Partida Rol por web

  Suiji observa atentamente el lugar y se dirige a la entrada alerta. Maravillado por la belleza del lugar mira a sus sobrinos fugazmente y les sonrie, luego sigue andando hacia la entrada.

Las puertas del templo se abrieron sin complicaciones dando paso a una enorme sala abovedada con una gran escalinata que daba acceso a una parte mas alta. Había dos pasillos cerca de vosotros, pero estaban bloqueados por trozos de roca del techo de los mismos que parecía haber cedido.

 tengo k volver a tirar? xD

Limei mira a su alrededor sin mediar una palabra y se acerca a la entrada siguiendo a su tio. Mientras camina esta atenta a cualquier ruido.

Ming una vez dentro hecha un ojo los alrededores.

-Bonita arquitectura... 

Mientras mirais a vuestro alrededor en la silenciosa estáncia escuchais un ruido abrupto que proviene de la habitación que hay en la parte alta de las escaleras.

 Suiji al oir el extraño ruido se dirije escaleras arriba por si logra averiguar de que se trata.. Mira a sus sobrinos y les hace un gesto para que les sigan..

Ming se percata de la mirada de su tio y lo sigue a cierta distancia. 

Limei haciendo el menor ruido posible sigue a una distancia prudencial a su hermano.

Escuchais ruidos de pasos ahora tanto de la parte superior de las escaleras como de la entrada del templo.

Al llegar a la parte alta de las escaleras os encontrais con una pequeña sala con una pica (de agua) en el centro. La puerta frente a vosotros esta destrozada y se ve a varias personas en la habitacion contigua que parecen estar luchando. Tres llevan puesto lo que parece una armadura completa con dos enormes cuchillas en los brazos a modo de katar mientras que los otros llevan ropas extrañas y no parecen haberse percatado de vuestra presencia.

-Parece que no somos los únicos... ¿qué demonios hacen aquí?

Veis como las figuras del fondo atacan a la gente que hay en la sala contigua, dos de ellos logran detener los ataques, pero el tercero parece herido de consideracion pero se lanzan a atacar de todas formas sin haberse percatado aun de vuestra presencia.

   Suiji se acerca a sus sobrinos y les dice en un susurro: