Alyssa salió de detrás de las cortinas cuchillo en mano. Matar de esa forma era algo que nunca había hecho, pero no le quedaba más remedio si lo que quería era escapar de aquel repugnante planeta. Para ella y para el bebé que estaba engendrando era un lugar insoportable. Pero más insoportable era la gente que había conocido en esa reunió no. Por muy otochi que fueran. Eso ya daba igual. Lo importante eran ella y su bebé. Nada más. Así que cuchillo en mano se lanzó contra Daniel con la finalidad de terminar el ritual y poder huir de ese planeta.
Notas un dolor punzante en tu espalda, el dolor al principio es tan fuerte como el shock. Pudiste girarte poco después para comprobar que la artífice de aquella puñalada era Alyssa.
El dolor era incesante, probablemente te quedasen segundos de vida puesto que notaste como la sangre comenzaba a manchar tu ropa y el gusto a hierro tu paladar.
Puedes hacer un último post antes de caer inconsciente.
Joder, el dolor era insoportable. Esa puñetera Alyssa estaba escondida en algún sitio... Hice un ligero intento por sacar el cuchillo de mi bolsillo, pero era inútil. El brazo no respondía a mi deseo. Ahora que me fijaba, la alfombra del salón se había vuelto roja. ¿O ya era antes así? No lo recordaba, tampoco me importaba. Contrastaba mucho con los colores resto del mobiliario del salón. Era un rojo brillante, muy bonito. No podía dejar de mirarlo. La vista empezó a nublarse. Tenía mucho sueño, estaba agotado. Necesitaba descansar... Cerré los ojos. Solo será un ratito...
Alyssa tenía las manos manchadas de sangre. El cuerpo sin vida de Daniel cayó al suelo mientras el corazón de la Otochí latía cada vez más rápido.
Había completado el ritual, o al menos así era en la teoría porque había matado según ella había contado al último Otochí necesario, sin embargo... ¿dónde estaba su ascensión?¿Qué debía ocurrir ahora? Todo seguía "como siempre".
La imagen era demoledora. Beatriz entró en el salón para encontrarse una imagen espantosa: en el suelo estaba Daniel, envuelto en un charco de sangre mientras que justo detrás de él se encontraba Alyssa, cuchillo en mano y aún con marcas de sangre.
En aquel momento ambas sentisteis que el tiempo se detuvo, casi la respiración se cortaba.
Voy directamente hacia Ayssa con el cuchillo en mano directamente hacia ella... - Sabia lo que eras! una Asesina! El era inocente quien me buscaba era a mi!
Motivo: Matar Alyssa
Tirada: 1d20
Resultado: 4
Ahora te toca a ti tirar el dado, si superas la tirada de Beatriz podrás acabar con ella. Recuerda hacer el post incluyendo a Beatriz.
Alyssa se miró horrorizada las manos. Una cosa era matar sin dejar huella y otra muy distinta era matar de aquella forma tan sangrienta y sobre todo poco profesional. Pero aquellas vidas eran insignificantes comparadas con la suya o la de su bebé. Eran prescindibles,Dani era una de ellas y era la última que necesitaba para lograr salir de allí.
Pero algo inesperado pasó, o mejor dicho... no pasó nada de lo que espefaba. No podía creérselo. Ella pensaba que ya estaba todo hecho,que lo más complicado ya lo había conseguido. Pero se equivocaba y tanto que se equivocaba. Porque la sorpresa fue mayúscula a ver a Beatriz abalanzarse contra ella. ¿De dónde había salido? ¡No la había visto llegar!
Desgraciadamente para ella, su vida no significaba nada para Alyssa. Una muerte más simplemente le acercaría al paraíso, no podría ser de otra forma. Así que,en un acto reflejo sacó el cuchillo de la espalda del cadáver y lo coloco para que Beatriz se lo clavade al abalanzarse sobre ella. En un juicio podría haber alegado defensa propia... aunque tener las manos llenas de sangre no ayudaría en su defensa.
