Partida Rol por web

El enano asiente, moviendo su cabeza arriba y abajo antes de acotar - Ya veré si encuentro aquí una enana digna de mi atención. Las humanas no tienen suficiente barba.Aunque no creo que ninguna de mis congéneres se avenga a trabajar en un sitio así, he escuchado cosas más curiosas en algunas canciones, así que averigüémoslo -

Silbidos encara hacia la puerta del burdel y se prepara para hacer una entrada triunfal. Sus labios se fruncen un momento y,lentamente, comienzan a desgranar una alegre melodía que invita a bailar y divertirse de muchas maneras

Thanos se dirigió a la taberna, mientras que el enano Tukk lo hizo al burdel

Entras en el burdel silbando una agradable melodía.

Entras a un salón en penumbras, iluminado por una tenue luz que salía de varios candelabros desperdigados por las paredes.

El suelo estaba cubierto por varias alfombras de pelo corto, las paredes tapadas con tapices de diferentes colores y de dudoso gusto, las ventanas tapadas con una tela roja con ribetes dorados. En el aire flotaba un olor a especias o fragancias que no conseguiste distinguir.

Varias mesas con grandes divanes estaban pegados a las pardes de la sala, en algunos de ellos parejas y tríos retozaban entre besos y caricias. Una mujer tiraba de un marinero para subir a la planta superior por unas escaleras que se encontraban al fondo de la sala.

Nada más entrar, una mujer se te acerca. Enseñando más carne de la que cubría, con la cara llena de pintura blanca y roja con el pelo alborotado se dirigió a ti gritando.....Marnieeeeee ha entrado un enano.-

Dándose la vuelta se fue a un grupo de uno de los laterales donde cinco rudos marineros bebía y se divertían con otras tantas chicas......vienen los refuerzos.- les dijo mientras se sentaba a horcadas encima de uno y lo besaba con fuerza.

Mientras mirabas al grupo la tal Marnie se acercó a ti silenciosamente.....bueno todo lo silencioso que se podía acercar una humana de 150 kg por lo menos. Con unas piernas como columnas, cintura de tonel y unos grandes pechos era sin duda la humana más grande que habías visto jamás.

Ven pequeñín, vamos a divertirnos un rato tú y yo

Yo acompaño a Thanos con paso ligero, para alcanzarle. He dudado unos segundos, pero... No, el burdel no me llamaba tanto la atención. 

Entrais en la taberna...y la encontrais casi vacía.

El interior es un fiel reflejo de la fachada, un viejo edificio medio ruinoso. Un olor a rancio penetraba en las fosas nasales y se adhería a la ropa.

Tablones desgastados y enmohecidos cubrían suelos y paredes, y ni uno ni otro tenían pinta de haberse limpiado en una temporada.

Varias mesas se encontraban desperdigadas por el salón. En una de ellas cuatro rudos marineros jugaban a dados, en otra uno yacía inconsciente encima, con un vaso semivacío en su mano derecha.

Y después estaba el camarero, que estaba secando vasos detrás de la barra con un trapo que más que limpiar bien podría dejarlos peor de lo que ya se encontraban. Ancho de abdomen, de gran papada y de pelo grasiento, no esperabais encontrar a otro tipo de tabernero que no fuera ese. Parecía que iba de serie con ese tipo de tabernas.

¿Qué vais a tomar?.- dice dejando el vaso que secaba delante vuestra y cojiendo otro de los que acaba de dejar, para dejarlo al lado del primero

- Algo sin alcohol. Un zumo, de lo que quiera. - responde Thanos al camarero sin titubear.

Echo un rápido vistazo al local, y me pregunto realmente por qué se nos habría ocurrido que aquí encontraríamos algo útil... realmente lo dudo.

- Y una jarra de hidromiel para la señorita. - digo señalando a Alimorel con la cabeza.

