Partida Rol por web

La ermita de la virgen de la cueva

2. Llegada a Ataun

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06/02/2015, 13:30
Roberto Manecho

-¡Compañeros no aflojéis el paso, pues ahí cerca, en la vereda del camino, veo un casa, y por su facha y el humo que emana de su chimenea  creo que  el señor, si no esta sordo esta día y ha escuchado nuestras plegarias, invitanos a probar por sí allí hubiera buenos cristianos que puedieran acojernos y  calentar , que llevo helada hasta la misma alma!-

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10/02/2015, 20:11
Director

Os acercáis al caserón. Es un edificio de dos plantas, podéis ver luz en las ventanas de arriba. Os acercáis al portón de madera y lo golpeáis con vuestros nudillos. Enseguida se abre la puerta, y aparece un soldado en el umbral.

-Buenas tardes caballeros. ¿A quien debo anunciar?

Parecería que os estuviera esperando. Detrás de él, se entrevé un vestíbulo, y un segundo centinela apostado en la pared del fondo, portando una alabarda.

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10/02/2015, 22:18
Roberto Manecho

- Vuen señor no es menester a fe mía ni de mis compañeros el molestaros, más fuera se apaga el día con un frío helador que apocaría hasta las mismas llamas del averno. Si a bien tuviera dejarnos entrar para calentarnos el cuerpo entumecido, nuestras almas os lo agradecerían...

Le sonrio a él, y de soslayo al que está al fondo, mientras saco, animosamente una bota de vino de mi zurrón.

-Venga vuestra merced un trago, que buenos son estos caldos que muy a bien nos han venido hasta llegar aquí, pues templan el frío a la par que prenden el espíritu...

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11/02/2015, 00:37
Alfonso Miranda

El camino hasta este pequeño pueblecito había sido agotador, tenía los pies molidos et el alma cansada, uno estaba acostumbrado a las fatigas del viaje,pero andar con nieve siempre es algo agotador.

 Non sabía bien dónde estábamos, pero poco podíamos andar ya. Habló Roberto pidiendo lo que todos deseábamos. Un techo et un poco de lumbre.

 El guarda paresciome que nos esperaba. Non recordando yo si habíamos anunciado nuestro viaje, creí conveniente ser prudente. me quité la capucha  et disje:

 A omnes temerosos de Dios cansados de caminar ¿Estámos en Ataun?   froté mis brazos uno con otro et desje escapar el vaho de mi boca.

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11/02/2015, 11:29
Uloxio Arrugas

Hacía mucho que no veía a mi amigo Alfonso, concretamente desde aquella época de la guardia del castillo en Burgos y el valle del Mena. Et que me fizo ilusión recibir misiva suya et advertirme del suyo viaje hacia la ermita de Ataún, a pesar de que fieros fríos hacía por aquí. Por aquel entonces no era noble aún, que ganéme el favor del mio señor et una posición elevada en cuidando del suyo castillo, et siéndole fiel. Y siendo sinceros, no creo que sacar a relucir mi nueva condición fuera precavido, et ni siquiera útil. Asique caminé de igual a igual con aquel hombre que era curandero, et con el suyo criado. La nieve azotaba a todos por igual, esclavos y reyes, por lo que eso de quejarse no era sino baladí.

Al entrar en el caserón, ya notaba desde la entrada el calor de la grande estancia. Sólo recé porque estuviera bien protegido el mío jamelgo, que en un pueblo atrás había quedado por la imposibilidad de avanzar con él por las duras nieves. Al entrar en la vivienda frotéme las manos, e intenté inspeccionar todo cuanto pude en un rápido vistazo.

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11/02/2015, 21:12
Director

-Así es señores, esto es Ataun. Pasen adentro y sacúdanse esa nieve de encima, aquí entrarán en calor. dice el soldado al tiempo que toma el odre de vino ofrecido por Roberto y echa un trago.

Os apresuráis a entrar en la casa, notáis el ambiente cálido y un olor a comida recién hecha que os reconforta el espíritu.

- Buen vino, gracias.- dice mientras devuelve el odre a Roberto.- Voy a avisar al Conde de que han llegado.- El soldado sale por otra puerta, esperáis en el vestíbulo mientras el otro soldado os observa sin pronunciar palabra.

En unos minutos se abre la puerta por la que marchó el soldado y entra por ella un señor elegantemente vestido.

- Buenas tardes nos de Dios. Os echa un vistazo rápido y cordialmente dice: -Soy el Conde de Beasain, y esta es mi residencia de montaña. ¿A quien tengo el gusto de recibir?

Os presentáis, a continuación le explicáis que estáis de viaje, que os sorprendió la tormenta de nieve en el camino, y que buscáis refugio para pasar la noche.