¡Lo había conseguido! Y ya solo quedaba la ascensión.
por fin pensó mirando al techo por fin...
Motivo: Acabar con bea
Tirada: 1d20
Dificultad: 4+
Resultado: 10 (Exito)
Sorry. Movil
Debes hacer ahora el que sería el último post de Beatriz. Alyssa ha conseguido superarte en ese "duelo a cuchillos de cocina", pero tienes acceso por si quieres decir algo antes de caer inconsciente.
Alyssa no se esperaba mi apareció en la sala se lo pude notar en su expresión pero apenas dudo en matarme como yo a ella cuando la vi lanzándose también con un cuchillo de cocina a pensar de que ella estaba embrazada fue mas rápida que yo. Estaba claro que ella realmente era una asesina igual que yo lo fui en el pasado, esa forma de moverse y de matar a una persona solo lo hace los asesinos....
Fue todo tan rápido que apenas note la puñalada que me dio... mi cuerpo iba hacia abajo con el ultimo recuerdo de Alyssa con las manos llenas de sangre y Daniel muerto en el suelo...- Sabias que eras una asesina, pues se sabe quienes son cuando tu también lo eres. Dije con la voz seca y sin fuerza...Ante de cerra los ojos y caer un oscuro sueño sin salida.
Y este ha sido el final para Beatriz ¡Has peleado hasta el último momento!
En cuanto el corazón de Beatriz dejó de latir, sentiste un hormigueo por todo tu cuerpo. Era una sensación extraña, aunque no del todo desconocida ¿por qué? Porque era la misma sensación que percibiste la primera vez que llegaste a la Tierra.
Significaba aquello que lo habías logrado ¿era Beatriz la última exiliada que debía desaparecer? ¿Qué pasaría con la casa en el caso de que te marchases para siempre?
De pronto todas esas preguntas desaparecieron de tu mente puesto que tan solo se consiguió una vasta y espesa negrura.
Te sentías ligera, confundida y sobre todo nerviosa. No veías nada, sentías tu cuerpo flotar pero todo estaba oscuro. Tan solo había espacio para tus pensamientos.
Debes hacer un post narrando tus impresiones o incluso una reflexión sobre todo lo acontecido tras el encuentro.
Si peleo hasta el final jejeje :P
Me ha encantado la partida ^^
Espero que la de Más allá del Desierto cumpla tus expectativas :)
Aquella sensación fue una mezcla entre descanso, placer y nerviosismo. Descanso porque toda aquella lucha había sudo muy dura, no solo la de las últimas horas, sino la de la lucha contra el cáncer, la de estar criando a un bebé que sabía que pronto se iba a quedar huérfano, y además el hecho de encontrar a todos aquellos exiliados que a juzgar por lo vivido la mayoría no tenían ni idea e lo que había pasado.
Placer porque pronto descansaría, porque en el fondo haber eliminado a cinco personas insignificantes, por muy otochís que fueran había hecho que se sintiera otra vez viva. Placer por haber logrado su objetivo y por haber sido capaz de librarse de todas las trampas que le habían hecho para poder llegar hasta allí.
Y nerviosismo por lo inesperado, pues no sabía qué es lo que iba a pasar ahora. Qué es lo que iba a pasar una vez completado el ritual. Quizá todo hubiera sido un rumor falso y que jamás se resolvería, pero esa oscuridad solo podía indicar que algo iba a pasar, y estaba muy nerviosa por saber qué es lo que sería.
De repente la oscuridad se convirtió en luz de nuevo.
La sala circular que tomó forma desde las sombras era tremendamente familiar. Como si de una neblina se tratase, los recuerdos iban disipándose a medida que iban pasando los segundos.
Aquella sala era el mismo lugar donde años atrás habían condenado a Alyssa a un exilio en la Tierra por los crímenes cometidos, unos crímenes que bajo la ley Otochí estaban redimidos.
