Partida Rol por web

Arenas se encogió de hombros y tomó asiento en la mesa, mientras su armadura completa dejaba escapar un chirrío metálico. Acto seguido, se hizo cargo de una de las jarras mientras miraba al humano lanzarse directamente a preguntar al posadero.

Alojamiento y manutención pagados... dio un sorbo largo a su cerveza. Podría tirarme aquí varias semanas si además encontráramos mozas de buen ver.

Estiró las piernas, reclinándose lo que las placas de metal le permitían, y observó mientras esperaba la respuesta de Cuervo.

-Ammm el jóven Nanzher...... Oreal era su nombre verdad??, al igual que varios hijos nobles que se han perdido, la gente murmura al respecto, pero es lo suficientemente inteligente como para no pasar de rumores, no entiendo quien pueda llegar a hacer un gesto tan osado, ninguna casa mayor se atrevería, ohh noo!!!

-El viejo seguía limpiando un viejo vaso con un trapo sucio y desgastado, con un escupitajo intentaba sacar inútilmente algo mas de brillo -Aunque se vio a uno de esos jóvenes recientemente........ Sus ojos ahora se dirigian atrevidamente a un frasco de propinas encima de la barra.

-Y para lo que buscas, Joven elfo.... -Señala con uno de sus arrugados dedos un rincón, donde unas muchachas variopintas se agrupaban, murmuraban y reían entre si.

Ozymandias se acercó al grupo y se mantuvo en las sombras de una de las columnas del lugar mientras escuchaba al "Cuervo"

El joven se mantuvo en silencio dejando que los elfos continuaran llevando el gasto de la conversación. Ya habría tiempo para ayudar a su modo si es que hacía falta

 Como no, la avaricia es la llave.

 El elfo de oscura caballera saca un disco de dorado metal para posarlo encima del mostrador, ante el anciano hombre.

 - ¿Cual de ellos fue de los últimos en verse? ¿Y dónde?

 Dijo a la espera de ver la reacción del viejo hombre. También lanzó un vistazo a los alrededores por si alguien prestaba atención a su conversación.

Montaña no dijo nada, era consciente de que venía de comer en la casa del patricio, o aquel posadero se habría arrepentido de su invitación a comer y beber sin control. 

- Nuestro compañero volverá pronto, y nos gustaría disponer de habitaciones privadas. También nos gustaría conocer los rumores, pero los rumores quizás no se deban decir en una taberna. Quizás arriba, en nuestras habitaciones, cuando el local ya se haya vaciado...

Después, volvió a guardar silencio, cuanto más dijese más metería la pata. Hacía tiempo que prefería hablar así a los desconocidos, con frases cortas y diciendo sólo lo que quería decir, había menos riesgo de meter la pata.

Gregory Reaper escuchaba atentamente la conversación, ya se le habian adelantado asi que decidio guardar silencio, sonriendo de oreja a oreja ante el comentario del posadero acerca de "las mozas de buen ver".

El elfo parecía no estar haciendo caso a la conversación, girado en su silla, con una jarra de cerveza en la mano, daba la impresión de centrar toda la atención en las mozas que había a disposición de los bolsillos menos vergonzosos.

Aún así, algún gesto de su rostro indicaba que seguía a la conversación.

Los ojos del feo hombre se hincharon, como si se fueran a salir de sus enormes cuencas al ver el medallón dorado que mostraba Degonas y dejaba sobre la mesa, durante unos instántes lo observaba, lo mordia, lo olisqueaba y lo curioseaba, mientras al mismo tiempo lanzaba fugaces miradas al jóven Elfo Lunar; finalmente rompe su silencio.

-Buen intento muchacho, creo que eres buena persona y haré de cuenta que te han robado al venderte ese medallón, pero no es de oro, es simple hierro findido, bañado en polvo dorado...... Tomalo de vuelta y busca al que te lo haya vendido, hazle una fea cicatriz de  mi parte, odio a los estafadores. -Inmediatamente lanza una fría mirada a Degonas, pero se voltea hacia el "sangre de gigante" antes de que pudiera revelar si la última frase se dirigía a él....

Lo entiendo señor, -Empieza vacilando un poco -pero es que no logro recordar nada, podría hacer memoria, pero la verdad eso es desgastar mi mente por nada -Esta vez la petición de oro era menos sutil.

Rápidamente pierde interés en los hombres que estaban en la conversación y se interesa mas en los que podría sacar partido.

