El coche comienza a acercarse a la Tierra todo marcha las mil maravillas, os instan a que os senteis y una vez en vuestros cómodos asientos (eee, no se supone que tendrian que haber echo una tirada....bue...¿que mas da?)esperais que todo salga bien hasta que...Edward se tira un sonoro puedo. Todos estáis apunto de morir como jodidos Judios pero el colmo del colmo es que Edward insiste en echarle la culpa a Ghost. Y de sta manera tan dicharachera comienza vuestro descenso a vuestro hogar.
Poco mas que contar salvo que el aterrizaje es perfecto y que abajo os esperan vuestros seres queridos....vuestros padre vamos.
Todo es zambombas y vítores en vuestro honor.
Veis que al fondo de la zona donde habéis aterrizado hay lo que parece un atril donde os esperan para que dediquéis un glorioso discurso.
Un tipo de camino al mismo os ametralla con todas las cosas de las cuales sois ahora privilegios, ya sabéis...no impuestos, vehículos y taller gratis, tarifa plana de 120GH de descarga, putas gratis...vamos lo normal en estos casos...
Una tipo os anuncia antes de que alguno puede hablar:
-Señoras...señores... con ustedes...los Chuck Norris del siglo 21!!
Muy bien la partida finalizara con un ultimo post por parte de cada uno contando el aterrizaje y por supuesto vuestros discurso y terminando con vuestra vida tras el incidente.
El grupo se dirigía hacia casa cuando un nuevo escape de gas hizo acto de presencia. Contra todo pronóstico, esta vez lograron conservar la conciencia a pesar de que la "Esencia de Edward" resultó ser mucho más tóxica y penetrante.
La nave tomó tierra cual suave jilguero se posa sobre la rama de un árbol. En cuanto Max se asomó por la puerta contempló un extraordinario jolgorio. Sorprendido se preguntó.
- Vaya... ¿Hemos regresado el día de fin de año?
Max bajó de la nave y se mezcló entre la muchedumbre. Los siguientes minutos fueron un descontrol. Max iba de aquí para allá, entre aquella gente que celebraba el fin de año en Mayo. Enseguida se contagió de la fiesta que se estaba celebrando y vitoreaba como uno más a los héroes que descendían de la nave. Nadie (ni siquiera él) parecía reparar en que él también había descendido de ella. La fiesta continuó y Max se vio empujado por todas partes hasta que finalmente, con un empujó especialemnte violento, terminó sobre una tarima donde se encontraban los demás.
- ¡Vaya! ¡Hola Ghost! ¡Edward! ¡Alba! Que alegría veros de nuevo.
Se hizo el silencio entre la multitud y un speaker los presentó como los héroes que habían salvado el mundo. De pronto, el showman llamó a Max para que pronunciara un discurso. Este se acercó al micrófono entre aplausos y gritos y de pronto se hizo el silencio. Max observó a la concurrencia que se encontraba en aquel lugar, expectante a las palabras del héroe.
Por la mente de Max atravesaron miles de palabras, experiencias, sensaciones, sueños que podría contarles a aquella gente, pero aquella experiencia había cambiado algo en la mente de Max. Sintió una nueva fuerza en su interior, una fuerza desconocida para él llamada iniciativa y personalidad. Se aclaró la gargante y pronunció la única palabra que dejaría constancia del cambio que había sufrido.
- NO -concluyó.
Y cedió el micrófono al siguiente.
La mente de Max sufrió un significativo cambio a partir de entonces, pues había aprendido a decir "no". A partir de entonces, ya no aceptaba todo lo que se le planteaba por obligación. Ahora aceptaba igualmente, pero de un modo voluntario.
Max se hizo muchimillonario inmediatamente después de pisar la Tierra, sin embargo su vida no cambió en absoluto. Tenía una inmensa cantidad de vehículos en algún garaje de Estados Unidos, pero seguía desplazándose en su camión de la basura. Mantuvo su trabajo como artificiero al que acudía religiosamente de lunes a viernes. El único desembolso importante que hizo fue una gigantesca donación a una asociacion en favor de las víctimas del priopismo. "Va por ti, Ghost" declaró a un importante periódico internacional.
El viaje de vuelta me hace sentir peor de lo que me he sentido en toda mi vida, consigo comprender como se siente una botella de pipermint metida en la mochila de un quinceañero que se sube a la montaña rusa más alta del mundo. Sí, porque estamos en el cacharro que desde más alto baja, me agito con el movimiento del trasto de lado a lado y me pongo verde por la intoxicación cuasimortal debido a los gases de Thin.
Pero todo acaba bien, tan bien como es posible si tenemos en cuenta que la multitud reunida me hace sentir luego como una babosa tímida y desgarbada. Nunca en mi vida he estado físicamente ante tanta gente y menos mal que el traje dichoso es insoportable pero disimula muy bien mis "crecientes" problemas. Afortunadamente Thin mostrará su faceta de bardo cual beetle sesentero y yo podré ocultarme tras su voluminosa (y maloliente) humanidad.
Lo peor llega en el estrado, con la multitud silente y expectante. Menos mal que Max abre el camino a los discursos breves así que cuando me llega el micrófono lo resumo todo en dos palabras:
¡ESTAMOS AQUÍ!
