Partida Rol por web

En cuanto lo tiene lo bastante cerca, Pipan se lanza fascinado aquel al que vio caer con ese parapente vegetal y empieza a asediarlo con toda clase de preguntas sobre la subida, girando a su alrededor sin parar como un torbellino hablando gesticulando señalando e interrumpiendo.

-...es eso de subir en una hoja?, ¿En que clase de planta crecen? ¿Son muy estrechos los tu? ¿Es dificil mantener el agarre? ¿Los otros vienen detras de-

Kain había completado su catapulta y hecho los cálculos necesarios para salir de ese bosque que tanto había llegado a molestarle. Estaba lo suficientemente decidido en su objetivo como para seguir con el pero no pudo evitar el miedo momentáneo justo antes de activar su creación: - ¿Calcule todo correctamente?- pensó de nuevo como venía haciéndolo desde que se le ocurrió su descabellada idea. Sin embargo sacudió la cabeza y activo la catapulta: -Si sigo dudando jamás podre convertirme en cazador. – fue lo último que pensó antes de salir disparado por los aires.

El vuelo fue la sensación más extraña que Kain jamás hubiera sentido. Aunque fuera a una velocidad increíble pudo sentirlo todo en cámara lenta y con la tremenda adrenalina que sentía por dentro no pudo evitar sonreír como un maniaco o quizás como lo que era después de haber tenido semejante idea.

Kain se desplomo y logro evitar el hacerse mucho daño con su técnica de caída, sin embargo el dolor lo dejo un rato tumbado en el suelo mientras reía como un niño y poco a poco sentía el cansancio a la vez que lo abandonaba la adrenalina.

Como pudo logro correr lo poco que le quedaba del camino y escucho a la examinadora decir el tiempo que quedaba a la vez que observaba a los participantes entre ellos el chico al que había querido ganarle en la carrera a la montaña y el hombre que los había alcanzado y repasado en el túnel. Esto hizo que Kain se alegrara por poder seguir compitiendo contra ellos pero sentirse un poco frustrado por no poder ser el primero:

- Debí construirla tan pronto se me ocurrió y no perder tiempo buscando un camino. – Susurro un poco dolido. Siguiendo con su enfoque e los demás  pudo observar que aparte del explorador y el hombre en los que se había fijado también estaban la chica de la hoz de antes y otro chico que no recordaba muy bien pero que parecía tener la atención del primero.

Cita:

Dijo el sujeto alto mientras le indicaba hacia el lugar donde estaba la examinadora que Jin no pudo verla debido a su pequeño tamaño. Cuando iba a acercarse para hablar con ella, apareció el chico que había escalado al comienzo del ascenso a la montaña.

Cita:

Jin se rascó la cabeza algo confundido, entre lo apresurado por la emoción del escalador, las palabras se le trababan y las preguntas se entendían por la mitad.

-No sé si venían más detrás de mí, solamente copié lo que otros hacían. Tomé una hoja gigante de un árbol del bosque y sólo me lancé en el momento justo en el enorme tubo.

Jin cambió de opinión y en vez de hablar con la examinadora prefirió consultar a los otros.

-Los que no subieron con las hojas, ¿cómo lo hicieron?

Kyo tenía todo el ánimo, toda la fuerza, y toda la voluntad para enfrentarse a la prueba, de la cual, después de haber enfrentado duros desafíos, había llegado tan lejos, logrando averiguar cuál era el truco que tenía que hacer para superarla. Veía como la hora del final de la prueba se acercaba, e hizo todo lo humanamente posible para intentar superarla. Si bien tuvo una excelente idea, esta, lamentablemente, le salió muy mal ejecutada. El hecho de haber saltado lo suficiente para descender a través de los árboles con su hoja habría sido una buena idea, de no ser por lo frondoso que era el bosque, provocando que se llevara varios cortes hasta finalmente chocar de frente con un árbol. Más que permitirle acortar el tiempo, lo había retrasado.

Una vez fuera del bosque corrió a una de las aberturas, y cuando llegó, espero. Y esperó. Y siguió esperando, por al menos quince minutos, hasta que al fin, comenzó a escuchar como el volcán rugía, y lanzándose, sintió como todo su cuerpo se elevaba a una gran velocidad, pudiendo observar toda la belleza que había dentro del volcán. Cristales, y salientes rocosas que con la luz que entraba por la boca del volcán brillaban. Cuando salió del volcán, elevándose por los aires, pudo ver la meseta, así como también, pudo ver que el sol se estaba ocultando a lo lejos, en las montañas.

En la meseta, no podía ver restos de grupos, y solo había unas 3 o 4 personas que se notaba que estaban descansando en el lugar. Cuando aterrizó y se acercó a estos, lo supo. No había logrado llegar a tiempo para finalizar la prueba.

Una vez el sol se comenzó a ocultar, la examinadora juntó las manos y los empezó a ver a cada uno de ustedes. En total, de todos los que habían comenzado la prueba, solo quedaban 33 personas. Eran ustedes los que pasarían a la siguiente prueba, y tendrían el tiempo de descansar un momento antes de seguir en la dura misión de convertirse en cazadores. ¿Cuántos de ustedes conseguirían ser cazadores? Solo el tiempo lo diría. Haciendo un gesto para reunirlos a todos, les dijo;

-Bueno chicos. Han pasado la primera prueba, ahora, síganme, que tomaremos un transporte para ir a la siguiente prueba. –

Dijo, y tras ello, comenzó a caminar por la meseta hacia un lado más frondoso. Allí, tras caminar una media hora, llegaron a un lugar del bosque donde había un sendero, conjunto con un símbolo que decía “Parada 43”, y allí, un tren que se veía muy antiguo los estaba esperando.

Le hizo un gesto a cada uno para que pasara. Todos pudieron entrar a un salón, y al tomar asiento, les dijo;

-Viajaremos durante toda la tarde y la noche hasta la próxima prueba, por ahora descansen, se lo han ganado. -Dijo mirándolos a cada uno de ustedes, antes de desaparecer por el fondo del carril, mientras que comenzaban a pasar algunos asesores de tren con unos carros sirviéndoles comida variada a cada uno de ustedes para recuperar fuerzas.