Partida Rol por web

Viendo que esas cosas se percatan de nuestra presencia, me dispongo a disparar nuevamente hacia el monstruo que había atacado. Los balazos de Margaret me asustan al principio, y repentinamente reparo en que el ser que canturreaba saca una de esas armas con las que anteriormente nos atacaron. Sin pensarlo más, mi atención se dirige hacia él, así como el disparo.

William falló el tiro dirigido al líder. Un segundo ser salvó la distancia que separaba al grupo disponiéndose a atacar.

Paul tiene claro que, si bien son mortales como lo han demostrado sus compañeros, son huesos duros de roer. El no es un hombre de acción, y aunque lo fuera no tiene armas para defenderse, así que intenta esconderse para ayudar en caso de que sus compañeros estén en problemas. 

El bicho tiroteado alza el vuelo intentando huir frenéticamente del campo de batalla. El líder le grita algo en su extraño lenguaje zumbador pero el otro no le hace caso. Se ve que también hay casos de deserción entre los seres de otro mundo.

Vuelve a disparar al líder de las criaturas otra salva de cartuchos.

Harry salió de su escondite y bajó unos metros hasta encontrar refugio cerca de unas rocas. Ahora estaba mucho más cerca del monstruoso líder. Volvió a descargar su fiel escopeta. Esta vez la salva de postas sí que hizo bastante daño. La criatura gritó de rabia y dolor y dirigió su arma de niebla contra Harry.

Rooger, herido como estaba, se tiró al suelo y se escondió cerca de uno de los pilares de roca. Observaba el combate estupefacto ante la agresividad de sus "amigos".

-¡No, no, basta! -os gritó- ¡No quieren hacer daño a nadie, ya basta!

Pero sí que querían. El Líder disparó sobre Harry** y una de las criaturas se abalanzó en vuelo rasante sobre Margaret intentando herirla con sus afiladas pinzas. La mujer se agachó justo a tiempo y el monstruo pasó por encima de ella dispuesto a hacer otra pasada.

Margaret se agachó a tiempo para evitar el ataque de la criatura. Sin querer apretó el gatillo y una de las balas se perdió en la noche. Asomándose de nuevo desde su escondite, disparó sobre el monstruo que huía. No sea que fuera a llamar refuerzos. Otra bala impactó en su asqueroso cuerpo, pero el maldito no caía.

Los gritos de Rooger me parecen cortar la uniformidad de nuestros jadeos y el trepidar de nuestras armas. El ser que comienza a huir llama rápidamente mi atención y me dispongo a lanzar un disparo, pero es Margaret quien, librada de un reciente ataque, se me adelanta y abre fuego. Y al momento centro mi vista en el líder de los monstruos, dándome cuenta que se ha percatado de que Harry ha sido quien le ha atacado tan fuertemente. Sin pensarlo más, extiendo mi brazo en dirección al líder y abro fuego nuevamente.

Scott sacudió la cabeza intentando despejarse. La pelea había empezado y se había quedado inmóvil sin saber qué hacer. Hasta Margaret había demostrado más valentía que él. Sin dudarlo más, sacó su Mauser y acribilló a balazos al insecto volador que huía. La criatura cayó muerta con el cuerpo hecho un colador.

-¡Walter! ¡Coge el arma de niebla de estas porquerías y congélalos!

Scott había logrado eliminar al monstruo que huía. Pero con el ruido que estaban haciendo, los otros dos que se habían ido de patrulla no tardarían en volver. Corrió hacia donde estaba Harry enfrascado en la lucha contra el líder y le cogió el arma de niebla. Después apuntó al ser que sobrevolaba sobre Margaret.

-¡Déjala en paz, cerdo! -la nube de niebla salió disparada al cielo con escaso acierto. La criatura la esquivó sin dificultad.

El monstruo atacado se lanzó en picado sobre Walter intentando desgarrarle la cara con sus afiladas pinzas. El fotógrafo se lanzó al suelo en el último instante salvando el tipo.

Paul apretó sus puños mientras veía el combate que se desarrollaba a escasos metros. La única posible arma que podía utilizar era algún palo o piedra que encontrara tirado, no había mucho que pudiese hacer contra aquellos seres, y por el momento sus compañeros parecían defenderse bien. Lo único que atinó a hacer fue acercarse hacia donde estaban Rooger y el líder de las criaturas, siempre agachado e intentando pasar desapercibido, intentaría ayudar a Harry si fuera necesario.

Harry se echó hacia un lado y esquivó la maléfica niebla que quería consumirle el alma, rodó sobre sí mismo y se levantó con una gracia y una Destreza increíbles, pero lamentablemente, tanta vuelta le había desviado la mirilla interna y su descarga de postas no dio a la criatura.

Las postas de Harry hicieron saltar parte de la roca en forma de aguja tras la que se ocultaba la criatura. Esta volvió a contraatacar con su terrible arma. Harry, Paul y Walter, agrupados como estaban, recibieron el impacto.

Mientras, el otro ser, atacó a Margaret.

La criatura se abalanzó sobre Margaret y le clavó las garras profundamente en los hombros haciéndola sangrar. El insecto y la mujer cayeron al suelo enzarzados en una presa mortal. Con bastante presencia de ánimo, Margaret hundió la pistola en el abdomen del bicho y disparó dos veces a quemarropa. Las balas les hacían poco daño pero los tiros fueron suficientes como para que el insecto la soltara.

Walter seguía intentando acertar a algo con aquella maldita arma extraterrestre. El cono helado impactó de lleno sobre los dos insectos que estaban en el aire. El que había atacado a Margaret se congeló de inmediato y su carcasa cayó a plomo al suelo haciéndose añicos al chocar contra las rocas. El otro tenía congelada la mitad del cuerpo y parte de las alas, así que torpemente aterrizó cerca de Rooger.

Donde esta Hodges!!!- grito mientras apunto con mi arma -si no queda nadie vivo para responder nuestras preguntas, para que estamos haciendo todo esto?-

Sin pensar en nada mas, descargo una nueva rafaga de disparos contra la criatura que se hacerca a Rogger.

Volvió a descagar una lluvia de postas contra la criatura que parecía ser el líder de las bestias. Esta vez tuvo mayor fortuna y los pequeños perdigones impactaron en el cuerpo de la criatura, con un poco de suerte, sería su último disparo...

William disparó su automática contra el líder de los seres. La bala hirió nuevamente al monstruo. Pero fue Harry, sin preocuparse por la fría niebla que le envolvió el cuerpo congelándole la sangre el que acabó con su enemigo. Su escopeta rugió otra vez y la criatura, con la cabeza desecha, cayó muerta al suelo.

Paul, abrumado por la situación, no pudo moverse a tiempo para salir del cono de niebla, que volvió a envolverlo, congelándole los huesos.

Afortunadamente el cono de niebla solo rozó a Paul, así que los daños fueron menores. Rooger seguía escondido entre las rocas. Alzó las manos manchadas de sangre por detrás de su escondite.

-¡No disparen, no dispare más! ¡Me rindo, no disparen!

Pero la otra criatura no quería rendirse. Había visto a todos sus camaradas morir. Elevándose en el cielo, su extraña voz zumbadora volvió a resonar con fuerza. Una respuesta llegó entre las rocas. Los dos monstruos insectos que estaban de patrulla llegarían enseguida.