Motivo: Autodefensa
Dificultad: 0
Habilidad: 4
Tirada: 4 5 7
Total: 5 +4 = 9 Éxito
¡Perdón! He tenido el finde movidito.
Pues me temo que Stan te ha impactado con sus disparos. Tendrás que descubrir como se siente tu personaje y si quieres decir o hacer algo en especial pero los dos tiros han sido mortales >_<
Ni siquiera me lo hubiera esperado. Aquel hombre con gafas y aspecto de intelectual, al que habíamos estado protegiendo durante la misión, había abierto fuego sobre mí sin que yo le hubiese dado un motivo aparente. Sin mediar palabra. Sin opciones. Simplemente había disparado. Recibí aquellos dos disparos en el pecho, mientras mi mente intentaba procesar lo que acababa de suceder.
Tendido en el suelo, escucho cómo aquella rata traidora ahora intenta convencer a Velasquez de que no le dispare. Lógico, teniendo en cuenta que no pillará a mi compañero desprevenido. Entre estertores de dolor que provocan que escupa sangre por la boca, no puedo evitar dejar escapar una carcajada ante la hipocresía de Wingett. Intentaba salvar el pellejo y pedía a Velasquez que no se resistiese, quería negociar con él después haber abatido a un hombre a sangre fría, por la espalda, y sin ofrecerle ninguna opción.
¿Por qué? No había duda. Las muestras. Las malditas muestras. No iba a entregarlas a quienes nos habían contratado. Era la única posibilidad que se me ocurría para que aquel hombre hubiera actuado como un cobarde. Wingett nunca había querido completar la misión, tenía sus propios planes. Sentí que la ira me embargaba mientras la vista comenzaba a nublárseme. Me había embarcado en una misión de alto riesgo y no iba a morir a manos de unos dinosaurios luchando por mi supervivencia o defendiendo a mis compañeros. No. Iba a morir traicionado por un disparo de alguien a quien teníamos que escoltar. Stan Wingett. Pensé en mi pequeño Neil. Nunca lo vería crecer, ni madurar y convertirse en un hombre por culpa de aquel psicópata. Él sabía que tenía un hijo, lo había dicho en el helicóptero, pero ni siquiera eso le había detenido al apretar el gatillo.
-Mátalo, Velasquez... -conseguí articular, con mis últimas fuerzas-. No dejes que se salga con la suya, tú puedes... Y dile a mi hijo... Dile... Dile...
Sentí que un nuevo estertor recorría mi cuerpo. Traté de resistirme, pero ya no me quedaban fuerzas. Con los ojos entrecerados, la boca manchada de sangre y una expresión de dolor y sorpresa recorriendo mi rostro, todo terminó por convertirse en oscuridad para mí. El dolor había desaparecido.
Realmente a Velasquez le costaba entender lo que sucedía, pero solo podía imaginarse lo peor. Había visto hombres y mujeres morir frente a él numerosas veces. En explosiones, alcanzados por metralla, atropellados, y entre muchas otras.
Pero jamás, jamás había sido presente de un acto de traición y estaba más que seguro que eso era lo que acababa de presenciar cuando escucho sonido de otra arma, arma que no era la que Guillermo acababa de disparar y que tampoco se trataba de ninguna de las 9mm que estos llevaban, acto seguido después de dos tiros en seco escucha como su compañero se desploma y como Stan lo apunta rápidamente.
Se acerco a Martínez mientras escuchaba a Wingett disculparse y mencionarle que no moviera ni un solo musculo, oh la ironía. El hombre que tanto se habían encargado de proteger acababa de dispararle a este hombre en seco y sin escrúpulos. Y lo tomo por la cabeza mientras observaba su mirada perdida con una boca manchada de sangre, ahogándose y esforzándose por decir cada palabra. Joseph no tenía tiempo para soltar lagrimas, tenía un nudo en la boca del estomago, especialmente por las últimas palabras del ya aparentemente fallecido.
