Cuando mas desesperada parecia la situacion visteis llegar helicopteros del ejercito. Uno de ellos se coloco sobre vosotros y os examino desde el aire.
- ¿Les han mordido?.- pregunto un soldado con tono imperativo.
Les costo un poco decidir pero finalmente bajaron una cesta metalica y les hizaron uno a uno. Al llegar arriba una pareja de soldados les apuntaron desconfiados mientras otro examinaba uno por uno que no portaran armas y que no tuvieran heridas de mordisco.
Fue algo costoso, tardaron demasiado tiempo en rescatarles a todos pero finalmente les reunieron en el mismo helicoptero, rumbo a un campo de refugiados, sin que dejaran de apuntarles en ningun momento.
Todas las armas os seran requisadas, al menos de momento.
Me mantengo donde me dicen y como me dicen
Solo faltaría que me matara el ejército que pago con mis impuestos.
Entre el alemán, al que se la tengo jurada desde sus comentarios, y el trato que nos dan... no parezco de buen humor
El aleman entro en el helicoptero y presento sus credenciales. Los soldados se miraron entre si cuchicheando. Uno de ellos tomo un telefono de grandes proporciones y dijo algunas palabras codificadas por el. Le respondieron algo que no escuchasteis.
- Vamos señores, rapido, tenemos que seguir las labores de rescate.
Al escuchar las hélices del helicoptero detuve mi marcha hacia el pueblo y suspiré, aliviado... Ciertamente, no me apetecía nada entrar en ese lugar. Cuando aterrizó, seguí a los otros dos con prisa y traté de subir con mi equipaje. Mostré la espada a uno de los soldados.
¿Habría mucho inconveniente con esto? Es de entrenamiento, pero podría salvarme la vida si vienen más cosas de esas. - la tendí por el mango una vez dentro, no porque estuviese afilada, sino por costumbre - Puede custodiarla usted hasta que lleguemos donde sea...
- No se preocupe señor, se las guardaremos. Por motivos de seguridad no puede volar con ellas.- dijo el agente guardandolas en un lateral del helicoptero.
Tengo un avatar del agente pero se ve la foto toda negra, por eso no lo pongo.
Me dirijo a uno de ellos, mientras me acomodo en mi asiento algo incomodo No creo que les haya sentado muy bien que escondiera una pistola sera mejor ser amable con ellos..
-Yo soy medico, asi que si necesitan mi ayuda para cualquier cosa no duden en decirmelo, mi deber es ayudar a los que lo necesiten..
Consciente de lo desagradecido de mi actuación, procuré sonreir al soldado y asentí a modo de respuesta antes de dirigirme nuevamente a él.
Estupendo, gracias. Y muchas gracias también, y sobre todo, por recogernos... supongo que sabreis algo de lo sucedido, sin duda el piloto debió avisar por radio... ¿Es un caso aislado, o hay mas de esas... cosas?
La pregunta fue casi una súplica, pues no podía dejar de pensar en Adriana y en mi familia, y esperaba que se encontrasen bien... A pesar de la conversación con el Alemán y de que no haber visto ninguna señal de movimiento cerca del pueblo, no podía perder la esperanza, no tan pronto...
- La infectacion es a nivel mundial señor, estamos intentando contenerlo, hay ciudades menos afectadas que otras y tratamos de mover a los supervivientes de forma segura hasta los campos de refugiados, es todo lo que sabemos y podemos hacer por el momento.- Aseguro. Si sabia algo mas se lo guardo.
- Nos vendra bien otro medico, los refugiados tambien llegan con huesos rotos por caidas o ataques de panico.