Luego transcurren unos malos momentos pero mucho más rápido de lo que yo mismo me esperaba consigo diluirme en los actos protocolarios y las borracheras colectivas dejándome ir hasta mi madriguera discretamente.
Una vez allí reuniré los fondos que le pueda rascar a todo quisque para construir mi guarida secreta, cual superhéroe y en ella ordenaré instalar mi virtualizador.
. . .
Tiempo después, en algún oscuro y sórdido sótano una compleja maquinaria rodeada por potentísimos computadores conectados a la red mundial y a la de satélites rodea una camilla con arneses en la cual reposa el raquítico cuerpo de Ghost. En su mano un pulsador da paso al proceso final . . .
El sonido se incrementa en muchos decibelios al iniciarse la desmolecularización, las luces parpadean como en las viejas pelis de Frankenstein y en la pantalla principal una cuenta atrás se acerca a su fin . . . 4 . . . 3 . . . 2 . . . 1 . . .
Puede que nunca se sepa si hubo desmolecularización pero sí parece que hubo virtualización porque en un determinado momento todos los teléfonos del mundo sonaron a la vez y quienes respondieron la llamada solo pudieron escuchar un sonoro:
¡¡¡ MUAHAHAHAHAHA, lo he logrado !!!
¿Qué os pasa, por que ponéis esas caras? Yo no noto nada raro les comento mientras descendemos cuando todos arrugan la nariz. Y es que cuando has estado encerrado en una habitación cerrada herméticamente durante más de 72 horas sin lavarte ni nada no hay olor que te tumbe. Ni el de Ankh-Morpok.
Y al bajar tocaba soltar el discursito de rigor. Max y Ghost lo intentaron, pero no estaban a la altura. Hacía falta alguien con mínimo 20 de carisma. Menos mal que estaba yo. Di un paso al frente y me puse frente al micrófono.
Soy Thingol Pecritico. He bebido más cerveza, he meado más sangre, he echado más polvos y he chafado más huevos (chuta el contenedor de basura) que todos vosotros juntos, capullos. He visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión...He visto rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser...Todos esos momentos se perderán... en el tiempo, como lágrimas...en la lluvia...Es hora, de morir. La respuesta de la vida, el universo y todo lo demás es... 42. El mundo se divide en dos categorías: los que tienen el revólver cargado y los que cavan. Tú cavas. El conceto es el conceto. Crom, jamás te había rezado antes, no sirvo para ello, nadie, ni siquiera tú recordarás si fuimos hombres buenos o malos, por qué luchamos o por qué morimos, no, lo único que importa es que dos se enfrentan a muchos, eso es lo que importa, el valor te agrada Crom, concédeme pues una petición, concédeme la venganza, y si no me escuchas ¡vete al infierno! Luchad, y puede que muráis. Huid y viviréis... un tiempo al menos. Y cuando estéis en vuestro lecho de muerte dentro de muchos años, ¿no cambiaréis todos los días desde aquí hasta entonces por una oportunidad, sólo una oportunidad, de volver aquí y decir a nuestros enemigos: Pueden quitarnos la vida, pero jamás nos quitarán... ¡¡La libertad!!
Pese a haber salvado la vida de millones de personas y ser deseado por miles de mujeres la vida de Edward no cambio para nada. Sigio tirandose horas y horas delante del ordenador jugando y chateando, hasta el punto de que su madre le tenia que hablar por el msn para que le hiciera caso y bajara a cenar. Las comidas era de las pocas veces que salia de su habitacion, las otras era para asistir a concentraciones de comics o rol en las que era aclamado por cientos de hombres como el.
En el camino de vuelta la pestilencia expulsada por el gordo, que aún no se sabe por qué él no admitía que había sido su culpa, la pobre de Alba casi se desmaya por falta de oxígeno; menos mal que aterrizaron pronto y bien.
Al ver tremendo gentío gritar como locos ella no pudo evitar sentirse mal porque faltaba su querida madre/hermana pero se alegró al ver a su padre y a sus abuelos.
- Hola, he salvado al mundo, con estas manitas... sin mí esos pringaos no lo hubieran conseguido.- dice con aires de grandeza.- Me voy que me llaman para hablar.
Una vez en el estrado escuchó los curradísimos y extraños discursos de sus compañeros de viaje y advirtío que era el momento del suyo. Agarró el micrófono y se dispuso a hablar.
- Bueno, llegó la hora de despedirse y me gustaría que le dieran un fuerte aplauso al batería, Edward, al teclado, Max, al guitarra Ghost, como no al coro, Dante el hurón y por último a mí, Alba.- aplaude feliz como los cantantes que presentan a su grupo en sus conciertos.- Nosotros somos ¡¡¡LOS CHUCK NORRIS DEL SIGLO XXI!!!!- hace el gesto de rock `n roll.
Después de ser la más famosa en el lugar y la princesa disney que toda niña desearía ser Alba por fin siente que su madre la ha perdonado y la ha dejado de molestar. Por lo que se va a celebrarlo ¡¡¡DE COMPRAS!!! Total tengo todo el dinero que una niña de 13 años pueda desear...