El silencio se rompió como un trueno irrumpiendo en mitad de una tormenta.
- Bienvenida Alyssa -
El hombre encapuchado que había pronunciado tu nombre no estaba solo. A su alrededor había una docena más de hombres y mujeres. Podías reconocerlos como la élite de la política Otochí.
- Según nuestras tradiciones, te has ganado el derecho a recibir el perdón por tus pecados del pasado. Has convertido tu exilio en un propósito para traer el equilibrio a nuestra sociedad. Has formado parte de un proceso que durante más de 100 generaciones ha dado éxito a nuestras políticas de seguridad -
- Por unanimidad y en vista a la compleción de los requisitos necesarios, yo, como portavoz del consejo supremo, le otorgo el indulto para volver a ser una ciudadana más - otro silencio se llevó a cabo.
- ¿Tiene algo que alegar antes de finalizar el proceso? - parecía que tu sueño de volver a tu hogar estaba a punto de cobrar sentido.
Alyssa sonrió al comprobar que por fin estaba de vuelta en casa. Que por fin había abandonado ese endiablado planeta lleno de insignificantes criaturas y de una retraso tecnológico increíble. No podía creerse que al final había tenido que matar a uno de aquellos Itzanmá con sus propias manos en vista de que no había armas suficientemente adecuadas para resolver aquel problema.
Ahora era libre y por fin podría morir en paz en su querido Otoch. Pero cuando preguntaron si tenía algo que añadir, Alyssa asintió mientras se acariciaba el vientre. En mi cuerpo llevo un bebé Otoch, me quedé en cinta de un miembro de nuestra raza y ahora temo por mi vida y por su futuro. Tengo cáncer y es probable que tarde o temprano muera, necesito saber si alguien se hará cargo de él, o si conocéis alguna solución a esta horrible enfermedad que padezco.
El consejo comenzó a hablar entre ellos, cuchicheaban probablemente las cuestiones que habías compartido en voz alta con el portavoz. Estuvieron casi dos minutos intercambiando impresiones hasta que finalmente el "veredicto" fue dictado a los oídos de aquel que tenía el turno de palabra.
- Alyssa, el consejo ha tomado una decisión - hizo de nuevo aquella pausa que era capaz de poner de los nervios.
- Consideramos que no es justo haber superado las condiciones para después perecer con una enfermedad mundana de la Tierra; de modo que recibirá el tratamiento necesario para que esa infección terrestre no sea más que una anécdota en su trayectoria - después hizo otra pausa.
- En cuanto a su primogénito, ya que porta la sangre de nuestra raza, y ya que su salud no será un problema, podrá mantener su custodia con el objetivo de educarlo en nuestras tradiciones y hacerle un miembro más de nuestra sociedad... Si esto es todo Alyssa, podrá abandonar la sala y comenzar de nuevo su vida -
Ya podrás hacer tu último post, donde finalmente logras la libertad tan ansiada además de recibir el tratamiento para curar tu enfermedad.
Una vez más Alyssa se frotó su tripa. Por fin había logrado la tan ansiada libertad, y no solo eso, sino que también se había garantizado un futuro para sí misma y para la criatura que estaba engendrando en su vientre. No podía creerse que lo hubiera conseguido. Todo se había torcido desde el minuto en el que ese extraño grupo había entrado por la puerta. Pero al final, gracias a la suerte y a su bien hacer, Alyssa logró cumplir el ritual para poder ser libre. ¡LIBRE! Y no solo eso, sino que sería curada.
Alyssa agradeció las palabras del consejo así como la medicina y todo lo que iban a hacer por ella, y sin decir nada más se dio la vuelta y se marchó de allí.
Estaba contenta, pletórica y sobre todo muy sonriente. No podía creerse que lo hubiera logrado, pero así era y por fin lograría vivir en paz y tranquilamente el resto de sus días.