Cuando me pone las bebidas le pregunto: - ¿Qué le debo? - Vuelvo a mirar alrededor... - No parece que venga mucha gente por aquí, ¿por qué está esto tan vacío? -

Una de plata.- se gira y coje dos botellas vertiendo el contenido en los vasos. Os llama la atención que el color de las dos botellas se parece bastante.

Estamos en el puerto y es por la mañana, esto no se anima hasta que cae la noche y vuelven de faenar

Cuando cojes tu vaso ves que hay algo flotando en la superficie

bueno pues yo voy al burdel , me apetecia mas haber ido a la taberna pero todo sea por el equilibrio

Las costumbres sexuales de los humanos siempre habían sido objeto de extrañeza para el bardo, y exactamente en este momento recordó el porque de dicha situación - Un enano no, "Silbidos" Tukk. Cantor, silbador y poeta, además de experto en relaciones interraciales - comenzó a presentarse con su habitual estilo dicharachero hasta ver la mujerona que se le acercaba.

El enano respiró profundamente y se cruzó de brazos al notar el tamaño de Marnie - Bien... divirtámonos como solo los enanos saben divertirse - aclaró mientras observaba el rostro de la humana - Poco pelo en la cara - agregó en voz baja, moviendo su cabeza de un lado a otro antes de sonreir y elevar la mirada para observar a la meretriz a los ojos - No quiero tener más problemas de los necesarios, cuales son las reglas de la casa? - preguntó antes de hacerle señas a la mujer para que se inclinase y pusiera su rostro a la altura del del enano - Y cual es el costo si agregamos, al placer, algo de información -

el elfo se mantuvo con los brazos cruzados durante todo el rato, en parte porque las humanas, salvo alguna excepcion que dudaba que se encontrara en ese lugar , no tenian la complejidad y sutileza de las elfas , quizas su vida terrenal las hacia demasiado simples y dada su corta vida no tenian los matices que podia adquirir una elfa. Asi que dejo hacer al enano que parecia bastante predispuesto , aunque claro puede que la informacion valiera una sesion y como el elfo no iba a hacer pago doble por la misma informacion se mantuvo en la entrada cual guardaespaldas , admirando las diferencia de curvas entre especies femeninas que alli se congregaban y asegurando que el enano recibia el trato que merecia 

Miro el lugar con cierta indiferencia, nada que uno no pudiera imaginar en su sitio así...  Me extraño ante la petición de algo sin alcohol de Thanos, y me quedo convencida de que no tienen nada sin alcohol en ese sitio... O si lo tenían, probablemente les daría igual. 

Suerte, que esto está tranquilo... Aunque quizá nos vendría bien un poco de diversión. 

Mientras Thanos habla con el tabernero, yo observo con la mirada perdida mi vaso intentando visulmbrar, qué leches hay flotando en ese liquido tan repugnante, con algo de disimulo... 

Saco dos monedas de plata y las deposito en la mesa. Miro a mi bebida con una mueca de desagrado y de momento no bebo... no tiene pinta de no llevar alcohol. - Gracias por la bebida. - Miro alrededor. - Disculpe, ¿vienen muchos aventureros por aquí? De esos que quieren bajar a las ruinas de Bajomontaña me refiero... -

Me fijo en si los marineros prestan atencion a mis palabras y espero la respuesta del camarero.

Os habeis equivocado de sitio, la entrada a Bajomontaña es en la posada de al lado.- el orondo posadero metió otro vaso en un barreño de agua oscura y lo limpió con el trapo de antes

- Lo sé. Sólo quería saber si alguno de los aventureros pasa por aquí... Quizá alguno de los que consiguió salir vino a ahogar aquí sus penas... - digo mientras deposito mis dedos encima de las 2 monedas... el doble de lo que nos quería cobrar por unas bebidas que no hemos pedido. Yo al menos estoy convencido de que la mía no es "sin alcohol". - No pierdes nada por recordar alguna de sus historias, de hecho ganas algo. - le miro amablemente...