-Señores, si me permiten hacer una sugerencia -indica a Gregory y a Pertnal mientras llena de nuevo sus pintas -La peliroja tiene descendencia del lejano Calimshan y dicen que de verdad es candela pura entre sabanas, también hay una que viene de las lejanas selvas de chult, pero en estos momentos está.....atendiendo otros asuntos, la morena suele ser brusca y dominar a sus clientes, alguno ha salido con moretones, pero todos satisfechos; y la que no tiene lois dientes delanteros, bueno, su boca ha saboreado mis placeres y puedo decirles que vale eso en oro!!; aunque si los señores tienen gustos especiales, bueno, digamos que quedaría entre nosotros y las monedas.

Calla un momento mientras reflexiona -Creo que Lord Nanzher no ha incluido esta clase de comida en su pago, asi que tendrán que pagar por ellas, pero les digo, son lo mejor que podrán conseguir en esta ciudad....

Aun manteniéndose entre las sombras Ozymandías intentó entender todo lo que se estaba hablando... y llegó a la conclusión que mucho de ello no era importante, pro lo menos para el.

Dando un paso al frente abandonó las sombras y se acercó al hombretón que era su amigo comentando en voz no tan baja - Supongo que debe tener algo de información. Quizás debamos conversar con el en un lugar más tranquilo... o cuando haya menos gente escuchando alrededor - insistió, repitiendo, con otras palabras, las del Montaña

Gregory tenia su mirada fija en la bella pelirroja.

- No esperaba lo contrario ¿De cuanto estariamos hablando? - pregunto al Cuervo.

El posadero mostraba una mirada de desdén ante la aparición del extraño Ozymadías, sin sorpresa el tabernero vuelve hacia Reaper -5 de oro por la morena, 3 por la peliroja, y 1 de oro por la mueca, la castaña y aquella de los senos enormes, las demás son 5 de plata....... Aunque si buscas economía, bueno, se puede conseguir por algunas pocas de cobre.

Alrik empezaba a impacientarse. El era de otra madera, prefería las mujeres que no se acostaban por dinero, y prefería a los hombres que no necesitaban dinero para buscarse una mujer. Claro que él no era de esos y no es que tuviese un gran curriculum como conquistador, y desde luego necesitaba semanas de contacto para que la impresión de amenaza que representaba siempre fuese remitiendo y dejase ver al hombre que había debajo, antes que alguna mujer aceptase siquiera un halago suyo, pero aún así era preferible a pagar por una mujer que fingiría un interés que no sentía. Al menos casi nunca, porque también se había encontrado alguna mujer (incluso alguna Dama de la alta sociedad) que se había acostado con él por morbo, al fin y al cabo él era un hombre muy grande, con manos muy grandes... y a veces algunas mujeres estaban demasiado cansadas del sexo ordinario y buscaban alguna experiencia más... grande.

Aún así, estaban en medio de una misión, el tabernero ofrecía información, pero todo se estaba retrasando porque sus nuevos compañeros estaban buscando una prostituta. No quedaba más que tener paciencia y esperar a que el ritual de regateo, y el posterior ritual de apareamiento, hubiesen terminado.

Como no había mucho más que hacer mientras, Alrik se centró en otros placeres de la carne, nunca mejor dicho, y comenzó a incarle el diente a un tierno jamón y a vaciar un par de jarras de cerveza. No tenía hambre, pero sí tenía un gran estómago para procesar, y una buena tripa para almacenar, y sabía que en unos días los rigores del trabajo, las caminatas, y las insípidas raciones de viaje compensarían el exceso de estar tomando dos comidas seguidas.

 El elfo de largo cabello azabache mantuvo una expresión neutra en su rostro, fría tal vez por la falta de simpatía sobre los asuntos en los que estaban derivando la conversación.

 - Regresando al tema original, sr. Cuervo, cual sería el precio de su atención acerca de la información que le pregunté. ¿Cual de esos jóvenes fue de los últimos en verse? ¿Y dónde?

Precio de la información??, ohh amigo mio, creo que estás equivocado -El tabernero intentaba expresar una sonrisa que mas que ser afable, pasaba a ser horrorosa debido a su feo rostro -Creo que la informacón debería ser.... libre para todo el mundo!!, pero si deseas hacer alguna donación por el buen servicio prestado, este tazón puede servir...... su capacidad es de 20 monedas -Guiña el ojo con expresión de complicidad -y ya sabemos que el oro brilla mas que la plata y el cobre, no es así??, y el brillo estimula la mente muchacho, quizá recuerde algo después de todo..... o no?.

