Sin permitir que su sonrisa se alterase Mortimer respondio -Edward Drake, profesor de biologia. Estaba realizando una investigación sobre gusanos locales, eso es lo que queremos. Por favor-
La mujer era extremadamente cargante y antipática, "¿como llega una mujer así a ser responsable de una biblioteca de esta categoría?" Mortimer prefirió no ahondar en esos pensamientos porque no dejaba de ser un caballero
Al final parece darse por vencida, y recordando vuestro anterior incidente, cede:
-Sí, sí, ya vinieron hace unas horas preguntando por eso. El señor Drake (nada de profesor, era un estudiante becado) estaba ayudando, junto a otro alumno, en una investigación del profesor McKendrick. Eso sí, no sé nada de su investigación, aunque creo que se trataba de un estudio oceanográfico, no de gusanos -añade con desdén-. Y bueno, supongo que el Inspector les habrá informado del destino del profesor McKendrick. Yo me enteré por el diario.
Mortimer sonríe cuando la bibliotecaria finalmente cede, era inevitable
-¿solo estudiante? bueno, supongo que no estaba bien informado, hemos sabido por el inspector sobre el destino del profesor McKendrick, una desgracia sin duda, y ahora- el Lord se apoyo un poco en el mostrador acercandose a la bibliotecaria -¿podría mostrarnos los trabajos de Drake?, por favor-
¿Como necesito yo un poco de esa mano izquierda que tiene...?
Dejaré que siga en esa linea y me mantendré lejos... Cosa que por otra parte es lo que deseo... Je Je.
Sonrie para si mismo, en silencio mirando atentamente al Lord inglés mientras actua.
La aparente tregua en el mal humor de la bibliotecaria empieza a esfumarse por momentos tal como avanza la conversación:
- ¿Trabajos dice? Señor, le he comentado que sus estudios se han visto truncados por la muerte del profesor y la indisposición de sus dos ayudantes, así que no creo que haya gran cosa, y de haberla, debe de estar en posesión de los susodichos. No creo que en el Museo Marítimo conserven tampoco gran cosa de la expedición, pero pueden probar allí suerte.
Mortimer mantiene firme su sonrisa pese al mal humor de la bibliotecaria
-¿la indisposición de sus dos ayudantes?, yo pensaba que Drake era el único ayudante del profesor Hendrick, ¿quien es el segundo ayudante?¿y que le ha pasado?-
La bibliotecaria parece cada vez más dispuesta por su tono de voz (airado pero en voz baja para no molestar a los lectores) en zanjar la conversación:
-Sí, si, si, pardiez. Simon Murray, creo que se llamaba ese pobre chico. Dicen que no estaba bien de la chaveta y que acabó en el psiquiátrico. Ahora, si me disculpan, tengo cosas importantes que hacer.
Y agacha la cabeza y continúa su simulacro de trabajo repasando con la vista el libro de registros.
No parecía que pudiese sacar nada mas alli, así que se fue a un punto algo apartado del mostrador para hablar con Dark
-bueno, tenemos tres opciones, reunirnos con Elizabeth y el señor Allen, ir al museo Maritimo o ir al manicomio a ver al desdichado Simon Murray, ¿que le parece a usted?-
Peter, meditabundo deseaba sumergirse lo antes posible en la lectura de lo que estaban escribiendo pero...
Lord Voltimer, deseo leer cuanto antes lo que estaban escribiendo en ese trabajo, pero he de decir muy a mi pesar que creo más agil y oportuno dirigirnos al manicomio.
La información será más rápida de localizar a partir de la conversación con este ayudante... ¿que le parece?
Tras esto al señor Dark le da un respingo y suelta una maldición para si mismo...
Solo quiero estar en casa con mis libros...
-es Lord Mortimer- corrigió distraidamente -si, en el manicomio obtendremos información seguramente, en el museo marítimo tal vez no, es un rumbo de acción mas adecuado-
Ajeno al evidente malestar de Dark, o simplemente ignorándolo, Mortimer se dirige a la salida de la biblioteca donde para un carruaje. Una vez ha subido llama con un gesto a su compañero
-deprisa señor Dark, o se acabará la hora de visitas-
Dark, se aleja de la biblioteca sin dedicar una mirada a la antipática bibliotecaria...
Comienza a salir detrás del Lord Inglés... Cuando se da cuenta de que van a salir a la calle...
Otra vez... Es más facil si no lo piensas... Vamos tenemos una investigación en curso.
Tras esto apenas duda unos instantes y con gesto de disgusto entra en el carruaje.
Disculpe... Tengo una memoria desastrosa para los nombres de personas en el trato directo... sin embargo en cualquier otra situación no tengo dichos problemas.
Para entrar ha tenido mucho cuidado de que su piel no entre en contacto con nada del carruaje y espera a que el Lord indique el rumbo a tomar al cochero, sumido en sus pensamientos.
Mortimer se asoma por la ventanilla del carruaje para dar instrucciones al cochero
-al manicomio por favor, dese prisa-
Una vez sentado se dedica a pensar en silencio sobre el curioso destino de todos los miembros de ese grupo de investigación