La adrenalina corría por sus venas y su piel se erizaba, estaba más que seguro que Stan no podría contra su nivel militar, sin embargo no podía confiarse de un maniaco como este, tal vez la tembladera en sus manos y su mala disciplina de gatillo harían que se le saliera un tiro sobre él y ya era hora de actuar. Con su pistola aun en la mano dio una mirada a están y se lanzo de manera rápida a un lado y disparo, tres casquillos cayeron en el piso y fueron dirigidos hacia la zona de su estomago.
Motivo: Autodefensa.
Dificultad: 0
Habilidad: 4
Tirada: 1 7 9
Total: 9 +4 = 13 Éxito
Ahora debes hacer tú la tirada de autodefensas; si la superas podrás evitar el disparo y decidir qué ocurre con Jospeh. Si fallas la tirada tendrás que narrar que los disparos han impactado contra ti >_<
Aviso por adelantado y pido disculpas, tengo ahora un par de días locos pero espero poder centrarme y postear bien el sábado. Este mensaje puede ser mi último, así que mejor lo hago bien :)
Como si quieres postear el lunes, tu no te preocupes :)
No las tenía todas conmigo de todos modos. Sabía que estas personas no llevarían bien una traición, sabía que no iba a funcionar si intentaba llegar a un acuerdo. Tienen un sentido del honor que no comparto, no con tanta fuerza como ellos. Es obvio que era una estupidez. Y pese a todo, lo intento porque sigo siendo un cobarde y quiero pensar que no hago nada malo. Como si matar por la espalda a alguien que me ha estado protegiendo, por más que lo haga por una causa justa, no fuera un acto deleznable y sin justificación.
Por eso, cuando Velasquez se niega a cooperar y me apunta rápidamente, una parte de mí sabe que era la reacción más obvia, y otra me susurra mentalmente que soy un idiota por creer que saldría de aquí sintiéndome como si fuera el héroe.
Una tercera parte de mí sencillamente piensa algo como "Ah, joder" y abre fuego. Ya le estaba apuntando, y apretar el gatillo es más un reflejo nervioso por puro miedo que una decisión fría y consciente. La isla parece haber despertado al animal irracional que solo quiere sobrevivir.
Disparo mientras me aparto con una especie de respingo, casi sin creer lo que estoy haciendo. No porque no pueda creerlo, sino porque prefiero refugiarme en la idea de que el que abre fuego no soy yo.
Bueno. Ya sabíamos que seguramente no saldríamos con vida de este sitio. Yo solo estoy haciendo lo que deberían haber hecho los dinosaurios. Mierda, todo habría sido más fácil si esos bichos se hubieran merendado a alguno de ellos. Pero tenían que ser tan buenos en su trabajo...
Motivo: Autodefensa
Dificultad: 13
Habilidad: 3
Tirada: 1 8 10
El dado ha explotado: 3 9 10
El dado ha explotado: 1 1 5
Total: 25 +3 = 28 Éxito
Lo último que esperaba era una tirada tan loca... Madre mía.
No describo el efecto de los disparos por si aún hay oportunidad de librarse o por si hice mal la tirada, pero van a matar. Ya que voy a ser malo, hagámoslo con ganas.
Sinceramente, yo tampoco me lo esperaba XDD
Por desgracia Joseph no tiene opción de librarse ante la tirada enfrentada que habéis hecho (13 vs 28), así que el soldado Velasquez tendrá que descubrir como se siente su personaje y si quiere decir o hacer algo en especial pero al igual que antes los tiros han sido mortales >_<
Sabia que algo andaba mal en esta partida cuando literalmente nunca falle los dados, pero a fin de cuenta siguen traicionandome los muy malditos.
Recostado a un lado y apuntando al lado del cuerpo de su ya fallecido compañero Joseph escuchó dos disparos y vio un pequeño fogonazo salir de la pistola del hombre al que había disparado. Sin embargo justo como temía el hombre disparo primero antes de que él pudiera hacer algo.
“¿Qué? No… Esto… No…” Pensó luego de soltar involuntariamente su pistola. “¿Es así? ¿Enserio? ¿Esto es como acaba todo? Mierda…” Llevo su mano a su pecho y la vio, Dios realmente le habían disparado. Le costaba creer que ese fuera su fin. Se arrastro con las fuerzas que le quedaban y se recostó de una de las numerosas cajas de madera que habían en la cubierta. Vio a Stan y sonrió con una mirada perdida. Su sonrisa estaba marcada por unos blancos y ensangrentados dientes y una gota de la misma que recorría su labio inferior derecho y que luego correría por su barbilla y caería en su ya ensangrentada ropa.