Era claro su cometido, un cuervo siempre actuaba hipócritamente, bajo cuerda, oportunista!!, pluarty demostraba no ser diferente, pretendía llamarse honorable, teniendo comportamientos diferentes disfrazados de buenas voluntades.

20 monedas de oro era su petición, y parecía estar impacientándose, no hablaría si no recibía su dinero antes!!

Arenas dejó de mirar a las muchachas, dándose cuenta en ese momento que estaba sin blanca ya que había gastado las últimas en un templo como donación por las curaciones que necesitó tras aquel ataque que sufrió en una emboscada en el camino.

Miró a la morena, le hizo un guiño y vocalizó un silencioso Más tarde en dirección a ella.

Miro entonces el tazón sobre el que había hecho referencia el tabernero y sonrió, dando otro trago a la jarra de cerveza. Compañeros, estoy sin blanca. dijo al grupo con una sonrisa. Así que alguien va a tener que adelantar ese dinero...

Miró al resto esperando que alguno tuviese iniciativa en esa clara extorsión que estaban sufriendo. Cuanto antes pag... donemos al Sr. Cuervo, antes estaremos de camino a cobrar nuestra paga.

Gregory saca 5 monedas de oro y las pone en la mesa.

- Dado que uno esta sin blanca somos 4, asi que ahi va una cuarta paga del refrigerio de la memoria.

- Siempre pago mis deudas posadero, pero ahora mismo no dispongo de tanto dinero. De todos modos le haré saber al señor Nanhzer que dispone usted de información que pudiera ayudarnos a encontrar a su hijo pero que necesita un donativo para dárnosla, quizás él pueda adelantarle ese donativo que es, sin duda, extraordinariamente generoso.

El gigantón esperó unos segundos a que la amenaza velada surtiese efecto, para a continuación ofrecer una salida rápida y sencilla. 

- También puede considerar el invertir en nuestro trabajo, si logramos el objetivo conseguiremos el dinero que nos pide y pagaremos la deuda, de hecho si la información es buena, podríamos subir incluso a 30 monedas de oro cuando el trabajo esté cobrado. Como dije antes, siempre pago mis deudas.

La sonrisa terrible volvía a su rostro a ver las cinco doradas de Gregory, pero rápidamente empalidece al ver al gigantón acercarse, con esa actitud tosca y ruda, que podría hacer un debilucho tendero de taberna ante tal bestia?.

Con mirada asustadiza intenta respponder a el montaña -S...ss...si se...señor, no digo que no,.... es decir yo se que..... si eres un hombre que paga.... pero no puedo..... e...e...e... esta bien señor, puede ser buena idea invertir,..... treinta monedas serán cuando cumplan su cometido..... verdad??. coge estas cinco monedas, como acto de buena fe..... con...con...confio que pagarás.

-Saca un pañuelo sucio y lleno de grasa de uno de sus bolsillos mientras traga una saliva espesa, se sirve para él un vaso de cerveza que se bebe de un sorbo, y ofrece una botella de vino a sus compañeros -Verán, yo distinguí al jóven Leiyraghón, Kalman era su nombre, los rumores dicen que visitó la mayoría de las tabernas de la ciudad antes de su dessaparición, dicen que la última vez que se le vió fué en el cubo Oxidado, una taberna nada recomendable para un chico, menos si se trata de un chico noble, muchos peligros rondan esas calles y a menudo la gente sale cortada en el mejor de los casos, pero juro que no se nada mas.... lo juro...

Ozymandías sonrió ante el cambio de de actitud del posadero. Conocía a su amigo y no era la primera vez que notaba como la gente optaba por acceder a sus pedidos solo por su tamaño

- Así que "El cubo oxidado", no? Supongo que nos podrás indicar como llegar allí. Nosotros no somos, precisamente, un grupo de nobles indefensos y nos arreglaremos para llegar enteros, jaja - bromea el Chaman mientras acaricia sus armas.

- Por cierto... Decís que lo habeis distinguido... donde? En ese Cubo oxidado? Acá? En otro lado? - pregunta curioso - Sería bueno saberlo ANTES de ir allí, donde, según nos decís, lo vieron por última vez -