- Pues vienen ustedes en mal momento, no por aciago Dios no lo quiera, sino por todo lo contrario, y es que hoy celebro una fiesta en mi morada y la tengo tan llena de huéspedes que no sabría donde alojarles.

Notas de juego

Aquí podéis hacer una prueba de habilidad de "Corte", o de "Elocuencia" (lo que tengáis más alto) para intentar convencer al Conde de que os ayude. Cuando se use la habilidad de "Elocuencia" si vuestro discurso me parece suficientemente convincente dada la situación en la que os encontréis, lograríais un éxito automático (independientemente del resultado de la tirada).

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11/02/2015, 23:45
Roberto Manecho

-Manecho es un hombre poco comunicativo, per tenaz si la situación lo requiere.

- Mi señor, sín animo de aminorar el motivo que dificulta nuestro acogimiento y que ensalza aún más el privilegio de que estos humildes siervos estén agora  bajo el techo de tan noble señor, me atrevo a faceros,  en la más acuciante de nuestras  necesidades una propuesta y es que como sí decís , siendo tantos vuesos invitados , quiza  a alguno de ellos  , una vez que el temporal amaine y todos regresen a sus respectivos casas, fuera menester que les acompañaran que aunque yo como  humilde curandero , que de poco sabe y que de casi  nada habla, entiende sólo de  dos direcciones,una al frente y la otra, atrasada  y por lo que hemos visto, ambas trabadas  y en estas condiciones hasta peligrosas y por mucho  o buen servicio que unos  señores llevaran , y los oficios  y las armas de los que aquí estamos  tal vez no estuvieran de más,  ocupando menos sitio y con menos ruido que el que bajo cualquier estancia de aquesta casa podría albergarnos , aún apretados, hasta que acabada vuesa fiesta y  al que le  fuese menester y llevando el mesmo sentido que el nuestro ,  necesitara ser escoltado en buena gana- Manecho termina su discurso haciendo  una sentida referencia-.

 

Notas de juego

Tengo un 10% en elocuencia, pero me quedan por poner los orgullos  y las vergüenzas, así creo que optaré por hacer el pj más locuaz como faceta a reforzar en su personalidad.

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12/02/2015, 13:22
Roberto Manecho
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Tirada de elocuencia 35%

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12/02/2015, 13:18
Alfonso Miranda

Escucho el discurso de Roberto, esperando que sea suficiente para convencer al Conde.

 Estoy poco acostumbrado a tratar con gente desde que me recluí en el monasterio et nunca he sido omne de muchas palabras, mas pasar la noche al raso non es una opción para ninguno de nosotros.

 Cuando termina Roberto añado

Non queremos causaros molestia alguna, mas la noche es fria et de dormir al raso segura es la nuestra muerte. 

Como podéis ver somos omnes de bien. Non molestaremos a vuesa merced ni a vuesos huespedes, et partiremos mañana temprano a continuar el nuestro peregrinaje.

 Terminado de decir esto inclino la cabeza en señal de respeto. 

 

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13/02/2015, 18:28
Uloxio Arrugas

Et que si d'aquesto no es menester el digno trato bajo el suyo techo, que habede un servidor de decirvos que como buenhombre que uno mesmo es -dije después de mi amigo Alfonso, apoyando y apostillando las dos intervenciones anteriores de mis compañeros-, he de manifestarle el justo trato de su Vuecencia para los renombrados de nobleza, como es uno, antes que a cualesquier otro. Et déjeme decirle, señor Conde de Besain, que dos cosas querría si fuera menester et si su dádiva generosidad el poder escucharme tuviera a bien: que una no es sino querer saber el suyo nombre, para honrarlo si es preciso et dar cuenta de que ni los hombres con aciago rostro rechazan -dije refiriéndome a mi mesmo-; et que la otra, mi señor, no es sino tender cobijo para ahuyentar del nuestro cuerpo el banal frío del que sólo son merecedoras las bestias que aliméntanse de carne helada, et no aquestos viajeros. No apelo a sagrado, que en casa de Dios no estoy aunque no dude de vuestra hospitalidad; et que más bien apelo a cobijo, por la disposición de mi nombre, Uloxio Arrugas, alcaide y caballero directo de mi buen y gran señor don Ximen de Muel, de la ferviente Corona Aragonesa, hijo de nobles y amigo del Su Majestad...

En esos momentos había revelado mi identidad nobiliaria a mis compañeros. A veces, quizá para estos casos*, lo sensato sería utilizar tales títulos para crear ventajas necesarias.

Notas de juego

*: Me la juego con discurso, sin tirada ni nada.