Frunció el ceño con dolor mientras aun intentaba sostener su sonrisa y con unas cuantas lagrimas recorriendo su rostro, bajo la cabeza y procedió a decir —Sabes Wingett, hubiera dado mi vida por ti… Así como la acabo de dar para intentar vengar a Martínez…— Tosió respirando con dificultad y le dirigió por última vez la mirada a Stan —Sabes…— Escupió su goma de mascar ensangrentada a un lado —Yo salí de Kuwait sin un rasguño ¿Qu-Qué ironía? ¿Verdad?
Con sus últimas fuerzas dirigió la mano a su chaleco por una última vez y busco su empaque de goma de mascar, la cual tenía una tablilla restante que desempaco y llevo a su boca. Su mirada aun seguía dirigida a su asesino, recostó su cabeza de la caja y acomodo su gorra para que le tapara la cara y luego simplemente, todo el dolor, toda la rabia, toda la ironía, todos sus problemas, todas sus expectativas y metas… Todo simplemente había terminado. No más dolor ni más clamor, resulto que después de todo este si sería un viaje solo de ida y sin retorno. Recostado de la caja cayó a un lado sin ninguna expresión en su rostro aun con los ojos abiertos.
Ahora estás solo, has eliminado a los dos soldados que te escoltaron en la misión.
Ir al puente de Mando y arrancar el barco.
Agotado, dejo caer la pistola tras vaciar el cargador. Durante unos minutos permanezco casi inmóvil, tratando de recobrar el aliento, respirando agitadamente ante los cuerpos sin vida de quienes hasta hace poco me habían protegido. ¿Habrá valido la pena el crimen, o moriré de todos modos como un traidor sin haber alcanzado mis objetivos?
Bueno, eso no importa ahora. Toca moverse.
Me arrodillo junto al cadáver de Velasquez y le quito con esfuerzo el arma. No estoy seguro de ser capaz de utilizarla, pero es mejor que ir desarmado.
"Gracias por todo", murmuro con el ceño fruncido. "Siento que hayamos acabado así."
Me incorporo, me limpio el sudor de la frente y me dirijo con paso decidido hacia el puente de mando. Espero tener suerte y que lo hayan dejado todo listo para partir.
Pues eso, voy al puente y trato de arrancar este trasto para largarme de la isla.
Con un sonido que supo a gloria, pudiste escuchar como el motor empezó a funcionar. El barco lentamente comenzó a navegar, aumentando su velocidad poco a poco.
Aquello parecía increíble pero era cierto: habías zarpado y a cada minuto que pasaba la isla estaba más y más lejana.
¿Sería por fin el momento de tu respiro?
El sol ya brillaba con fuerza, sentir esa sensación después de haber sobrevivido más de 24 horas en aquel infierno era la recompensa más fantástica del mundo.
El agua resplandecía con armonía y la brisa golpeaba tu cara mientras se seguía un rumbo marcado por la radio: ¿significaba que la misión estaba cumplida?
Debes narrar el que será tu último post en la partida, tus conclusiones finales como Stan y qué es lo que hará en un futuro. Como científico además deberás aclararme como intentarás irte con la información
No soy un experto navegante, pero recuerdo que durante mi infancia mi padre me llevaba a acompañarle con un pequeño barco, y todavía soy capaz de, al menos, orientarme y comprender cómo se usan las herramientas más básicas. Con estos pensamientos en mente, dirijo lentamente la embarcación hacia la costa, alejándome del infierno verde en que se ha convertido Isla Nublar.
En algún punto a mitad del camino, me deshago de los cuerpos de quienes fueron mis compañeros. Podrían darme problemas si me encuentro con alguien antes de llegar a puerto. De todos modos, estoy seguro de que a ellos ya no les importa. Y el mar es mejor destino final que el estómago de un tiranosaurio.
