que te ha preguntado.-Le suelto con una risa.-No me aburres, dime... ¿de que te gustaría hablar?-Veo como lo corrige y me sobresalto levemente.-Espera, a lo mejor soy yo la que lo tiene mal. Ah no... nada de deberes, uhm... ¿qué vas a hacer el resto de la tarde?
- Pues voy a descansar, a leer un poco y a preparar la cena, que hoy me toca a mi - dice mientras se estira durante un ratito y bosteza de forma algo discreta - ¿Me cambias el puesto?
-¡Ah! ¡A mí también me toca!-Exclamo de repente, recordando mis tareas.-Además tengo que limpiar. Nos vemos mañana Kazou, ¡cuelgo!
Antes de colgar, espero a que se despida, para no dejarle con la palabra en la boca. Hoy desde luego, no voy a poder jugar más...
- Hasta mañana - se despide algo repentinamente por darte cuenta de las tareas que tienes que hacer
Terminas tus deberes de forma más o menos satisfactoria, nadie diría que has perdido el tiempo. Aunque te gustaría jugar más a SAO, pero no se moverá de tu dormitorio. Momo te sigue a saltitos, y se apoya durante unos momentos en la puerta de Itsuki, antes de correr hasta la cocina. Escuchas ruido dentro, supones que estará jugando a cualquier cosa
Tu padre sigue trabajando en el salón, y te diriges a la cocina para empezar a cocinar. Después, llega tu padre y te termina de ayudar con la preparación de la cena. Cenais y acabas agotada ante tanta tarea. Itsuki ha recogido, y tú bostezas de sueño de vez en cuando
Que día tan agotador, además teniendo en cuenta que durante el puente no he descansado nada y mañana también tengo que madrugar... Tengo que esperar al fin de semana para poder dormir en condiciones. Seguro que es temprano, pero ya no puedo más.
Ayudo a recoger, y tras un último bostezo increíblemente prolongado, me dispongo a irme a dormir.
-Buenas noches papá, buenas noches, Itsuki.-Digo medio somnolienta, mientras le doy un beso de buenas noches a cada uno.
Te despiden con besos y con un apretón en el hombro por parte de Itsuki.
Vas a descansar, por fin, y te sumerges en sueños donde por fin te sientes completa. Estás con tus amigos, sin medias verdades, por fin con Kazou como quisieras estar con él, con tu familia al completo. Son sueños hermosos de los que te alegras después de recordar.