Partida Rol por web

Rodney acompaña a Nikola y a Thomas a la enfermería. No va a dejar a su amigo solo, y menos con esa chiflada.

Me acerqué un poco más a el, tenia deseos de secarle el agua que escurría de su pelo, pero, tenia miedo y no entendía el porque; tal vez era su mirada fría e indiferente, desvié la mía de la suya. -Lo siento…- susurré. Al volverlo a mirar mis ojos estaban húmedos, pero esta vez una lagrima bajo por mi mejilla ¿Qué me sucedía? –yo debería estar en ese estado, no tu…- me encogí de hombros –creo que ya es muy tarde para lamentarlo; deberías volver a tu cama Thomas- rápidamente lo miré a sus ojos, no era capaz de sostenerle la mirada.

De acuerdo...nos vemso en los jardines... - Me dirijo a mi sala comun pues Marjorie estra preocupada

 La mirada de Thomas se endureció, buscaba los ojos de Nikola. Sin embargo, hablaba en voz baja. Estaba un poco pálido y le temblaban ligeramente las manos

¿cómo que tú deberías estar en este estado y no yo? Tú elegiste torturarnos, sin siquiera saber el porqué. No te lamentes ahora Nikola, esto es lo que querías. ¿No es cierto? ¿disfrutaste haciendo sufrir a Leroy o abriéndome la cabeza?

Thomas permanece unos interminables segundos en silencio. Luego se acerca despacio a Nikola, y con el pulgar le seca lentamente la lágrima que corre por su mejilla. Con esa misma mano le coge la cara suavemente para que le mire a los ojos. Su voz es suave

Nikola, escuchame bien. Tú no eres asi. Esta lágrima lo demuestra. Busca dentro de ti lo que hace surgir esta lágrima. Búscalo y aceptalo.  Lo que está pasando en Hogwarts no está bien. Tenemos que pararlo. Yo creo en ti

 Luego Thomas se dirige lentamente hacia la puerta

-No era mi intención que te golpearas la cabeza y no quería torturarlo –le hablé dándole la espalda –pero nunca me creeras; me siento presionada- hablaba en voz baja y empuñe mis manos con fuerza –tal vez tengas razón, las cosas en Hogwarts no están nada bien – esbocé una leve sonrisa, pero el no la vio. Me di la vuelta y caminé hacia la puerta; limpiaba las lagrimas de mi rostro –mejorate… – me detuve y lo miré –en verdad lo siento y ¿sabes? Quisiera cambiar, pero no es fácil…además, ¿para que? –le dedique una triste sonrisa y me acerqué a el; su cuerpo rozaba el mio y lo mire a sus ojos –solo espero que me perdones- le susurré y limpie un poco su rostro mojado con la manga de mi túnica; no pude evitar morder mi labio inferior.

Tom sonrie con aire risueño. Habla más animado y con un aire de picardía Para que va a ser, boba...para que seas más feliz. Querer cambiar es el primer paso, asi que vas muy bien. Y claro que te perdono Tom se acerca muy lentamente a ella y le da un tierno beso en los labios. Muy suave y delicado, carnoso y sentido. Nota el sabor salado de sus lágrimas. 

Nos veremos pronto Nikola, solo espero que no sea en una mazmorra dice mientras le guiña un ojo

Creo que ya estoy mucho mejor, voy a ver si la señorita Pomfrey  deja que me marche. Cuidate

Thomas se marcha de la enfermería

Sonreí cuando me beso y noté un leve cosquilleo en mi estomago –no será fácil- murmuré y lo seguí para salir de la enfermería.

Al estar fuera de ella me detuve –yo también espero que no sea en una mazmorra- le guiñe un ojo con picardía –mejórate cielo. Nos vemos –me despedí con un gesto de mano y me encaminé hacia mi sala común.

Cuando Nicola, Thomas y Rodney dejaban la mazmorra, Leroy se levantó del suelo, donde estaba tirado, y recuperó su varita. Pensó por un momento en acudir a la enfermería, pero dándose cuenta de que allí estaría Nicola, y pensando que lo más grave que tenía serían algunos moratones descartó la idea.Cogió el camino de su casa, caminando renqueante mientras recordaba lo ocurrido. El deseo de venganza aún ardía en su cerebro, pero al recordar las últimas palabras que sus compañeros habían dicho a Nicola, se dio cuenta de que si se vengaba de los slitterin a base de maldiciones, caería más bajo aún que ellos, y su cara enrojeció. Su rabia se fue serenando,pero no desapareció del todo. Por el contrario, una risa maliciosa apareció en su cara. Sí, llevaría a cabo su venganza, y lo haría con su estilo preferido: las bromas. Llegó a la casa de Ravenclaw y se sentó en un sillón.