Me informé antes de embarcarme en esta misión, y sé de algún puerto cercano en el que podré detenerme disimuladamente y desaparecer antes de que esos cabrones de DNAT entiendan lo que ha pasado. Si es que algún día lo entienden. Por lo que a ellos respecta, los tres hemos muerto. Y ya dejaron claro que en realidad nunca hemos pisado la isla... a veces, el secretismo se vuelve en contra de uno.
Después buscaré a mis verdaderos jefes y les daré tanto los embriones como la información. No sin antes guardarme copias de todo lo que se pueda copiar. A modo de seguro de vida, en parte. Y también por pura curiosidad científica. Sigo siendo un hombre de ciencia, además de un asesino. Y, pronto, con dinero suficiente como para dedicar el tiempo que me queda a aprender más sobre lo que Hammond logró recrear en esa isla. Tal vez eso me ayude a conciliar el sueño por las noches, cuando recuerde lo que he hecho para llegar hasta aquí.
A lo lejos me parece ver tierra firme. Esbozo una sonrisa. Parque Jurásico ha caído, pero el sueño perdurará de un modo u otro. La vida se abre camino.
Entiendo que esto es el final. Aunque a lo mejor ahora viene un epílogo donde me come un plesiosaurio :)
Cuando parecía imposible, la voluntad del ser humano se sobrepuso al instinto de la naturaleza, una naturaleza ya extinta que gracias a la ciencia había sido devuelta a un mundo donde ya no eran los reyes.
Los hombres han cometido muchos pecados, y uno de ellos siempre ha sido jugar a ser Dios pero... ¿compensa tanto sacrificio por algo tan codiciado como el poder? ¿O es el amor a la ciencia lo que realmente está detrás de todo?
La cuestión es que hoy un hombre había sido capaz de llegar más allá en una cuenta atrás por su propia supervivencia.
El mar ahora estaba más hermoso que nunca, la brisa acompañaba ese sabor dulce de la tranquilidad de haber llegado hasta el final... pero aún quedaba una pequeña chispa de duda... era una pregunta sencilla...
"y después de todo esto, ¿qué pasará?"
Llegar a los muelles de la ciudad era tan solo el último paso, el más sencillo. Allí os estarían esperando probablemente los burócratas de la empresa que os contrató para tal misión clandestina...
O al menos eso era lo que esperaban...
Stan logró llevar el barco a un muelle distinto al que tenían que atracar, donde DNAT les esperaría para recibir a sus "héroes", pero ese barco nunca llegó a su destino.
En pocas horas, el contacto del científico con la empresa para la que realmente trabajaba, lo localizó para acto seguido sorprenderse de que hubiese completado su misión con éxito sobreviviendo hasta el final.
El encuentro en la sede fue de lo más espectacular, allí, rodeado de sus colegas científicos todos estaban expectantes de oír las historias de aquel que había pasado un día completo en Jurassic Park y había vivido para contarlo... pero la cuestión era ¿había merecido la pena?
Aprovechando su influencia recién adquirida por el éxito, pidió un favor a sus superiores. Sabía que el mérito de su éxito era también gracias a Guillermo Martínez y Joseph Velasquez, dos soldados que le protegieron hasta el final y que sin saberlo, habían sido cómplices de un plan que se escapaba de sus mentes mundanas.
Con tiempo y buenas palabras, logró que su empresa localizase a las familias de los fallecidos, dándole la oportunidad de devolverles una explicación sutilmente acompañada de unos cheques por varias decenas de miles de dólares (una pequeña parte de lo que él había ganado) aunque nunca serviría para reemplazar a los seres queridos perdidos.
El hombre seguiría cometiendo pecados contra la naturaleza, pero al menos Stan sabía que pequeños grupos no cesarían en la lucha por defender los principios de la ciencia.
Quizás, ahora que se había convertido en una persona respetada y de renombre había llegado la hora de transmitir sus memorias para que otras personas aprendiesen todo aquello que también hizo...
FIN
¡Y se acabó! Espero que hayáis disfrutado mucho de la partida, y que nuestros queridos militares no odien demasiado a su compañero científico XDD Espero que ese plot twist os haya como mínimo sorprendido.
Infinitas gracias por confiar en mí y en la partida, habéis sido jugadores fantásticos.