Partida Rol por web

Todos los individuos sacan sus pistolas cuando Caín presenta su escopeta. El que ha hablado antes vuelve a hacerlo: no sé que quiere decir ese dibujo pero aquí no sirve de nada, es la última oportunidad, márchense y déjenos en paz.

Suspira ante la actitud de Cain. Albrek había seguido de largo, no pasaba nada y de repente... blam, un arma y a las disputas una vez mas. 

-Bueno, bueno... fue mi fallo. Mil disculpas gente, ya nos vamos- dice esto mientras sigue caminando e intentando llevar al resto también.

Miro a los ojos al tipo que habla, y luego me giro hacia el resto. Ayudo a Rabalias a calmar a todos y a pirarnos.

Sí, mejor vámonos de aqui. No queremos problemas. Venga, vamos.

¿Pero que demonios esta haciendo el nuevo?  Viendo las tonterias que no paran de salir de su boca.... Sigo con la mano en la empuradura de la escopeta, manteniendome firme y en mi posicion aguantando la mirada a los tipos que tengo delante... seis contra diez, en peores me he visto... Ante  las ultimas palabras que pronuncia el pandillero paleto de pueblo. Nosotros no hemos venido a robaros nada, no se que habra pasado aqui con anterioridad, pero como no os quiteis de el medio ...... la verdad es que tenemos prisa.  Digo en tono seco, esto me empezaba a gustar, tiros....

Al percatarse que sus compañeros no siguen tras él, Albrek se detiene y vuelve sobre sus pasos, abriéndose paso entre el grupo hasta quedar en medio de los acólitos y el grupo soliviantado.

- Hermanos, debemos acudir prestos, el Aristarcus nos aguarda y no nos conviene hacer esperar a la Eclesarquia- Dice sin siquiera mirar a la multitud

Escuchando la voz del sacerdote, y sin apartar los ojos del grupo, le contesto.

- Tenéis razón hermano. No debemos retrasarnos con pormenores -enfatizo esta última palabra - que nos alejen de nuestro verdadero encargo aquí.

Dirijo una última mirada llena de superioridad a los parias antes de prepararme para continuar nuestro camino.

Coincido

Fue lo único que dijo Caín mientras se alejaba de los tipos, paso a paso, con calma...

Viendo como se empiezan a alejar los compañeros... Si no tuvieramos prisa... solo nos va a llevar 5 minutos matarlos... pero bueno, el deber es el deber.... Otro día será chicos, nos vamos como hemos venido. Les digo mientras me empiezo a alejar, intentando ver si reaccionan y me dan una alegría.